Amarte es un arte

Capítulo 57

LUCIA.

Deje de pensar en muchas cosas que rondaban mi cabeza, solo en Gabriel y en nuestra última conversación; me llamo ayer como todas las noches desde que se fue a España, diciéndome lo mucho que le hacía falta, que había
tenido algunos problemas con el negocio y se iba prolongar un poco más su llegada pero que todo iba estar bien y debo decir que probamos lo del sexo telefónico; no es lo mismo que tenerlo a él en persona pero fue bastante excitante, lo recuerdo y aun me enciende.

- Que haces?.- me dijo.

- Hablar contigo marinero.

- Eso ya es evidente, me refiero a que estás haciendo, que vez, que llevas puesto?.

- Ah y no es mejor preguntar eso?, estoy hablando con mi marinero, veo las estrellas que se cuelan por mi
ventana y llevo puesta la bata de seda plateada que me regalaste.

- La corta que llega a la mitad del muslo?.

- Si la misma.

- Yo quería verte con esa bata, pensé que la usarías un día cuando te quedaras conmigo.

- Eso se arregla fácil, espera - busque la cámara y me tome una foto y se la envíe.- Hola, listo ya no te lo
imaginarás.

- Bien, ahora si voy a explotar, porque me haces eso?, tienes el cabello ondulado... Me gusta cuando lo
tienes así.

- No te hago nada, te gusta cómo me veo?.

- Mujer si me tienes más duro que una piedra, sabes lo que voy a tener que hacer para no explotar?- me río de sus ocurrencia.

- Bueno algo podemos hacer al respecto.

- Mmm si eso creó, trata de que no te interrumpan y que tu madre no te escuche, ve que cuando quieres
puedes hacer que una ciudad te escuche.

- Eso es mentira, pero ya cerré la puerta y música para no ser escuchada, así que estoy lista para que me enseñes esto del sexo telefónico.

- Bueno imagínate que estoy contigo y yo me imaginare que estas aquí, como tú quieras verme y dime- eso hice.

- Tienes tu short negro, con el pecho desnudo y me vez con esos ojos azules que me excitan, estas frente a mí y te gusta lo que vez...- me interrumpe.

- Si me gusta, con esas piernas largas y desnudas con tus pechos asomándose en el escote de tu pijama y una de esas tiras caída al hombro. Tu sonrisa
hermosa y tentadora.

- Te acercas a mí, acaricias mis piernas y subes, subes.

- Hasta llegar a mi lugar favorito, donde estás tan húmeda... Lucía...

- Dime...

- Tócate, piensa que soy yo, que son mis manos - debo admitir que me daba como pena pero él quería y yo quería.

- Gabo, siempre me ha costado un poco hacerlo yo, no creó que llegue...

- Shuu, no te reprima solo concéntrate en mi voz... Mis manos están en tus pliegues y entró y salgo, te gusta, y tus manos están...

- En ti, entre tus piernas, estas tan duro, subo y bajo, y...

- Tus manos son tan cálidas, suaves, como tu interior, introduzco un dedo más adentro y luego dos y el pulgar a tu...centro...

- Ay dios Gabo... No voy...

- No te detengas, no pares, tus manos están en mi si te detienes....no podrás...hacerme venir... Eres tan
calidad, sexy y muerdo tus pezones.