Amor entre serpientes (Dramione)

Nuevas relaciones, y extraños sentimientos

Hermione P. O. V.

Después de pasar el resto de la tarde con mi nuevo novio decidí ir a mi torre a bañarme antes de bajar a la cena, y eso fue lo que hice. Me duche y vestí solo con la falda gris, la camisa blanca y la corbata de mi casa un poco suelta. Me deje el cabello suelto y me maquille un poco. Al salir de mi torre estaba un chico recargado en la pared, uno muy guapo por cierto, se acercó a mi y me beso tomándome de la cintura, yo rápidamente le correspondi.

-Hola pequeña. -vaya, empece a andar con el para olvidarme de cierto rubio, y ahora el me llama como el.

-Hola. -dije sonriente. -¿Nos vamos? -tomo mi mano y juntos nos fuimos al Gran Comedor, muchos nos miraban pero no importaba.
Al entrar por esas puertas del Gran Comedor todas las miradas se dirigieron a nosotros, odio, envidia, alegría (unos pocos), enojo, celos, entre muchas otras. Decidida y arrogante como suelo ser, tome a mi chico del cuello y lo acerque a mi, el no dudo y nos besamos, primero fue lento y luego mas desesperado; no nos importaba que nos vieran, finalmente yo soy una Granger, y quien se atreva a contradecirme que se abstenga a las consecuencias. Creí que ya había sido suficiente así que me separe de el pero le pase el brazo por la cintura mientras que el hacia lo mismo, y nos fuimos a sentar con mi pequeño grupo de amigos.

-Saben chicos, deberían dejar eso para cuando estén solos. -dijo la morena en broma.

-Calla Pansy... -entendí su broma y le aventé un pedazo de pan entre risas.
De pronto Pansy, Theo, Blaise, Astoria y Alec fijaron su vista en la entrada del Comedor, al igual que todos ahí.

-No puede ser... -murmure.
Y ahí estaban, una nueva pareja, todos les miraban como lo habían hecho cuando Alec y yo entramos, aunque sentí aun mas miradas de odio, sumando la mía, claro.
De pronto la chica esa de cabello negro se acercó más al rubio y le beso, igual que como yo lo había hecho... Eso me enfureció demasiado, sentía que en cualquier momento sacaría mi varita y le lanzaría alguna imperdonable, pero tenía que calmarme. Esto parecía como una de esas escenas de películas muggles en las que el chico y la chica planean darse celos... Pero eso no es lo que yo intentaba, yo quería olvidarle... Pero si nunca me enamore... Entonces quería evitarlo. Si. Eso quería.
Pronto se acercaron a nuestra mesa, se sentaron con nosotros, Draco estaba al frente mío y la chica esa estaba frente a mi novio.

-Buenas noches chicos. -dijo Draco.

-Buenas noches. -murmuramos analizando a la chica de arriba a abajo.

-Quería presentarles a mi novia, Caroline Evans. -la señaló besando su mejilla.
ESPEREN, ¿PERO QUE HA DICHO? ¿Evans? Esa es prima de San Potter. Todos le miramos despectivamente. Ahora lo recuerdo, ¿pero como Draco puede andar con ella? Se supone que odia al cuatro ojos desde primero y ahora, ¿anda con su prima? ¿Además de que es mestiza? ¿Desde cuando el dejo los prejuicios a la sangre? No es que yo los tuviera, pero sabia que el si, no me aguanté más y hable.

-¿Así que tu eres la prima de Potter? -pregunte con altivez.

-Así es, tu eres la famosa Hermione Granger, la princesa de Slytherin. -me dijo casi en el mismo tono.

-Exacto. Me alegro que lo sepas. Y cuéntanos, ¿a que casa perteneces? -dije maliciosamente. Tenía ganas de humillarla.

-A Slytherin querida, es extraño que no lo sepas. -dijo retándome, yo no iba a permitir que esa me hablara así, era inferior a mi. Me percate que le dedico una sonrisita extraña a mi novio, eso me enfureció.

-Para nada, sabes, yo no soy de socializar con personas... -sonreí para mis adentros, luego le sonreí arrogantemente antes de decir. -de tu tipo.
Mis amigos se quedaron en silencio, Draco solo miraba la escena estupefacto, yo le hablaba así a la novia del príncipe de las serpientes, bueno, lo podía hacer, yo soy una Granger y hago lo que quiera.

-Hermione no le hables así. -intervino Draco.

-Querido, pero si ella fue la que comenzó a hablarme en ese tono. -dije haciéndome la inocente.

-Claro que no, fuiste tú la que empezó, eres una... -pero no termino por que mis amigos y novio intervinieron.

-¡A Hermione no le hablas así! -dijo
Pansy seguida por Astoria mientras se ponían de pie.

-¿Y por que no habría de hacerlo? -sonrió la chica desde su lugar; mirándolas irónicamente.

-Por que ella es la princesa de Slytherin y tu... Bueno tu solo eres la novia de Draco, una de esas de rato. -dijo Theo, ese chico era también un amigo muy cercano.

-Granger, Nott, les advierto que no quiero que le hablen así a mi novia, sea como sea ahora lo es y no permitiré conductas como esa. -al parecer Draco estaba enojado, el me llamo por mi apellido y eso jamás lo hacia. Me molesto demasiado que la defendiera, que se atreviera incluso a reprenderme, a mi, que se supone que soy su mejor amiga.

-Perfecto Malfoy, no te preocupes, solo adviértele a tu noviecita lo que le puede pasar si se atreve a molestarme. -la chica iba a replicar pero se escucho la voz del director.

-¡Silencio! ¡Atención! Tengo que informarles que los colegios Durmstrang y Beauxbatons ya se encuentran aquí. Démosle un fuerte aplauso al colegio Durmstrang. -todos comenzaron a aplaudir, a excepción de nuestra mesa, solo pocos lo hacían. Y entraron todos los chicos, con ese porte elegante y varonil. Todas las chicas nos deleitábamos con la vista que teníamos. Entonces lo vi. Allí estaba mi ex novio, el famoso búlgaro jugador de Quidditch, Viktor Krum. La verdad estaba diferente, se veía más guapo que antes pero no le mire por mucho ya que mi novio percibió mi mirada, así que me acerque a el y le di un beso. -Ahora, un fuerte aplauso para las chicas del colegio Beauxbatons, que vienen acompañadas de la profesora Madame Maxine. -y mas aplausos, las chicas esas entraron con sus típicas sonrisitas, bailoteando y lanzando suspiros, los chicos las miraban embobados, eso me molesto, no estaba acostumbrada a que no me miraran. Aunque a decir verdad, una buena cantidad de chicos solo me veía a mi. Frente a ellas iba esa mujer gigante que era aún más alta que el guardabosques; el tal Hagrid, se rumoreaba que tenían una relación desde el Torneo de los Tres Magos. Como sea, eso no me importa, me percate de que Draco seguía a las chicas con la mirada, me levante furiosa sin entender por que, los de mi mesa y de otras mesas se dieron cuenta de mi comportamiento y me miraron extrañados, yo solo recogí mis cosas y les lance una mirada de odio a todos, mi novio me hablo.

-¿Hermione que pasa? -preguntó ante la extrañada mirada de los demás.

-Nada, ahora déjame sola. -dije con carácter y salí del Gran Comedor, con todas las miradas fijas en mi, sentí que unos ojos grises me miraban pero decidí ignorarlo.
Me fui directamente a mi torre y me metí a mi habitación, comencé a lanzar cosas y deje mi habitación hecha un desastre, no entendía mi furia, pero después me di cuenta, ya era tarde para evitarlo, era imposible que intentará alejar ese pensamiento de mi mente.

Estaba celosa.

Estaba celosa por que me había enamorado de Draco Malfoy.