xvii.
PAUL MCCARTNEY CANTABA LOVE ME DO AL OÍDO de BJ aquella tarde de otoño.
La chica se había levantado de buen humor, asistió a sus clases de la mañana, hizo la tarea con Susan, Ron y Chris (o más bien, consiguió que Chris la ayudara a obligar a Susan y Ron a acompañarla a hacer la tarea) y pasó gran parte de su día en la biblioteca junto a sus amigos, donde se sentía más tranquila que en los lugares públicos, porque en esos la gente básicamente... bueno, se dedicaría a molestarla.
Billie Jean estaba harta de ser la niña débil a quien pisoteaban todo el tiempo.
Así que, devuelta en la sala común de Hufflepuff, mientras movía la cabeza al ritmo de la armónica de John Lennon que emitía el tocadisco, se decidió a que no volvería a suceder.
Nadie pasaría sobre ella nunca más.
— ¿Por qué estás tan alegre? — le preguntó Chris, dejando secar su ensayo de Pociones que Snape les había dejado para el lunes. Su cabello rubio cenizo estaba, como normalmente, peinado hacía un lado, y sus ojos azules estudiaron el rostro de Billie Jean con precaución.
Ella estaba tirada en el sofá frente a la chimenea. Ron en el suelo, recostando la espalda contra las piernas de Billie Jean, bastante atareado terminando las redacciones que había dejado acumular el fin de semana incluso si Billie Jean le advirtió varias veces que iba a terminar arrepintiéndose de esa decisión. Del otro lado de la mesa que ocupaba Ron, estaba Susan, con el cabello amarrado en una trenza y una mueca de concentración. Billie Jean era la única de los cuatro que ya tenía todo terminado.
A Billie Jean no le gustaba mucho el estudio, pero le gustaba aún menos cada vez que se estresaba con las tediosas tareas. Siempre había tratado de tener todo listo de antemano para no terminar lloriqueando luego, probablemente a media noche (como Ron hacía todo el tiempo hasta que ella sentía compasión y terminaba ayudándolo) porque tenían un ensayo largo para primera hora del día siguiente y este no estaba concluido.
— ¿No puedo estar alegre? — devolvió Billie Jean, estirándose en el sofá.
— No has estado alegre desde finales de curso — dijo Susan, mirándola con precaución. Al iniciar el año, ella se veía muy pendiente de Billie Jean, como si tratara de averiguar qué cambiaría en su actuar porque que ya no se hablaba con Potter y Thomas. Billie Jean se encogió de hombros, ignorándola. Sabía que Susan sólo estaba preocupada por ella, aunque Billie Jean no veía nada de lo que debiera preocuparse — Me gusta.
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[4] TOCADISCOS ━━ harry potter
Fiksi PenggemarCuando las cartas de Hogwarts arriban al pequeño apartamento de Lambeth que Billie Jean comparte con su tutora, Cher, y su hermano mayor, Tom, ninguno de ellos pudo haber esperado lo que el futuro les deparaba solo con asistir a la infame escuela de...