Veranos en Londres.

Capitulo 7

Otras dos semanas habían pasado a comparación de las otras dos más lentas que nunca, fueron pura agonía. Desde que Jack me confesó lo que sentía esa mañana junto al Thames y nos besamos no había vuelto a hablar con él. No porque no quisiera sino que me sentía más confundida que nunca en mi vida. Si hable con Finn luego de enterarme de que había planeado todo lo de Liverpool, me confesó también todo lo que sentía, su discurso fue tan lindo como el de Jack. Diciendo que fue un idiota por pensar que no me enteraría pero que necesitaba estar cerca de mí, nos besamos nuevamente como por un largo rato sin parar ni para respirar y se sintió tan perfecto. ¿Qué debía hacer? No tenía idea. Si bien no hable con ninguno tratando de buscar una respuesta a lo que yo siento, ellos me mandaban mensajes todos los días e incluso manipulaban a Emmy para que haga que les hable.

En estas dos semanas también cosas buenas pasaron conseguí empleo permanente aquí!!! BBC Radio 1 quería expandir la web y la radio a otros idiomas, entre ellos español, francés y alemán tres idiomas que son mi fuerte, por lo tanto no solo logre un empleo sino que viajare a Francia, España, Alemania y posiblemente a otros países de Europa para que se expanda este nuevo proyecto ya que soy su nueva interprete. Cuando les dije a mis padres se pusieron muy feliz por mí, mamá lloro como siempre, mis amigos vía Skype fueron los siguientes en decírselo, lloraron también, dijeron que vendrían a visitarme en cuanto puedan. Luego de decírselos a ellos se los dije a mis nuevas personas favoritos Zoe, Tanya, Niomi, Marcus, Jim, Alfie, Joe y Caspar. Se alegraron muchísimo ya que gracias a ellos había logrado el contacto con BBC, tanto se alegraron por que viviría aquí cerca de ellos que organizaron una fiesta en la casa de Zoe para esta noche, estaba muy emocionada porque todo lo que siempre quise por fin se estaba cumpliendo. Me sentí muy mal por no decirles nada a Jack y Finn pero obviamente se enteraron porque si se lo había contado a Rebecca, Andrew y Emmy. Sus mensajes de felicitaciones no tardaron en llegar, no podía estar más tiempo sin hablarles, me sentía mal lejos de ellos, los necesitaba cerca y eso me mataba. Solo les conteste con un simple "Gracias". Lo sé soy de lo peor pero hablar con ellos solo me haría sentir confundida y no quiero que pase eso, no quiero estar con uno y alejarme del otro, no sé si quiera si quiero estar con alguno de los dos.

Estaba hablando por Skype con Jenn sobre cosas banales cuando el timbre sonó, corrí descalza hasta la puerta y abrí, un repartidor se encontraba al otro lado con un ramo de rosas de color rosa.

-Hola –le dije al chico que sostenía el ramo.

-Señorita Emma? –me pregunto. Yo asentí.- Le han enviado esto –sonrió, estire mis brazos para que me las diera, cuando lo hizo se dio media vuelta y comenzó a caminar.

-Espere –lo detuve. El se giro- quien me las manda?  -el volvió a sonreír amablemente y siguió su camino. No me contesto. Me quede parada esperando hasta que se fue por el ascensor. Confundida entre de nuevo en mi apartamento, la llamada por Skype se había cortado, seguro Jenn se aburrió de esperarme cuando me quede parada en la puerta.

Fui a la cocina a buscar un jarrón o algo para ponerlas en agua, las deje sobre la isla de desayuno cuando una nota se cayó de los pétalos, color blanco, la tome entre mis dedos y la leí –"Simplemente felicidades, te lo mereces.  F." –

Finn. Una sonrisa se dibujo en mi rostro sin que fuera capaz de darme cuenta, puse las rosas en agua y las deje en el centro de la barra, me senté frente a ellas en una banqueta y las observe. Había leído en un libro una vez el significado de los colores y como descifrar las intenciones que un chico podría tener contigo según esto. Las rosas amarillas significaba que quería que fuesen amigos, el blanco significaba pureza, el rojo que estaba enamorado y las rosas que se sentía atraído. Y ese ramo rebosaba de rosas rosadas. Dudaba que Finn supiera el significado de esto pero me gustaría pensar que si lo sabe y escogió ese color por algo sin embargo lo sepa o no, el simple hecho de que me haya enviado rosas para felicitarme cuando lo estuve ignorando por semanas y lo único que le dije fue un desabrido "Gracias" me encantaba, era lo más lindo que habían hecho. Como algo tan pequeño como un ramo de flores y una tarjeta con no más de cinco palabras podían significar mucho.