CAPITULO 36

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LUCIA

Lunes primer día de la semana y el último día de mis vacaciones antes de regresar al hospital, volver a ver a los
ogros, brujas y malos intencionados, a despertarme temprano, ver las necesidad de los demás y desesperarme con algunas madres. Además que ya no voy a ver con tanta facilidad a mi Ziegermman.

- El desayuno hija.

Le escucho decir a mi madre desde la sala, llego hasta la mesa veo mi rico chocolate caliente y unas panquecas con queso, hasta eso dejare de hacer porque me paro temprano.

- Voy extrañar comer así, volver al pan con queso recalentado y cuando se pueda. Quiero más vacaciones.

- Tienes un mes libre, quieres más?.- mi madre se sienta a mi lado tomando su taza de café.

- Si, me parecieron muy cortas, quiero más días.

- Bueno hija tarde o temprano se debe regresar al trabajo no hay nada que hacer solo pon tu mejor actitud y cara veras que todo sale bien, y vas con tus
niños que tanto te gustan.

-Es cierto, ya quisiera ser especialista, que nadie me esté mandando, ir cuando quiera o eso creo.

- Pronto mi niña pronto.- Terminamos de comer y mi mama se fue a su trabajo mientras yo me quede descansando en casa hoy como mi último día de libertad pienso durar en cama y dormir, dormir, leer. Escucho el sonido de mi teléfono.

- Alo guapo como estas?.- digo porque sé que es Gabo.

- Hola mi serinita, como amanece?- me dice.

- Bien, sin querer levantarme de la cama y tú?.

- Queriendo que esa cama sea la mía y amarrarte a ella.- deseo eso mismo.

- Si me amarras seria secuestro señor Ziegermman.

- No si la dama se deja y algún día te amarrare a la mía y no vas a querer que te suelte sirenita.-lo dice con
ese tono sensual que me eriza hasta el último vello.-deseo verte y tenerte para mí solo siento que tengo años que no estamos juntos.

- Ayer estuvimos juntos Gabo, lo que me hace recordar ya hablaste con tus padres?, le vas a decir sobre el
hotel?.- lo escucho suspirar sé que no le agrada la idea.

-Primero que nada sabes a lo que me refiero, quiero estar a solas contigo, hablar y verificar esas cicatriz que dijo mi suegra que tenías que no me percate las últimas veces, en cuanto a mis padres; no se lo he dicho y no quiero. Quiero hacerlo solo, si no me apoyo
porque ahora? No quiero hablar de eso.

- Está bien pero tarde o temprano tendrás que hablar con él, son tus padres y sea lo que quiera que hagas
solo ve si merece la pena que estén enojados.

- Lucía mi papá es un gran padre pero cuando se trata de negocios e intereses no hay quien le lleve la contraria, se hace lo que él dice y si no, bueno ya vez.

- Mmmm, eres su hijo capaz si vez que aun sin su consentimiento haces tú proyecto tal vez te apoye.

- Eso lo veremos después cuando ya no pueda meterse en él y arruinar mis planes para que se salga con la suya. Hermosa me tengo que ir voy a una reunión, sigue durmiendo y si puedes pensar en mí no me molestaría.

- Siempre pienso en ti, es más quizás haga algo que me entretenga pensando en ti.

- Oye no quieras darme ideas sirena y ni siquiera pienses en usar algo que no sea yo para tu placer - lo dijo en un tono muy duro.

- Molesto o son ideas mía?.- le pregunto.

-Molesto no solo no quiero nada que invada mi lugar favorito en el mundo, así que si piensas introducir algo en ese paraíso solo vendrá de mí.

- Ush que posesivo y tu si puedes darte placer?, eso no es justo.- sueno algo molesta pero me gusta que diga eso y no soy de las que usa nada para darse placer bueno tal vez a él.

- Bueno sirena resulta que a ti no se te nota la excitación, en mi caso me llevaría a una clínica en menos de dos minutos.

- Que exagerado, mejor ve a trabajar y yo veré que hago?.

- Lucia hablo en serio sabré que lo hiciste y te va costar caro.

- Ahora eso me intriga...ve a trabajar guapo besos.

- Besos. Nos vemos luego.

Cuando cuelgo río como tonta al teléfono, me siento feliz, es lo que siempre quise sentir por alguien y no creo que diga esto pero mis amigos tenían razón no sabía lo que me
perdía.

De repente me quedo mirando la televisión, veo a el nombre de Gabriel y empiezas hablar de él y su cumpleaños, como lo celebro, de la fiesta que le hizo Erick en su restaurante, con sus amigos, familia y me molesta un poco no haber sido invitada pero Erick no sabe cómo
contactarme, veo que mencionan a Lucrecia Hanz y muestran una foto donde sale besándose, mi Gabriel
besando a esa Barbie rubia, buen cuerpo, elegante y rica, a eso le sumas que dicen que es su prometida que no podía faltar en celebrar su cumpleaños, que ha robado su corazón ya que no se ha visto rodeado de mujeres y más
maduro, el viernes mientras yo lo esperaba en su casa él estaba con ella.

- A ver Lucia cálmate, son chismes, él te ha dicho que no sale con nadie, Gabriel no tiene novia nunca ha tenido, solo amigas el me lo ha dicho, él no me
mentiría no así, o si?. Por dios estoy hablando sola.

Debe existir una explicación.Apago el televisor, me visto y salgo de mi casa a dar una vuelta necesito despejar mi mente, pensar, eso hago salgo a dar vuelta por el centro comercial, lo único que tengo en mi cabeza es la foto de Gabriel y esa mujer besándose, esas palabras que están juntos, comprometidos, mi corazón se quiebra en pedazos.

Paso horas caminando cuando voy llegando a casa ya pasada la tarde, cuando estoy entrando escucho una
corneta y veo el carro de Gabriel, trato de ignorarlo pero élse baja tan guapo e imponente, con su traje azul marino, se acerca a mí y yo ni se cómo reaccionar.

- Hola sirena, son ideas mías o me estabas ignorando?-me pregunta con un tono de burla trata de darme un
beso pero lo he vito y termina besando mi mejilla.

Amarte es un arteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora