El domingo por la mañana antes de nuestro regreso a Londres Finn me llevo a navegar en barco por el rio Mersey. Almorzamos arriba del barco, luego de que atracamos nuevamente a tierra retornamos a nuestra ciudad.
Una vez en Londres Finn me dejo en mi departamento, estaba agotada asi que solamente prepare las cosas para volver al trabajo y me fui a dormir.
El lunes en el trabajo estaba totalmente distraía, el viernes llegaba mi familia y amigos; y no podía parar de pensar en que haríamos, en como estarían. Era distinto verlos a través de una pantalla que en persona. La misma sensación que tenía antes de llegar a Londres pensando en quienes ahora son mis amigos que los veía a través de youtube añorando poder verlos en persona. Pero aunque fuera la misma sensación era diferente porque estaba hablando de mi familia y mejores amigos, había crecido rodeada de ellos, siempre a mi lado.
-Emma estas escribiendo cualquier cosa –me reclamo Monique, mi compañera de trabajo. Éramos tres traductores que nos encargábamos de traducir a seis idiomas diferentes.-
-Oh demonios, debo concentrarme. –Monique estaba encargada de traducir a Italiano y Holandés; Christian a Español y Portugués; a mí me restaba Francés y Alemán. Sorprendentemente el nuevo proyecto de traducir la pagina y llevar BBC a estos países está teniendo un enorme éxito. Y a mí me habían sacado una carga al contratar a Monique y Christian, ahora solo tenía dos idiomas a cargo y no más.
-Emma –Me llamo Nicholas, jefe de la división-
-Si? –levante la mirada de la computadora para observarlo.
-Puedes venir a mi oficina? –Asentí y lo seguí hasta donde me había dicho.- Siéntate –dijo serio. Le hice caso.- Emma te tengo una noticia.
-Buena o mala? –pregunte dudosa.
-Estamos preparando un viaje a Francia, estamos por cerrar contrato con un edificio para implantar la radio en Paris, te necesitaremos para que seas la intérprete para que se puedan comunicar. –Un viaje a Francia. Me quede quita procesando, era genial.
-Cuando será? –quise ocultar mi emoción repentina.
-Todavía no, quizás en unas semanas. Pero estarías dispuesta a hacerlo? –pregunto serio como él era.
-Por supuesto. –él asintió y dijo que ya podía irme a continuar con lo que tenía que hacer. Así lo hice.
El miércoles por la noche teníamos cena de chicas en la casa de Tanya, y así como nosotras teníamos cena de chicas, los chicos tenían su cena. Es decir pizzas y videojuegos.
Pareciera ser hace mucho tiempo que había sido mí última pijamada, la última fue algunas noches antes de venir a Londres. Había sido a modo de despedida con mis amigos, pasamos toda la noche jugando toda clase de juegos, verdad o consecuencia, twister y otras cosas así. En unos días los tendría de vuelta, por dos semanas las cuales aprovecharía mucho.
-Emma pásame las papas –me pidió Zoe que cocinaba espaguetis con salsa.
-Zoe espero que este deliciosa tu comida o se la doy al perro –se quejo Niomi.
-No digas nada hasta que no la hayas probado.
-Solo digo. –estábamos las cuatro en la cocina viendo como Zoe revolvía los fideos, Tanya le alcanzaba algunas especias que le pedía.
-Emma para cuando el viaje que te dijeron? –Me pregunto Niomi.
-No lo saben aun. Quizás hasta pase un mes para que se haga.
-La cena esta lista –anunció Zoe finalmente.
Cenamos la comida de Zoe. Estaba realmente deliciosa. Luego de limpiar lo que habíamos ensuciado nos acomodamos en los colchones que estaban en la sala. Vimos “The Last Song” la película de Miley Cyrus y Liam Hemsworth. Prácticamente todas lloramos.
-Nunca superare esta película –exclamo Tanya acostada mirando el techo-
-Hasta que veas “The lucky one”. Nicholas Sparks es un genio en este tipo de historias –Llevo la contra Niomi.
Como toda típica pijamada de chicas hablamos de típicos sentimientos en el enamoramiento así que hablamos de los chicos.
-Que creen que estén haciendo ahora? –pregunto Tanya.
-Pues yo creo que jugando a algunos de esos juegos de rescate que tienen, comiendo y eructando mucho –conteste imaginándome la escena.
-Seguro juegan a los Sims 4 –aseguro Niomi.- esos chicos aman ese juego, en el juego de Marcus hay varias partidas, en una de ellas su personaje esta en pareja con Jim.
-Eso no es raro para nada –se rio Zoe- Alfie tiene un personaje hibrido de él y Joe. Se llama “Jalfie”, pasan horas jugando.
-Emma, Finn juega? –me preguntaron.
-Realmente no tengo idea, nunca lo vi jugando.
-Y como están? Es decir, van bien no? Finalmente son novios –suspiro Tanya.
-Si –conteste alegre- apenas vamos unos días oficiales pero estamos bien. Es un chico muy tierno y bueno. Me encanta tenerlo cerca de mí. –sonreí pensando en mi actual novio. Era raro decirle novio, pero esa clase de raro que es lo más lindo que pudiera pasar.
-Y Jack? –Y… se arruino todo.
-Jack? –pregunte retóricamente incrédula. Las chicas asintieron.- Bueno no hablo con él desde que se fue a Tailandia por el programa. Hemos tenido algunos choques de potencias las últimas veces. Creo que todo ha cambiado. Ustedes han hablado con él? –pregunte curiosa y sin darme cuenta de cuánto quería que me contestaran.
-Yo he hablado con él hace unos días –contesto Zoe- la están pasando muy bien en Tailandia. Vuelven en una semana aproximadamente. Le pregunte como estaba, ya saben en qué sentido –asentimos- no me dijo mucho, solo dijo que se sentía raro, que solo quería alejarse de todo por un tiempo.
-Pues entonces bien le estará haciendo su viaje.
No había parado a pensar en Jack en ya unos largos días. Desde que habíamos pseudo peleado me había obligado en parte a no pensar en él. A veces era difícil, como por ejemplo cuando estaba sola en casa y pensaba en muchas cosas diversas, él se presentaba en esa diversidad. Pero cuando Finn estaba conmigo no pensaba en nada ni nadie más.
Nuestra noche de chicas termino con otra película basada en una historia de Nicholas Sparks, Dear John. Al parecer éramos tan solo un grupo de chicas que amaba las películas de amor. Típico. Pero en parte era genial poder pasar tiempo con chicas como Tanya, Zoe y Niomi. Ansiaba presentarlas ante mis amigos y familia.
Oh dios mi familia conocería también a Finn. El único novio que habían conocido fue Alex. Sí, Alex uno de mis mejores amigos fue mi novio. De hecho el único oficial. Así fue como ingreso en nuestro grupo de amigos. Estuvimos en pareja durante la mitad de la secundaria y el primer año de la universidad, donde finalmente decidimos separarnos en buenos términos porque cada uno buscaba su lugar en otros lados, irónico porque teníamos los mismos amigos. Así que decidimos continuar como eso, como amigos y lo hicimos genial. Tres años ya llevábamos siéndolo. Pero el hecho ahora era que conocerían a Finn. Como mi novio. No sabía cómo hacer eso.
Pensándolo bien no debía estar preocupada, me refiero a que Finn es todo lo que siempre quise y ellos estarán felices por mí. Mis gemelos me preocupan, cuando mi relación con Alex termino ellos tenían apenas dos años pero recuerdo bien como le hacían la vida imposible, incluso lo habían vomitado, eran demonios desde bebes, sorprendentemente aterradores. Desde entonces Alex se tuvo que ganar el amor de los gemelos, lo logro muy bien finalmente. Solo esperaba que Finn pudiera con ellos. Y pensándolo bien no me molestaría que conocieran a Jack para que lo molestaran un poco. Pero para cuando el regrese, ellos se irían.
Otra vez pensaba en Jack. Me había obligado por millonésima vez a no hacerlo pero usualmente volvía a ello. A él, pensaba en él. Puede que no de modo amoroso o afectuoso, la mayoría de las veces pero lo hacía.
Curiosamente, una parte de mí (aquella que enterró lo que sentía por él muy profundamente) lo extrañaba.
Quería verlo.
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Veranos en Londres.
FanfictionEmma es una chica latina que siempre soñó con viajar, ver el mundo y sobre todo ir a la preciosa ciudad de Londres, Reino Unido. Ama todo de ese país, su cultura, su gente. El día de su cumpleaños número 21 su familia la sorprende con un regalo que...