Real Love

Capitulo 17

Amelia

La luz del día se filtraba de las cortinas lo que hizo que me levantará, el brazo de Chris estaba en mi cintura, me quite de su agarre sin despertarlo, no quería verme en el espejo porque sabía que iba a lucir horrible, puse la regadera tenía que ir a trabajar, me termine de arreglar para verme decente, aún tenía una hora para llegar al trabajo le dejé una nota a Chris.

Tuve que aguantar las ganas de llorar en camino al trabajo agarre el autobús porque quedaba un poco retirado, cuando llegue la recepcionista me saludó pase a la sala donde ya se encontraban como 5 personas me senté a lado de la muchacha con cara agradable.

— Hola, me llamo Alice.
— Mucho gusto, soy Amelia.
— Eres latina ¿cierto?
— Si soy de...
— no lo digas, aún no sé de qué parte, pero cuando hablemos más lo descubriré.

Eso fue extraño.

— ¿Cuántos idiomas hablas?
— francés, portugués, alemán, italiano, español, inglés es obvio y ruso.
— mexicana ¿Cierto?
— Si.
— Sabía que lo adivinaría.
— ¿Cómo puedes?
— Bueno he tratado de viajar a los países de los idiomas que aprendo para practicar.
— Eso es bueno.
— Lo es, conoces gente.
— Me hubiera encantado hacer eso.
— aún puedes hacerlo, nunca es tarde para nada.
— Eso es verdad.
— soy de Irlanda.
— Con razón el acento.
— Culpable ¿Cómo es que vives aquí?
— Vine...

No sabía si decirle la verdad o mentirle.

— Bueno... Fue más bien.
— ¿Siguiendo a alguien?
— Lo fue.
— no eres la única ni la primera que lo hace.
— Es verdad, pero no lo sé, es raro.
— no lo es, las personas hacen cosas por amor.
— Tienes razón.

Ya me caía bien Alice, a pesar de ser más hablantina que yo.

— Ese de ahí es Drew con Justin son mis amigos también nos conocimos aquí en el trabajo.

Mire a los que se encontraban platicando entre sí.

— después te los presento terminando siempre vamos al bar que queda a una cuadra por si te quieres incluir.
— Gracias.

Antes que ella pudiera decir algo una señora entro con una falda de lápiz y saco.

— Buenos días — dijo en francés todos respondimos ella sonrió — antes de empezar — ahora hablaba en inglés, dejo unos papeles en la mesa — tenemos nuevos compañeros como creo ya habrán visto, no se preocupen no haré que se levanten como en la escuela, Bienvenidos.

Empezó a explicar sobre el trabajo y de que se trataba.

— Muchos de ustedes están por contrato y otros de base, la base se gana conforme a la marcha, este mes es de mucho trabajo como sabrán se acerca el cumpleaños del Rey Carter, lo cual vienen muchas personas de diferentes lugares, sé que algunos son nuevos aquí y no están relacionados con nada respecto a la realeza y los protocolos, de eso hablaremos hoy.

Nos enseñó cómo dirigirse a la realeza y a los demás, todo lo que escuchemos queda en total discreción, no podemos opinar y permanecer en 3 plano.

— ¿te anotas? — como vio mi cara de confusión — al bar — explicó.

Chris de seguro estaba en el trabajo, no quería llegar a su departamento a ser miserable, necesitaba aire fresco y convivir con personas.

— está bien.
— excelente, los demás ya se adelantaron, te vas a costumbre al clima de aquí.
— Eso espero, de dónde soy es todo lo contrario de aquí.
— de dónde soy bueno... es así el clima.

Las dos empezamos reír por su pequeña broma.

Llegamos al bar que estaba decorado con cosas de fútbol, el barista la saludo.

— venimos muy seguido aquí — nos acercamos a la mesa donde se encontraban los demás.
— chicos, esta es Amelia.
— Mucho gusto Amelia — dijeron todos al mismo tiempo.
— Hola — les sonreí.

Cuando no conozco a la gente suelo ser un poco tímida.

— Toma siéntate — Drew me ofreció su lugar.
— Gracias.
— Amelia, él es Justin como ya te había dicho, ella Devlin, Palmer y Drew.
— ¿Quieres algo para tomar?
— Una cerveza está bien.
— Cal dos cervezas, por favor — dijo gritándole al mesero.
— Dinos Amelia ¿Cómo terminaste Aquí? — preguntó Palmer.
— Me mudé aquí porque...
— Ya le pregunté eso chicos.
— sí, pero nosotros no lo escuchamos.

No quería decir nada, porque de solo pensarlo se me hacía un nudo en la garganta.

— Quiso un cambio de ambiente y vio mejor oportunidad aquí.

Dijo Alice tajante, para que nadie pregunté más sobre eso, le agradecí con la mirada.

— Bueno, con nosotros es bastante cambio — dijo Drew — viniste al lugar correcto.
— ¿Según quién?
— Yo, somos la onda.
Devlin puso los ojos en blanco.
— ajá.

Cal el mesero trajo nuestras cervezas, le di un trago a la mía.

— ¿El trabajo es muy complicado?
— a veces te desvelas, a veces no — Justin dijo, me sonrió mostrándome sus blancos dientes — Pero conoces los secretos de los demás.
— Justin no se puede decir nada, hemos firmado confidencialidad — lo reprendió Devlin.
— No iba a decir nada.

Hizo que cerraba su boca con un candado y arrojo la llave imaginaria, Devlin puso los ojos en blanco.

— A veces eres muy molesto.
— Solo para ti.
— Y los demás — dice bromeando Drew.
— Envidias mi sentido del humor.
— Claro... si tú lo dices.

La estaba pasando bien, me gustó que me incluyeran en la plática por unas horas me olvidé de todo incluido Chris, saque mi teléfono de mi bolsa se me había olvidado ponerle sonido de nuevo tenía llamadas de él y mensajes, le marqué contesto enseguida.

— lo siento, tenía el teléfono en silencio — me metí a un sanitario para poder escuchar sobre la música y el bullicio.
— ¿Sigues en el trabajo?
— No, estoy en un bar.
— ¿En un bar?
— si me invitaron los del trabajo ¿Sigues en el trabajo?
— No fui a trabajar.
— ¿En serio? Pensé...
— Bueno... quise quedarme contigo.

Me sentí mal, Chris había faltado al trabajo por mí y yo aquí en un bar.

— Iré para allá.
— Amelia si estás bien ahí, no importa.
— No, pensé que irías a trabajar no quería estar sola en el departamento...
— te amo cariño.
— y yo a ti.

Amaba que Chris comprendiera mis sentimientos en estos momentos, no es fácil dejar a alguien con la que habías planeado pasar tu vida.