5

2K 245 96
                                    

Doctrinas y Convenios 19: 15-16

"Así que, te mando que te arrepientas; arrepiéntete, no sea que te hiera con la vara de mi boca, y con mi enojo, y con mi ira, y sean tus dolorosos; cuán dolorosos no lo sabes; cuán intensos no lo sabes; sí, cuán difíciles de aguantar no lo sabes.

Porque he aquí, yo, Dios, he estas cosas por todos, para que padezcan, si se; arrepienten."

No podía dejar de mirarlo por el rabillo del ojo, después de lo que me dijo antes de ir a los baños estaba distante

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

No podía dejar de mirarlo por el rabillo del ojo, después de lo que me dijo antes de ir a los baños estaba distante.

«Y no sabía por qué aquello me dolía»

Tal vez solo necesitaba su cercanía como la de una amistad, sí, simplemente tenía que ser eso.

«No me podía empezar a gustar su intimidante compañía»

Yoongi transmitía esa actitud imponente, que a simple vista parece ser una persona creída y que nada le importa; pero yo creo que no es así... Quiero decir, no lo conozco mucho, pero se portó muy lindo cuando tuve la pelea con mi madre además que ese primer día fue... mi primer beso.

«Nuestro primer beso»

De solo pensarlo estaba empezando a ponerme rojito.

Mi maestra de escuela dominical estaba hablando sobre el estudio de las escrituras, pero realmente no me interesaba; yo solo quería estudiar la rareza de Min Yoongi. Tenía mi vista en el Libro de Mormón, pero no entendía nada, mis pensamientos estaban sumergidos en aquellos ojos grises.

«Aquellos ojos grises que me habían hecho llorar»

­— Yoongi, fue grandioso haber pasado este día santo contigo. — Dice mi madre llena de felicidad, llena de vida.

— Jihyo, no fue nada, creo que vendré más seguido aquí. — Suspira y dirige su mirada hacia mí. — Hay mucho de que arrepentirse después de todo.

Estaba tirándole indirectas a mi madre. Ella solo me miraba confundida hacia lo que decía Yoongi. Y ¿cómo no? Estaba delatándonos en unas sencillas palabras.

Cada vez que él decía algo nuevo me entraba el pánico y unas ganas de taparle la boca. No podía ponerme en evidencia frente a mi madre, no podía decepcionarla aún más, mi muro ya estaba construido y sabía que en algún momento debía dejar esto pasar y seguir adelante pero este chico me lo está haciendo imposible. Él solo estaba tan relajado respecto a ello y vaya que lo admiro en ese lado.

«Quisiera ser como él»

— Siempre debemos arrepentirnos hasta por el mínimo error, estamos aquí para llegar a ser como nuestro hermano mayor Jesucristo y rendir cuentas a nuestro Padre en el milenio.

Yo no podía estar más desesperado por aquella conversación, quería irme a casa, quería acostarme en mi tan satisfactoria cama y sobre todo... no tener a Min Yoongi tan cerca.

Silence • YoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora