Capitulo 45

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A la mañana siguiente tuvimos que aguantar el regaño de nuestra vida por parte de su madre, a todos, incluyendo a Irina por no decir lo de su embarazo antes, el señor Adrian se ve aburrido y cansado, apenas si puedo imaginarme todo lo que le esperó cuando llegó a casa y se le nota que no ha dormido nada, aparte las cosas entre Dean y él están tensas, Dean maximizó la seguridad de la casa con muchos escoltas, literalmente nadie entra y nadie sale de nuestra propiedad, al finalizar la semana Elizabeth volvió y Dean le tenía una sorpresa, un piano profesional, mi pequeña no dejaba de llorar cuando lo vio, esta noche ella nos dará un concierto privado para la familia, Irina y James no vendrán debido a que Irina no se siente muy bien y él debe cuidar al bebé, por lo que solo estarán los padres de Dean y nosotros, organizamos la sala de forma colocando las sillas juntas en una fila y nos vestiremos como si fuéramos a un concierto real, yo me coloco un vestido negro de cóctel y Dean un traje sin corbata al igual que Ethan, quien tiene el mismo traje de su padre pero para su talla, sobra decir lo tiernos que se ven los dos, mientras Dean me coloca el collar no deja de darle besos a mi nuca y mi cuello provocándome.

—Cariño —cerré los ojos y sonreí—. Ethan, tenemos que cuidarlo.

—Él está bien —rodeo mi cintura con sus grandes manos—. Llevamos siete horas sin hacerlo, ya estoy ansioso —deslizó una de sus manos por mi cadera hasta el borde de mi vestido para levantarlo un poco, mi trasero inmediatamente se fue hacia atrás para chocarse mas con su ingle.

Alguien toca la puerta provocando Dean se alejara de mi para yo abrir la puerta provocando que saliera de su boca una maldición.

—¿Si? —pregunté mientras me perfumaba.

—Ya los señores están acá —dijo Yane emocionada.

—Ya bajamos —le contesté viendo como Dean levanta a Ethan del suelo y le sacude la ropa.

Salimos de la habitación y Dean me detiene en las escaleras.

—Cariño, se te está comenzando a notar —susurró a mi oido—. ¿Le dirás?

—Yo... esperemos haber qué pasa.

Le doy un rápido beso y bajamos por completo, saludo a la señora Aura con un beso en la mejilla y caminamos hasta la sala en donde se encuentra todo armado.

—Emily ¿Haz hecho ejercicio en estos días? —me preguntó tocando mi pancita con su dedo.

—No —traté de acomodarme en la silla—. Hemos estado un poco ocupados con el papeleo para Elizabeth y eso.

—Deberías cariño, te estás engordando un poco y recuerda que aún falta ya tú sabes quien —susurró mirando a su esposo quien comparte una copa con Dean, Dean por su parte lucha por controlar a Ethan quien quiere tomar las copas de vidrio que están sobre el taburete.

—¿Usted está de acuerdo con lo que quiere hacer Dean? —le pregunté susurrando.

—por supuesto que si —le recibió a Yane una copa de champagne, yo por supuesto la rechace—. A él se le olvida lo cruel que fue esa mujer conmigo y una vez de verdad intentó matarnos.

—¿Cómo?

—Ella le cortó los frenos al auto de mi esposo, si no hubiera sido por un árbol y una empinada tú no tendrías esposo, yo estaba embarazada de Dean —me contó sin dejar de mirar la copa.

—¿En serio? Eso no lo sabía —dije sorprendida.

—Dean y James son mi adoración y esa maldita casi me mata con uno de ellos dentro de mí y lo peor es que ella nunca de disculpó y probablemente nunca lo haga, así que por mí que Dean la mate o solo la deje herida, lo que pase primero.

Enlazados hasta el finDonde viven las historias. Descúbrelo ahora