Chris
Me gustaba ver a Amelia feliz, sé que es feliz estando con su familia y ahora amigos, me encantaba ver las pequeñas arrugas de sus ojos cuando sonreía porque era una sonrisa real, genuina, si pudiera quedarme aquí con ella lo haría, pero tengo que regresar y no habíamos hablado sobre eso, si es que ella quería regresar conmigo.
— te veo pensativo — acarició mi barbilla con su dedo índice.
— Me gusto verte sonreír mucho hoy.
— Tenía rato que no veía a mis amigos.
— ¿por qué Nadia y tú se dejaron de frecuentar como mejores amigas?
Ella lo meditó un rato antes de contestar.
— No lo sé, de la noche a la mañana no teníamos nada en común excepto los años, yo en ese momento tenía a Alex que se había vuelto mi mejor amigo y confidente.
— ¿Te arrepientes?
— No, nunca he sido de las que hablan mal de sus ex's y esas cosas aprecio mucho el tiempo que me dieron y trato de recordar lo bueno, no lo malo.Sus amigos me habían caído bien incluso Saul, aunque me amenazó de no hacerle daño a Lia, quería esa vida para mí, quería que las personas incluso después de un tiempo se sigan preocupando por mí, por ser yo y no un príncipe.
— ¿me vas a decir en lo que realmente piensas?
Se puso arriba de mí para verme directo a los ojos.
— Por más tiempo que quiera estar aquí, no puedo seguir evadiendo mi responsabilidad.
— Tienes que irte.
Asentí con la cabeza, se empezó a morderse el labio.
— ¿cuándo?
— Todavía quedan unos días.
— ¿semana?
— No.
— Está bien.Estaba triste, no quería que Amelia estuviera triste de nuevo.
— Amelia sé que es mucho lo que te voy a pedir y no quiero ser un egoísta, pero quiero que vengas conmigo. Sé que aquí tienes a tu familia y amigos, que una vez ya los dejaste por seguir a otro, te amo demasiado para dejarte aquí, pero también te amo demasiado para entender si no quieres hacerlo tu felicidad es importante para mí, no puedo prometer miel sobre hojuelas porque me vienen tiempos difíciles, pero si puedo prometerte mi corazón que siempre lo tendrás incluso si no accedes y haremos que de alguna forma funcione.
Ella me miró unos segundos analizando todo lo que le había dicho.
— no quiero que respondas ahora, piensa en ello.
Le di un beso en los labios, quería más, no estaba seguro qué iba a responder así que quería aprovechar el tiempo que nos quedaba para estar con ella.
Los últimos días me llevo a la playa y conocí a su demás familia, según ella no era ni la mitad, trate de ocultar mi preocupación sobre si aceptará o no irse y si no lo hace, no la culpo, yo tampoco quisiera irme, aunque sus abuelitas me hayan amenazado con ayuda de Juan que sabía inglés, había hablado con su hermana y al parecer habían solucionado su problema.
Las mujeres son tan diferentes a los hombres, Daniel y yo no hemos peleado por muchas cosas, solo cuando éramos pequeños, pero por quien le tocaba ser el villano, no soportaría no tener a mi hermano cerca de mí es el único que me entiende y escucha de verdad, sé que puedo confiar en él, nunca me traicionaría.
Estos días me habían gustado, podía actuar como yo, no tenía que fingir. Me gustaba como me trataban, aunque al principio no supieran, sabía que Amelia había hablado con ellos antes y lo agradezco, me hicieron sentir normal, tenía razón Amelia, su ciudad era tranquila y no me reconocieron, aparte que nadie subió fotos de nosotros, lo cual sé que también tiene que ver Amelia, incluso James lo incluyeron en la comida, no se sentía a gusto porque sabía que no estaba acostumbrado, esas no eran las reglas, pero aquí nos hemos saltado demasiadas reglas.
— ¿Qué vas a hacer?
— mañana pasó por ti.
— ¿seguro?
— Si.
— ¿Qué te dijo?
— Aún no me contesta.
— ¿Crees que acepte?
— No lo sé, espero y si.
— Mañana ya regresas y ¿no te ha contestado?
— No.
— ¿Dónde estás?
— En el hotel.
— ¿y ella?
— A salido hablar por teléfono.
— te escuchas diferente.
— Me siento diferente aquí.
— Lo que hace el amor.
— Eso y las personas aquí, la familia de Amelia.Amelia entró a la habitación guardando su teléfono en su bolsillo trasero del pantalón.
— Dan hablamos luego.
— Nos vemos mañana Charly.Colgué el teléfono, Amelia se sentó en el borde de la cama para luego dejarse caer por completo.
— ¿Qué pasa?
Me acerqué a ella he hice lo mismo, los dos mirábamos al techo.
— nada, estoy un poco cansada — Busqué su mano y la tomé — ¿era tu hermano?
— Si.
Nos quedamos en silencio unos segundos solo podía escuchar su respiración.
— Era para preguntar a qué hora llegaré mañana.
— Chris...Ya sé lo que me dirá, no sé si estoy listo para oírlo la mire y ella seguía viendo al techo.
— No sé si estoy lista aún para que la gente hable y diga cosas de mí, cuando todo esto se sepa como ya viste no soy rica, ni mucho menos tengo un título que diga que soy duquesa.
Aquí vamos, ella me miró.
— Así que cuando lleguemos a Londres ¿podríamos mantenerlo en secreto por un rato hasta que me adapté?
Mi corazón dejó de latir por un momento y recobro vida ¿acaso había dicho "cuando lleguemos a Londres"? ¡Si vendrá!
— ¿Vendrás?
Ya lo había dicho, pero necesitaba confirmar.
— Si — me sonrió.Amelia sabía cómo hacerme feliz, quería gritar a los cuatro vientos que era mía, que me había sacado la lotería, pero la entiendo, no está acostumbrada a todo eso, podía soportar eso.
— por lo menos ¿podría presentarte a mis padres?
— Déjame pensarlo — me dio un beso rápido en los labios.En un movimiento me puse encima de ella y la besé.
Sé que tenía que dejar listo todo para mañana, pero hacerla mía no nos quitara nada.
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Real Love
RomanceAmelia solo quería una vida feliz a lado del amor de su vida. Tenía su vida planeada en su cabeza, pero nunca imagino que mudarse a un continente diferente, lo cambiaría todo. 12/02/2019