Jóvenes Extraordinarios 2 Pequeño Egoísta

Familia

No supo que le hizo ir a la reunión, no fue invitado.

Desde que Ben le dio la noticia no se habían hablado para nada, sabia de la reunión por sus padres y por Jesse, porque Alan y él fueron invitados, y por las Suv negras los Brooks también.

De pronto el regalo en sus manos se sentía demasiado pesado, ¿A quién se le ocurre hacerle un Baby a un hombre aparte de a Ezio?

Entró a la casa y estaba vacía, la fiesta estaba siendo en el jardín, todo estaba lleno de globos en colores pastel y una mesa estaba atiborrada de regalos, Ben estaba muy guapo, llevaba un polo verde menta que le quedaba perfecto y una mujer colgaba de su brazo, era la misma del café, sólo que más llena, con una prominente barriga que hacía que Andreas quisiera salir corriendo.

El anillo en su dedo se sentía caliente y pesado, ese era su lugar, el debería de ser él que colgara del brazo de Ben y recibiera esas felicitaciones, no ella.

Supo en el momento que lo vieron pues todos guardaron silencio. La mujer soltó a Ben y palideció un poco.

Se sintió la malvada bruja arruinando el cuento.

- Andreas.

- Supongo que no me esperaban.

Ben camino hacia él con una sonrisa enorme que le partía el corazón, pero no se movió, dejó que su esposo lo abrazara llenándole del calor que tanto echaba de menos.

- Estas aquí, viniste.

- Bueno, es tu... será nuestro... yo... eres mío Ben, este es mi lugar.

No lo dijo, no podía y Ben sabía que no significaba nada, pero tener a Andreas de la mano cuando todo se llenó de azul anunciando que su bebé sería un varón lo hizo sentirse completo, aunque fuera por un instante.

**

Era tarde y Andreas estaba disfrutando del calor y la seguridad del cuerpo de Ben después de un largo día en el hospital, besarse suavemente mientras dormitaba en sus brazos se había vuelto su parte favorita del día, las cosas comenzaban a calentarse cuando el agudo llanto de un bebé lo sobresaltó, Ben se separó del beso de inmediato y se puso de pie.

Andreas hizo lo mismo abrochándose la camisa que ya tenía abierta.

- Espera, no tienes por qué irte, dame cinco minutos y volverá a dormir.

- Y despertara de nuevo en tres horas, estoy cansado y tengo que dar una clase muy tempano y consultas después dejémoslo para otro día.

- Te echo de menos Andreas, podrías sólo por esta noche...

Andreas se acercó a Ben y le dio un beso delicado en los labios, cuando el bebé nació Andreas entró en pánico y aceptó que no podía con ello, no podía ser parte de eso, sin embargo, firmó los papeles, el bebé era tan suyo como de Ben, Nicola Reeve Katsaros.

- Lo siento, me voy a mi apartamento.

- ¿No quieres verlo? ¿Lo odias verdad?

No lo odiaba, pero tampoco quería encariñarse del pequeño, era un niño muy hermoso que se parecía a Ben incluso a sus pocos meses de vida, tenía ese color de cabello y risos hermoso, Andreas no podía odiarlo.

- No, sabes que no estoy listo para esto Ben, te veo luego.

- Te amo, cuídate es tarde.

- Yo también.

Andreas nunca decía te amo, un "yo también" o "lo sé" eran las respuestas que Ben siempre recibía, su único consuela era ver el anillo que le dio al griego aun en su dedo cada vez que se veían.

***

Andreas caminaba a su consultorio cuando una enfermera se le acercó con un presente envuelto en una caja azul con un enorme moño, trató de hacer memoria, pero no podía recordar si era aluna fecha especial.

- Doctor Katsaros, este es un presente para su hijo, es un bebé hermoso, muchas felicidades.

- ¿Gracias...como se enteró del bebé?

- Su padre nos enseñó fotografías de él a todos, no hay un abuelo más orgulloso.

Andreas tomo el regalo y se despidió de la enfermera con una sonrisa ensayada, fruto de años de entrevistas molestas.

Encontró a su padre en la oficina de Brian, como si él no tuviera su propia oficina como jefe de cirugía.

- Lindo regalo, pensé que habías olvidado mi cumpleaños.

- Me puedes decir por que una enfermera me acaba de dar un regalo para "tu nieto".

Evander estaba muy decepcionado de su hijo estos últimos meses, esperaba pronto tener la oportunidad de abordarlo, no pensó que fuera este quien fuera a él.

Doctor Katsaros...Rice favor de presentarse en el ala norte.

- Descuiden no es una emergencia, les he dicho que cuando lo sea me llamen Rice, pero amo como suena todo junto.

Andreas aceptaba que su padre se merecía ser amado como lo hacía Brian Rice, presumiéndolo a todos como su esposo, cuidándolo y consintiéndolo.

- Mientras soy yo el que tiene que esperar en la pausa dramática.

- Katsaros, Katsaros Rice y Katsaros Reeve, que bueno que Ezio no estudió medicina.

A veces rayaban en lo ridículos de tanto amor que se demostraban, las enfermeras adoraban su relación, hasta se prestaban para esas tonterías al bocear sus nombres y extrañamente ambos recibían regalos de sus admiradoras secretas en san Valentín.

Después de un beso largo de despedida Brian salió de su oficina dejándolos solos.

- Andreas, ¿me consideras tu padre?

El menor no se esperaba esa pregunta, cuando se enteró de lo que su madre le dijo, que Evander Katsaros no era su padre, él aun le guardaba rencor a este por dejarlo partir con un desconocido, hasta pensó que lo hizo por eso, pro que no era su padre y no le importaba, pero con el tiempo se dio cuenta que ese hombre lo amaba y que había sido el padre que pensó en su bienestar más de lo que su madre lo hizo.

- Lo eres.

- Entonces, por qué te refieres a Nicola como "mi nieto", acaso no es tu hijo.

Evander pudo ver en el rostro de su hijo la pugna.

- Eres joven, eso lo entiendo y Ben fue egoísta al tener un hijo sin tu consentimiento, pero eres su padre, lo eres por que ese niño va a crecer creyendo que lo eres, crecerá amándote incondicionalmente como un hijo lo hace, por que no es sangre lo que nos une, es amor.

Andreas se negaba a cargar al bebé, pensaba que, si no lo tocaba o no lo veía, ese bebé no era real, era solo un capricho que Ben tenia, era como ese cachorro que Ben le dio, al principio era lindo y pequeño, pero después creció y ya no le causo ternura, pero Ben, Ben lloró cuando murió por un problema renal.

Eran demasiado distintos.

- Hay una forma de dejar todo atrás, pídele el divorcio, déjalo, deja a Benjamin Reeve libre y no serás padre, no serás esposo, pero yo no dejaré de ser abuelo, ni Ezio tío, ni Ben familia.