Capítulo 4

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Se estacionaron en la entrada del bar que estaba desértico e incluía una gasolinera, el lugar era pequeño ya que no estaba destinado para demasiadas personas. En cuanto entró sonó la campanilla que colgaba de la puerta y Drayton hizo su aparición...

-¡Lila! Sabía que no tardarías en venir –Se acerca mientras se limpia las manos, pudo notar que un líquido rojizo corría por sus manos, supuso que era por la carne de los animales, después de todo él hacía barbacoas.

-Hola, Dray, es un bello lugar –Dijo mirando a su alrededor -. Ahora recuerdo un poco de cuando caminaba por aquí..., solía quedarme dormida en ése sillón –Comentó señalando uno que ahora estaba deshecho y algo sucio.

-Sí, tu tío no quería dejarte sola en la casa, una vez estuvo preocupándose toda la noche que tuve que darle el día, temía que algún intruso se metiera.

-Sí, él odiaba a los extraños –Ve a Keith analizando su cámara –Te dije que no traigas eso –Le reprime.

-¿Qué? Creí que sería bueno un cambio de ambiente.

-¿Piensas filmar mi negocio? –Le pregunta Drayton.

-¡No! –Contesta Lila –Él no lo hará, ignórelo, no queremos incomodarlo.

-¿Incomodarme? Están en el lugar de la mejor carne asada, considérate libre de filmar, sólo... no husmees la cocina, queremos mantener el misterio, ya sabes, eso atrae a los clientes.

Keith prefirió no cuestionarle y se excusó para filmar afuera, dedicándose a los alrededores mientras informaba a quien fuere que vaya a ver esa cinta a cuánto se encontraba el lugar y lo bien que los había tratado el dueño.

Mientras tanto Lila seguía conversando con Drayton, éste le contó algunas anécdotas de cuando era niña y cómo habían creado un cartel para llamar la atención de los viajeros, aún lo tenía guardado, estaba hecho con una delgada madera y escrito con labial "Drayton's: La Mejor Barbacoa", según Dray ella solía alzar ese cartel al costado de la carretera. En eso, escucha un ruido fuerte que venía desde la cocina, como si a alguien se le hubiese caído un montón de cubiertos y sartenes.

-¿Qué fue eso? –Preguntó mirando hacia donde había escuchado el estruendo.

-Son mis empleados –Responde sonriendo para calmar a la chica -, iré a encargarme personalmente, aguarda un momento...

Él regresa a la parte de la cocina, en donde se encontraba Leatherface cubriéndose las orejas debido al ruido que había hecho, además de la paliza que estaría por recibir por parte de su hermano.

-¡¿Es que no puedes estar en silencio por unos minutos?! ¡Unos minutos! ¡Estoy con gente! –Le exclamaba mientras lo golpeaba con las palmas de sus manos en sus grandes brazos.

-Hmmdón...mno, mno –Se quejaba él, Dray dejó de golpearlo en cuanto lo vio que se acuclillaba en el suelo como un perrito herido.

-De ahora en más te quedas callado –Le señala -, recuerda que te estoy dando la oportunidad de trabajar fuera de casa ¿O quieres regresar a la casa?

-¡Mmhmmooo! ¡Mhhnoo! –Negaba con la cabeza cubriéndosela.

-Bien, comienza a juntarlo todo, cuando regrese quiero que todo esté en condiciones –Le dice antes de volver al mostrador junto a Lila, la chica lucía un tanto incómoda, había oído la voz de Drayton pero no distinguía lo que decía, ella sólo se quedó allí de pie esperándolo.

-Lo siento, mi hermano menor es mi nuevo empleado y aún no se acostumbra a estar fuera de casa... ¿Quieres llevarte comida para llevar?

-Oh, sería genial.

Nunca Te Irás - Leatherface x OCDonde viven las historias. Descúbrelo ahora