Capitulo 46

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Un mes completo había pasado y ni siquiera tenemos un dato acerca de Marta, no ha sacado la cabeza del hueco donde está metida, es casi como si se hubiera desaparecido y aunque Dean no está del todo tranquilo al menos puede dormir mejor en las noches, Ethan comenzó a gatear y tuvimos que conseguir un nuevo tutor para Elizabeth para las clases de piano, hoy es el cumpleaños de James y estamos alistándonos para ir a la parrillada que van a hacer en su casa, en este momento parezco que no he ido al baño en una semana y ahora solo puedo usar vestidos ya que ninguno de mis pantalones me quedan y aún no estoy lista para usar ropa de embarazada, mientras vamos en el auto veo a Dean pensativo.

—¿Sucede algo? —le pregunté mirándolo.

Dean mira hacia atrás un momento.

—Eli, ponte tus audífonos por favor —le pidió a nuestra hija para hablar tranquilos—, todo esto es muy raro —dijo mirando a todos lados—. Ella no ha atacado ni ha amenazado ni nada.

—Piensas que actuará en la fiesta ¿Cierto?

—Si, ella es inteligente y se que está esperando algo como esto, tenernos a todos juntos para acorralarnos.

—Cariño —agarré su mano sobre el freno de mano—. Relájate ¿Si? No pasará nada, estaremos con los niños y los bebés, no creo que sea tan desalmada.

—Nada me sorprendería de ella.

—¿Por qué?

—Porque ella al igual que Albert solo desea poder —dijo girando hacia la izquierda.

—Escuchaste algo cuando estabas allá ¿Cierto? —le pregunté mirándolo con el ceño fruncido.

El parece dudar por un segundo y después inhala profundo.

—Si, escuche algo pero no se lo dire a mi padre.

—¿Por qué?

—Porque él no me hace caso.

—¿Que escuchaste?

—Que ella quiere matar a mi padre para reclamar su puesto.

—¿Que? —pregunté sorprendida mientras el auto ingresa al suburbio.

—Si, así como escuchaste —dijo mientras parqueaba el auto.

Bajamos y yo cargo a Ethan mientras él ayuda a bajar a Elizabeth, caminamos hacia el patio por un costado de la casa, cuando entramos nos encontramos con Irina sentada al lado de la pequeña piscina mientras James y su padre cocinan la carne, mi suegra por su parte se encuentra jugando con Jake dentro de la piscina.

—¡Oh rayos! Mamá en traje de baño —dijo Dean con asco mientras ve como Elizabeth corre hacia ella.

—No se lo quitará en todo el día —dije divertida antes de darle un beso en la cabeza a Ethan.

Camino hacia Irina con mi bebé y ella sonríe apenas me ve.

—¿Cómo estás? —me preguntó antes de darle un sonoro beso a Ethan haciéndolo reír.

—Liberada —dije sentándome junto a ella.

—Gracias a Dios le dijiste, aunque ella ya lo sospechaba.

—¿Si? ¿Por qué? —pregunté extrañada mientras le quitaba la ropa a Ethan para ponerle el traje de baño.

—Ella lo huele todo —dijo doblando la ropa de Ethan.

—no lo dudo —sonreí antes de inflar el flotador de dinosaurio.

Mientras Irina termina de aplicarle bronceador a Ethan yo termino de inflar su flotador, después se lo entrego a Dean para que él lo acomode sobre la piscina y se metan juntos al agua, empieza a patalear y a reír cuando toca el agua.

—¿Y como te has sentido? —me preguntó Irina colocándose las gafas.

—La verdad muy bien, no ha habido fiebre ni mucho vomito ni dolor —le contesté con una sonrisa.

—En serio me alegra Emily —me miró con una sonrisa—. Yo quisiera sentirme así de bien, las náuseas me están dando más duro ahora y sufro una acidez horrible —hizo una mala cara.

—¿Y ya fuiste al médico?

—Si, me dijo que era normal en el embarazo y que tenía que guardar reposo, pero odio guardar reposo.

—Te entiendo a la perfección —dije riendo—. Pero ya verás que pasará.

—Eso espero o me volveré loca.

Me meto junto con Dean, Elizabeth y Ethan a la piscina, el agua está fría a pesar de que el invierno ya esta llegando a su fin y ya no se siente tanto frío, después de un rato salimos y nos envolvimos bien en toalla, increíblemente mi suegra aún está en la piscina pero sin Jake.

—Mamá, vas a morir de hipotermia —la regañó James mientras sirven la comida.

—¡Ya salgo! —gritó al mujer.

Sale del agua y Dean y James casi se desmayan de la vergüenza, su madre es muy conocida por sus trajes de baño sensuales pero el de hoy es peor, solo dos tiras unen la pequeña tela que tapaba su zona íntima y su parte trasera y la parte de arriba consiste en dos pedazos de tela unidos por una tira delgada.

—¿Cómo permites que use eso? —preguntó Dean mirando a su padre.

—¿Qué? A mi me gusta —dijo su padre tomando un sorbo de su cerveza.

—Suerte que mis vecinos no son chismosos —dijo James colocando los platos sobre la mesa.

La comida fue tranquila y los chistes de Dean y James acerca del traje de baño de su madre pusieron el toque cómico del medio dia, en la tarde cuando todo acaba le cantamos el cumpleaños a James y apenas se oculta el sol todos nos vamos a casa.

—¿Cómo la pasaste, Eli? —preguntó a Dean mirándola a través del retrovisor.

—¡Bien! Pero me arde la piel.

—Te asoleaste cariño, apenas lleguemos a casa te echaré crema.

—El que si cayó fue mi mini yo —dijo Dean mirando a Ethan quien está completamente dormido.

—Lo malo es que no dormirá en la noche —dije mirando a Ethan.

Apenas llegamos a casa y le aplico crema a Elizabeth ella se queda dormida muy temprano, mientras coloco a Ethan dentro de su cuna escucho mi teléfono sonar pero cuando lo agarro no alcanzo a contestar, veo la pantalla y me doy cuenta de que es la madre de Dean, bajo las escaleras y salgo, él está intentando arreglar algo que tiene mi auto.

—¿Tu madre te llamó? —pregunté acercándome a él.

—No —respondió sacando su teléfono del bolsillo.

Entra una llamada y Dean me mira, creo que es ella porque contesta rápido y abre los ojos por completo después de unos segundos.

—Tengo que irme —dijo limpiando sus manos llenas de grasa.

—¿Que sucede? —pregunté persiguiéndolo.

—Mi madre llamó, algo sucedió con papá —dijo agarrando las llaves de su auto para irse pero yo lo detengo.

—Por favor llámame si necesitas ayuda —le pedí agarrando su brazo.

El me mira y me da un beso fuerte.

—Te amo, prometo no demorarme —se despidió antes de subir a su auto.

Veo como se aleja y me empiezo a sentir ansiosa y preocupada, acaricio mi cuello nerviosa, lo puedo sentir, siento que algo malo está pasando.

Enlazados hasta el finDonde viven las historias. Descúbrelo ahora