Amor entre serpientes (Dramione)

Una autentica princesa

Draco P. O. V.

Después de ir al desayuno con mi preciosa novia, me escape al Londres muggle (ayer que me escape de mis amigos estaba en Hogsmeade) ya que ella se iba con Pansy y Astoria a arreglarse para el baile (aun no entiendo porque las chicas necesitan tanto tiempo).

Me dirigí a la joyería a recoger el "obsequio-de-mi-madre-que-en-realidad-era-para-mi-novia".

Ese lugar era muy elegante, había diamantes, esmeraldas, perlas, y demás joyas de costos altísimos que solo personas con suficiente dinero se permitirían, entre ese pequeño circulo de personas estaba yo; comprándole un anillo a mi novia.

Me acerque a la muggle que atendía ahí, se veía amable y era muy guapa; pero es muggle, y por sobre TENGO NOVIA.

-Buenos días, ¿que se le ofrece? -me pregunto sonriéndome.

-Vengo a recoger un anillo. -conteste secamente.

-¿Cual es su nombre? -preguntó.

-Draco Malfoy. -conteste y ella comenzó a oprimir con sus dedos una especie de tabla de plástico con botones en los que habían letras escritas, mientras miraba de reojo algo parecido a una caja, pero mas delgada y compacta.

-Si, si, aquí está... -me sonrió. -Usted encargo un anillo para mujer ayer. -dejo de sonreír.

-Así es. -respondí con firmeza. -¿Esta listo?

-Por supuesto señor Malfoy, en un momento lo traigo. -se metió a una habitación y salió de allí con una pequeña cajita de terciopelo negra, me la entrego y yo me quede asombrado por la elegancia y sofisticación de aquella joya.

-Muy bien, ¿cuanto es?

Hermione P. O. V.

Después de desayunar me fui con las chicas a prepararme para el baile, aunque en realidad primero me fui a descansar un rato a mi habitación, ya que Draco se fue a no se donde por el regalo de su madre.

Me recosté sobre mi cama dejando que mis suaves sabanas de seda acariciaran mi piel, y caí rendida en los brazos de Morfeo.

Me desperté por unos golpes en mi puerta.

-¡Hermione! ¡abre! -reconocí a Pansy.

-¿Que pasa? -respondí tapándome con las sabanas.

-¡Ya es hora de arreglarnos, faltan tres horas para el baile! -hablo As.

Mire la hora y vi que en efecto, eran las 5:00 p.m.

-¡Voy! -dije y fui a abrir la puerta.

Entraron las chicas con los vestidos, estuches de maquillaje, zapatos y todo, venían llenas de bolsas ya que habíamos decidido arreglarnos en mi habitación, colocaron todo en la cama y con un hechizo convertimos mi habitación en un salón de belleza.

-Hermione, entra a ducharte; As y yo ya lo hicimos en nuestra habitación. -dijo Pansy, asentí y metí a bañar.

Mientras me duchaba solo escuchaba murmullos y gritos como: "Astoria quiero ese brillo labial" o "Pansy apúrate para que me peines".

Termine, y me envolví en una toalla, me coloque la ropa interior y me amarre una bata, para poder arreglarme a gusto.

-Ya estoy chicas, ¿empezamos? -pregunte.

-Si Hermi, no aguanto por verte puesto el vestido, ¡esta divino! -dijo Pansy.

-Bueno, entonces ven y siéntate aquí Hermione, yo te maquillo. -hablo Astoria y me fui a sentar a una silla de salón de belleza en la que al frente había un gran espejo con muchos focos. Ahí estuve unos 15 minutos. -¡Lista! Quedaste muy bien querida.