─Definitivamente harás horas extras por tu falta de ayer─su jefe, o como solían llamarle "Fatgum", le hablaba con un tono de voz fingidamente autoritario; tal vez por eso algunos empleados le tenían cariño─. Y claro, sólo por hoy.
─Está bien, tampoco tengo problemas─le aseguró Tamaki─. Usted ha sido muy flexible en cuanto a... quebrar los platos, así que debo agradecérselo.
─Eso no significa que te tomes la libertad de seguir quebrando otras cosas, eh?─le dijo Fatgum en forma de broma, aunque no dejaba de ser verdad─. Ya puedes volver a tus labores.
Tamaki asintió, abandonando la oficina. Ese día había mucha influencia de gente en el restaurante, por lo que había mucho trabajo que hacer, en todas las áreas; en más de una ocasión hubo quienes le hablaron, pero no conseguían capturar su atención sin tener que tocar su hombro para que reaccionase.
No había logrado despejarse tras darse un día libre encerrado en casa, sino que acabó siendo contraproducente.
─Hey, Tamaki─la voz de Kendo se hizo escuchar a su lado, teniendo que verse en la obligación de voltear a mirarla.
─Sí?─le respondió de vuelta con amabilidad.
─Pasa algo? has estado distraído y ahora mismo te ves algo pálido─le preguntó ella, notándose genuinamente preocupada.
─Me levanté con el pie izquierdo hoy... eso es todo─al final, Tamaki le mostró una sonrisa de disculpa, claramente forzada.
─Kirishima también se ha dado cuenta─le hizo saber ella, apoyándose en el mesón de al lado─. Y si yo estoy preocupada, imagínate como está él.
─Nunca me ha gustado que se preocupen por mí─Tamaki frotó con fuerza la esponja sobre uno de los platos, jurando que si hacía más presión, podría quebrarlo.
─Es inevitable si eres importante para esa persona─razonó Kendo, mirando a través de la ventana, viendo a Kirishima yendo de aquí para allá tomando pedidos─. Le sugerí que te hablara personalmente, pero dijo que lo mejor era darte tu espacio.
─Él tiene sus problemas y yo tengo los míos─se excusó Amajiki, sabiendo perfectamente la verdad escondida tras esa excusa del pelirrojo─. Yo tampoco quiero agobiarlo con mis... asuntos.
─Sabes... conozco desde hace tiempo a Kirishima, y sé que ustedes se conocen desde la preparatoria─Kendo sonrió con gracia, algo que al azabache le puso nervioso de repente─. Y también sé que algo pasó entre tú y él, además de que Kirishima es demasiado obvio.
Amajiki se lo pensó por unos minutos, hasta que suspiró resignado; qué más podía perder llegando al fondo de la conversación?
─Qué es lo que te ha dicho él? algo en concreto?─acabó preguntándole, pretendiendo que no le interesaba lo suficiente como para darse a malinterpretar.
─Mmm... sí─ella sabía que Eijiro quería mantener confidencialidad en cuanto a temas amorosos, pero también podría ayudarle si le revelaba ciertos detalles al azabache─. Hay veces en que habla de ti cuando nos juntamos, además se emocionó tras volver a verte después de tantos años! y últimamente... le brillan los ojos al decir tu nombre.
"Tus sentimientos están aferrados a alguien más, Tamaki. No hagas que se repita si tu corazón late por él."
─Soy el peor partido que Kirishima podría elegir─le dijo el azabache, encogiéndose de hombros─. Él es un buen chico, y una persona jodida como yo no es adecuada para estar a su lado de esa forma.
─Kirishima es libre de quererte, con tus defectos y todo─le aclaró Kendo con un deje de insistencia─. No es de juzgar sin antes conocer perfectamente a una persona, así que podría ser un buen partido para ti.
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Young Blood | MiriTama
FanfictionAU.| Una juventud desbordante con sentimientos aferrados al corazón, perdiendo la oportunidad de darse a escuchar. Todo dando vueltas a su alrededor en ocasiones, para aclararse cuando da marcha atrás. Dos mundos a cada costado, uno de ellos condená...