Jungwoo tragó en seco al ver a su peor miedo en carne y hueso, pese al inmenso parecido que tenia con el primogénito adoptivo de Jaejoong. No podía ser de otra forma, ya que en si el monstruo no tenia una forma física en si, solamente era una persona alternativa que había nacido en Taeyong años atrás por culpabilidad de la materia oscura. Y por más valentía que demostrara, no podía negar que sentía miedo con respecto a lo que pudiese suceder.
El espectro hecho de sombras sonrió con maldad al notar la colosal incertidumbre que se alojaba en el pecho del encapuchado blanco. Le fascinaba tener todo el poder entre sus manos, ya que con ellos podría causar angustia y desesperación... Dos cosas que realmente amaba con toda su perversa alma.
―¿No piensas decir nada? ¡Vine a visitar al hermano de Taeyong en su nombre y esto es lo que obtengo! De verdad no esperaba esta clase de comportamiento tan... Indecoroso― dijo el recién llegado; burlesco.
―A pesar de que siento repulsión por un ser tan vil como tú, debo admitir que estoy sorprendido. Ya usurpaste los poderes de Ten en tus manos, aunque sigo sin poder comprender como fue que conseguiste aparecerte enfrente de mi sin necesidad del cuerpo de Taeyong― replicó el pelinegro, mientras sacaba lentamente su espada.
―Digamos que tengo mis propias habilidades y que no siempre necesito del dulce chico que estuvo bajo los cuidados de Jaejoong... ¡Como por ejemplo cuando lo convencí de darme todo lo que estaba en su control!― respondió el peliblanco entre sonoras carcajadas.
―Eres un desgraciado. No quiero imaginar con cuantas mentiras lograste persuadir a Taeyong para hacer una estupidez de esa magnitud― manifestó el pelinegro; enfurecido ante las mofas del contrario.
―Puede que sea cruel, atroz o todas las peores cosas que existan en este mundo. ¿Pero de ahí a ser un mentiroso? ¡Definitivamente considerare tus palabras como una osada afrenta!― se expresó el monstruo despreciable sin dejar de burlarse por ningún instante.
―Juro que tengo unas ganas de cortarte esa lengua ponzoñosa que posees. Eres un maldito pero pronto te van a quitar esa sonrisa de la cara― espetó el menor de ambos mientras contemplaba como el maleficio encarnado, caminaba a su alrededor lentamente como un cazador vigilando a su presa.
―En tus ojos puedo discernir una luz de esperanza, como si supieras que hay alguien que tiene la capacidad de hacerme frente cosa que realmente dudo. Me gustaría saber de quién se trata, pero por alguna razón el desgraciado de tú padre puso algo en ti que no me permite entrar en tu subconsciente... O más bien algo― susurró lo último el abominable ser, para luego chasquear sus dedos provocando que las sombras de los objetos se convirtieran en criaturas horripilantes de gran tamaño.
―¿¡Qué pretendes imbécil!?― cuestionó Kim sin dejar de vigilar a sus nuevos contrincantes.
―En el pasado nuestro padre consiguió crear al trío perfecto de superhumanos. Cada uno de ellos era de vital importancia como para viajar entre distintas dimensiones... La realidad, el tiempo y la posibilidad de crear portales tridimensionales. Supongo que tú sabes bien de que estoy hablando ¿No?― se pausó el espectro de iris carmesís por unos escasos instantes ―¡Me refiero a los proyectos 0107_95, 0208_99 y 1902_98! ¿Reconoces esos números o también tengo que recordartelos?― interrogó el peliblanco, sin parar de contemplar la espada del encapuchado.
―¿Y cómo olvidarlos? Lee Taeyong, Mark Lee y Kim Jungwoo... Los tres mutados que llevarían a Jaejoong a alcanzar toda la gloria y el reconocimiento que siempre deseó por muchos años― contestó el otro, sin parar de observar a las bestias sombrías que lo rodeaban y que amenazaban con atacarlo en cualquier momento.
―¡DE NO SER POR MÍ VOSOTROS DOS NO HUBIESEN OBTENIDO LO QUE TIENEN AHORA! Yo soy la causa por la que ustedes y todos esos malditos superhumanos existen. Soy su Alfa, su creador y al único al que le deben respeto― contraatacó verbalmente el espectro sin parar de sonreír ―Y ahora quiero tener todo lo que se me fue negado. Incluyéndote a ti hermanito y tarde o temprano, te despojaré de esa maldita espada que te entregó nuestro padre en el pasado y que no me permite quitarte tus dones... No importa dónde te escondas, siempre te buscaré hasta encontrarte pequeño inepto― replicó el monstruo, para luego desparecer de la vista de Kim a través de una bandada de cuervos los cuales arremetieron en contra del ahora único presente.
ESTÁS LEYENDO
SᵾᵽɇɍħᵾmȺn ༈ 𝑴𝒂𝒓𝒌𝒉𝒚𝒖𝒄𝒌
Фанфикшн❬𝐓𝐄𝐑𝐌𝐈𝐍𝐀𝐃𝐀 𝐘 𝐄𝐍 𝐄𝐃𝐈𝐂𝐈𝐎́𝐍❭ "--Si algún día te necesito de nuevo... ¿Tú vendrás a rescatarme? ¿No es así?--". "--Hasta el fin de los tiempos. Y si fuera necesario daría mí vida por ti--". Mark Lee; superhéroe de la ciudad Metrópolis...
