Capítulo 48

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Despertó con un persistente dolor de cabeza, observó su alrededor, estaba en el cobertizo, el único lugar que no había sido afectado por las llamas, y era porque Norma lo tenía planeado. Sintió algo caliente bajándole por el pecho..., sangre, estaba sangrando y la herida provenía de, precisamente, la cabeza. No sabía con qué lo habían golpeado, pero debía de ser algo muy fuerte para hacerlo caer y, encima, sangrar... entonces su vista fue hacia un costado... ahí estaba en todo su esplendor su motosierra, la que lo había acompañado tantos años atrás, de seguro fue golpeado con ella. Pero nadie estaba con él, ni siquiera habían dejado a alguien vigilándolo, estaba solo en el cobertizo, atado con cadenas que lo tenían bien amarrado.

Kate, por otro lado, se encontraba esposada en una de las puertas del patrullero, estaba llena de furia, no sólo por el hecho de haber sido engañada por Norma que parecía tan común y corriente antes sino que, también ya estaba pensando en lo que diría en cuanto saliera de esto, como se disfrazaron de policías, ocuparon propiedad privada, hicieron destrozos, y demás. Observaba a los pocos metros como algunos de estos hombres reían mientras conversaban... le daba tanto asco..., pero al mismo tiempo resultaba que ellos se querían vengar de familiares muertos a lo que la llevó a preguntarse ¿Estaba bien... o mal? En eso Norma se acercó a ellos.

-¿Ya vienen? –Les pregunta.

-De seguro están cerca –Responde uno.

-¿Es que no pueden darse más prisa? –Se quejaba –Me dijiste que serían puntuales ¡Ya llegan diez minutos tarde!

-Tranquila –Dice el otro tirando su cigarrillo -, no falta mucho.

-Más les vale que estén aquí antes de que ése grandote se escape –Les amenaza ella.

Unos cinco minutos después aparcaba un auto en el terreno, Norma se pensó que serían los "refuerzos", pero cambió su semblante en cuanto vio a Lila bajar del lado del conductor, Kate suspiró sintiéndose aliviada, pese a que su cuñada no podía verla ya que la puerta justo la tapaba, se notaba que lo habían hecho a propósito.

-¡Tú! –La señala a la castaña de cabello rizado - ¡Maldita hija de perra! ¡¿Dónde está mi marido?!

-Deberías tratarme bien, yo fui la que quemó tu nidito de amor..., ten cuidado –Le dice sonriendo maliciosamente.

-¡¿Dónde está?! ¡¿Qué le han hecho?!

Norma iba a seguir con su juego, estaba contenta de ponerla en ésta situación tan vulnerable..., entonces ve a lo lejos un vehículo aproximarse...

-Está en el cobertizo, pobrecito, no dejó de llamarte pidiendo auxilio aunque tú no estabas.

No quiso perder el tiempo, ni siquiera le respondió. Corrió hacia el cobertizo y llegó en cuestión de segundos, cuando se trataba de un ser querido en peligro no importaba nada, ni siquiera tuvo en cuenta el tiempo, quería irse ya del lugar y regresar con los niños, debían estar a salvo de estas personas.

-¡Bubba, Bubba! –Gritaba pensando que él le contestaría... hasta que lo vio, estaba atado de pies y manos a las vigas de madera –Oh, Bubba –Se lamentó al ver la situación en la que se encontraba..., se acercó y lo besó antes de abrazarlo, él se removió, había intentado abrazarla pero olvidó el detalle de las cadenas que lo unían a las estructuras.

-...Mmhe... si-siento mal... -Le susurra, la pérdida de sangre parecía estar haciendo efecto, se sentía mareado.

-Sh, mi amor, te sacaré de aquí –Lo consuela, observa su alrededor en busca de alguna herramienta para deshacerse de las ataduras y divisa un montón de herramientas sobre una pequeña mesada pero es su motosierra allí en el piso la que llama su atención -, lo tengo, tranquilo, aguanta, por favor, aguanta.

Nunca Te Irás - Leatherface x OCDonde viven las historias. Descúbrelo ahora