"Do you ever wonder if the stars shine out for you?" [Larry Stylinson] TERMINADA

Capitulo 42: "Hoyuelos"

Aveces cuando quería llorar. O cuando estaba asustado, solía reír.
En esos momentos menos oportunos, en los cuales lo único que queres es esconderte y no llamar la atención, bueno, estaba ahí yo, riéndome como idiota.
Soy de esas personas que demuestran todo lo contrario a lo que quieren mostrar, simplemente por miedo.
Miedo a que no te entiendan, a que te hagan mal. A no creerte capaz de que el otro te entienda.
Entonces uno se queda con la solución mas segura. Que el otro no vea lo que sentís.
Aveces los sentimientos te juegan la contraria.
Llorar provoca la pena ajena, y uno llora para sentirse bien, y la pena no es para nada eso. Es mejor reír, reír y llorar sin que nadie te juzgue.
Al reír nadie piensa ¿Porque ríe?, pero cuando uno llora, se vuelve el centro de atención mas grande.
O cuando estoy asustado, me río para demostrar lo contrario, para verme fuerte, valiente. 
O directo no muestro sentimientos.
La risa se escucha como quiere. Temblorosa, sin ganas, sin intención, pero una risa al fin y al cabo.
"Uno muestra lo contrario a lo que siente, porque no sabe, si al que se enfrenta, es capaz de percibir que no se necesita hacer preguntas"

Si no hubiera percibido mis hoyuelos en las mejillas no me hubiera dado cuenta lo inútil que me veía sonriendo después de haberlo hecho.
Aún con la mano suspendida en el aire, pero sin formar el puño, solo, colgando como si me fuera a caer al vacío, como en las películas.
Mi mano izquierda temblaba, sin hacer nada, abajo tocando la camilla.
Me sentía, raro.
Nunca había pegado, ni siquiera una cachetada.
Y estaba sonriendo, pero dentro mio, oh mierda, me estaba ahogando. La que se venia.
Mi vista se nubló un rato, y aun queriendo buscar a Louis con la mirada, seguía fijo en Zayn, que seguía dado vuelta sobándose la mejilla.
Sentía que al segundo de darme vuelta me iba a destrozar contra el suelo.
No bajes la guardia Styles
Ese puño fue como un 'stop', reinaba el silencio, ni siquiera el silencio hacia ruido.
Sentía fluidos ácidos en la garganta y me picaba la nariz, me sentía incomodo con mi cuerpo. No sacaba mi vista de Zayn. Él estaba revisando su maño, cubierta de sangre, solo la observaba. Pensando.
De repente Zayn se dio vuelta lentamente mientras limpiaba su labio cubierto por sangre y deslizaba su lengua por los diente delanteros. Y por supuesto, el puño en mano.
Se acercó riéndose.
Se tornaba tenso, y anticuado. Como si no tuviera sentido, como si ya lo hubiera vivido.
Dos risas en un cuarto blanco.
Era bastante raro.
Me miró de arriba a abajo y aumentó su sonrisa mucho más.
Llegó hasta mi y me miro fijo a los ojos.
-Así que esto te divierte? - dijo con simpatía, en su voz, no su mirada, no, la mirada no.
Mi sonrisa cayó con pesadez hasta formar una mueca de seriedad.
Sin avisar ya me encontraba recostado a medio cuerpo sobre la camilla con el torso de Zayn encima mio. Realmente cerca, sentía sus piernas, cada una, al costado de las mías, y debajo chocando cremalleras.
-Haber chistosito, si esto te divierte.
Apretó todo su cuerpo contra el mio, chocando las hebillas y sin sostenerse de manos, alzó su derecha y reventó mi mejilla contra su puño.
Ahí sentí mucho mas mi cara contra la cama que nuestros cuerpos juntos.
Mi vista quedó blanca por unos segundos, sin sentir más el cuerpo de Zayn encima mio. Solo oía su risa a lo lejos. Sentía en mis hoyuelos, devuelta, que estaba sonriendo.
Sentía la sangre a mis costados, rozando mi oreja, y el olor metálico. Pegajoso.
La cama estaba suave, como no tienen idea.
Totalmente abrazable.
Podía adivinar que el cuerpo a no estaba haciendo presión en mi, pero la trata de potencia de su esencia había quedado, y me sentía totalmente cansado, como para levantarme.
-y vos, imbécil - escuchaba palabras a distancia - NO ME VUELVAS A JODER NI A MI, NI A MI... - hubo silencio unos segundos - NO ME VUELVAS A JODER CON TUS PLOTUDECES, BIEN?! que te va a ir peor, y mas si le vas con el cuento a alguien.. Y A VOS - escuché que la voz se dirigía a mi, abrí unos instantes los ojos y noté a Zayn mirándome - YA SABES QUE PASA SI ABRÍS TU MALDITA BOCA.
Tragué en seco al recordarlo, pero la estúpida sonrisa no se me iba.
Mis ojos miraban el techo vacío hasta que los mechones negros se hicieron presentes, y me forzaron la cabeza hacia un costado con ganas.
-Deja de sonreír, idiota, la sonrisa se te ve fea - rió con desdén y me soltó. Mi sonrisa se había esfumado completamente.
"Esas lineas en tus ojos.
Esos hoyuelos en tus mejillas
Esos dientes en tu boca. Son horribles, los viste?"
Auch. 
Tocó donde no tenia que tocar.
Sus mechones provocaron que me gane unas cosquillas en la cara y tenga que abrir los ojos, entonces vi otro golpe aproximarse.
¿Porque hicieron tan fuerte al ser humano siendo este tan egoísta?
Cuando estaba por hacer fricción su mano contra mi cara se escuchó pequeño chillido de horror proveniente la la puerta.
Sentí como Zayn se giró y se separó completamente de mi. Después zumbaron unos pasos pesados que pasaron por la puerta y su sonido fue disminuyendo al tiempo.
-Yani, te dije que yo te avisaba - las palabras de Louis salían fluidas como si estuviera meditando, tranquilo, incapaz de mostrar sentimientos profundo.
-Pero..
-Yo te llamo - la cortó Louis.
Levanté mi cabeza un poco para poder divisar el escenario a mi alrededor. La mujer solo agachó la cabeza y salió distante del cuarto. Louis tenia la mirada fija en la puerta, ahora vacía.
Estaba tan débil, o así se veía. Recargado en sus codos, respirando con exageración y unas grandes ojeras. Aún así sus castaños seguían castaños y sus ojos seguían celestes, como siempre.
Ni mas claros, ni mas oscuros.
Esa tonta sonrisa volvió al solo recordar el golpe. Y me sorprendí al ver que Louis soltó una sonrisa sin sentido al aire, mirando la puerta.
-Te defendiste - dijo aún sin mirarme, con la sonrisa entre los labios.
Mi sonrisa aumentó y solo quería llorar, no sabia que carajo sucedía con mi cuerpo, ya no me sentía dueño de el.
-No vas a decirme que estuvo mal golpear a un alumno? - dije con burla
Louis despegó su vista de la puerta y me miró. Se veía realmente tierno, con las ojeras leves y su rostro sudado, sonriendo. 
-No si te dice que tu sonrisa es fea - reí ante aquel excusa - ademas, no soy como los otros maestros - bajó una comisura, sonriendo solamente de lado - me suelen gustar las cosas que no les gusta a los profesores.
Y no solo sentía en mis hoyuelos que estaba sonriendo.
Mi corazón sonreía también.