Amor entre serpientes (Dramione)

Primer casi beso

Quiero dedicar este capitulo a mi amiga @DramioneFanfics, quien también me ha dado ideas para este fanfic, sin duda es la persona con quien me desahogo cuando leo un fanfic en que nuestro precioso rubio esta al borde de la muerte, o cuando el y Hermione viven una triste historia de amor. Te quiero! Eres una gran amiga, Dios te bendiga, no pongo tu nombre pero sabes quien eres! ❤️

Hermione P. O. V.

Después de recordar todo lo que había pasado un verano antes de entrar a mi quinto curso, me dirigí al baño y me duche. El agua caliente recorría mi cuerpo y me relajaba, no había sido un día pesado, pero estaba algo fastidiada, con las prisas de ir a la estación, el camino, no había dormido bien la ultima noche y lo que necesitaba era relajarme. Salí de la ducha y me cambie, me puse una cómoda pijama de seda plateada, me cepille un poco el cabello y me dirigí a mi cómoda cama. Levante las sabanas y me metí abajo, en ese momento quede profundamente dormida.

Horas después abrí los ojos, me desperece y me levante. Saque mi uniforme y mi ropa interior y fui al baño. Me bañe rápidamente y me cambie. Salí y me peine, deje mi cabello suelto, lo alacie dejando ondulaciones en las puntas. Me maquille muy poco, solo rímel, delineador y labial rosa natural. Me gustaba mi uniforme, la falda me llegaba una palma sobre la rodilla, no era ni tan largo, ni tan corto como lo usaban las de mi casa, esas parecían unas... Mejor no lo digo. Llevaba la camisa blanca con el primer botón desabrochado y con la corbata un poco suelta. Ese día decidí no ponerme el jersey de mi casa ya que era un día soleado, no estaba tan frío, así que solo me coloque la túnica que me quedaba perfectamente a la medida. Tome mis cosas y salí a mi sala común. Potter y Diggory ya estaban ahí.

-Potter. Diggory. -salude.

-Granger. -dijo Potter

-Buenos días Hermione. -hablo Diggory.

Sonreí. Ese chico me caía bien. Pero de Potter no podía decir lo mismo.

-¿Deseas un poco de café? -me ofreció el Hufflepuff.

-No gracias, tengo que ir a despertar a Draco.

Los dos rieron, yo solo les recorrí con la mirada a cada uno.

-¿Que es lo gracioso? -dije seria.

-Bueno, que tengas que despertar a tu amigo... Teniendo la edad que tiene. -dijo Potter y volvió a reír.

-Mira Potter... -me calle, preferí no armar un problema, además se nos haría tarde. -Ah... Olvídalo.

Los ignore y me dirigí a la habitación de mi amigo, toque la puerta y nadie abrió, así que use un Alohomora y entre. Estaba muy lindo, durmiendo como un bebe. Me acerque.

-Draco... -lo zarandee un poco. -¡Draco! -hable mas fuerte. -Draco, ahora. -escuche un murmullo que no distinguí. -Si no te despiertas...

-Haz lo que quieras. -hablo bajo.

-Bien, así lo quisiste rubio terco.

Me acerque apoye mis rodillas en la cama al momento que le hacia cosquillas por el cuerpo. Sabia que esa era su debilidad. Cualquiera que nos conociera pensaría que los Slytherins somos unos aburridos y amargados, pero la verdad es otra, entre nosotros, somos de lo más amigables y nos cubrimos las espaldas. Aunque no siempre es posible llevarte bien con todos.

-¡Hermione ya! ¡Por favor! -reía pero ya estaba desesperado, decidí seguir.

-Tu te lo buscaste. -me apoye sobre el y continúe, el ya estaba que se ahogaba de la risa, y yo también viendo la indefensa forma en que lo torturaba.

De un momento a otro me tomo de las muñecas y fue un cambio de papeles. El comenzó a hacerme cosquillas a mi, se vengo.

-¡Draco! ¡Déjame! -suplique.