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Y cerca de la ahora devastada Federación de Héroes...

Mirrow Boy se mantenía sobre el tejado de un edificio aledaño al enorme inmueble que ahora se encontraba completamente destruida, debido a la lucha que los superhéroes y villanos habían tenido en esa zona. Todo eso, sin mencionar los graves daños que dejaron en las vías y avenidas cercanas a la zona del incidente.

Y ahora con el regreso del equipo WayV, las cosas se complicaban aún más ya que las personas estaban más atemorizadas que nunca. Es que con solamente recordar todos los crímenes que esos delicuentes habían cometido en el pasado, sólo causaba que las grandes masas se aterraran aún más.

Los ojos del héroe, permanecían posados sobre toda la escena que ahora se hayaba en mantenimiento y que representaba un enorme gasto para la alcaldía de la ciudad, los cuáles tendrían que cubrir todos los daños con materiales nuevos. Era inevitable para su persona, no sentir rabia y pudor por lo que sus ojos contemplaban.

--Debo proteger a esta gente de los criminales que amenazan con destruirla. No permitiré que esos desgraciados hagan lo que les plazca, no estando yo presente para brindarles seguridad-- dijo el superhéroe a lo bajo, para sí mismo.

Por consiguientemente, el superhumano creó un portal que lo guiaría hacía la segunda base secreta, la cuál ahora haría función de sede principal de la Federación de Héroes. Después de atravesar dicho portal, el joven superhéroe ya se encontraba dentro de la base (específicamente en la sala de reuniones) causando que sus compañeros se sorprendieran al ver que había llegado de una forma tan repentina.

El primero en hablarle al recién llegado fue Sonic Boom, el cuál no se encontraba muy feliz:

--¡Vaya! Hasta que por fin te dignas a aparecer. ¿Cómo la pasastes con tú noviecito?-- preguntó el susodicho, con un tono sarcástico.

--Basta idiota, además, yo no tenía idea de que esto pasaría-- se defendió Mirrow Boy, con sus brazos cruzados.

--La situación se tornó peligrosa. ¡Casi perdemos la vida allí!-- reprochó Sonic Boom, mientras se acercaba al otro de forma amenazante.

--Si no te callas, yo haré que te calles-- amenazó el contrario, con su ceño fruncido mientras observaba fijamente a los ojos del otro.

--¿Ah sí? Entonces hazlo si es que puedes-- retó el otro héroe, con una sonrisa desafiante.

--¡Oigan ya basta! No obtendrán nada con esta pelea, lo único que hacen es perder su tiempo. Ahora debemos concentrarnos en detener los planes de Jackal y a su séquito de sociopatas-- se interpuso Jungwoo, obteniendo como respuesta que los contrarios se calmaran y que finalmente se separasen.

--Gracias por intervenir niño bonito. Te juro que si esos dos continuaban con su pelea, iba a tener que intervenir y no iba a ser muy agradable que digamos..-- agradeció Iron Hands con sus brazos cruzados, sin percatarse de que su alago había causado un leve sonrojo en Jungwoo.

--Sí bueno eso no importa. Mirrow, ¿conseguistes pistas junto a tú novio negro?-- preguntó Telekinetic Boy, interrumpiendo también en la conversación.

--Jisung no...-- regañó Chenle a lo bajo, causando que el de menor edad hiciera un puchero.

--Deja de decirle negro a Haechan, y sobre lo otro si he conseguido pruebas muy contundentes que nos guiarán hacía Jackal-- explicó el superhumano, para luego sacar un pequeño USB el cuál conectó a la supercomputadora que había en ése lugar (Ya que el sitio tenía la tecnología necesaria para todos los héroes).

El resto de los presentes se acercaron a la computadora y observaron con asombro toda la información que el recién llegado había encontrado junto a su pareja.