Mirarte dos veces

Cap 9

¿Por qué nunca salen de mi cabeza?

¿Por qué siempre me atormentan?

Dejen de carcomer mi cabeza.

Mis pensamientos deberían estar bajo mi tutela ¿Qué hacen ustedes siendo dueños de ella?

Nunca debieron.

¿Cómo se atrevieron?

♱

—Jii —llamé a Jisung desde su habitación, él se encontraba en la cocina haciendo no sé qué cosa.

—¿Qué pasa? —me preguntó él asomándose por la puerta.

—Hoy en la universidad estaba hablando con Changbin ¿Te acuerdas de él? —hablé mientras dejaba mi celular a un lado.

—Tu compañero, si me acuerdo de él —respondió Jisung sin paciencia mientras me hacía señas con las manos para que terminara de hablar.

—Bueno, él y Bangchan te quieren conocer —le dije y Jisung frunció levemente el ceño —No hagas así. Ellos querían salir a algún lugar pero yo les dije que no te gusta salir, entonces Changbin me dijo que no había problema si venían acá, obviamente si tú aceptas.

—Uhm... No lo sé Minho —dijo Jisung dudando —Estas semanas estaré ocupado con el trabajo pero después de eso podemos arreglar un día para que vengan, ¿Te parece?

—Me parece —le respondí con una sonrisa.

—Ahora si me permites debo ir a terminar mis cupcakes —habló Jisung guiñandome un ojo y cerrando la puerta para irse. ¡No me dijo que estaba haciendo cupcakes!

Me levanté tan rápido que me enredé con la cobija y caí de una forma muy original al suelo... Menos mal que Jisung no lo vió. Me paré del suelo y me fui casi corriendo a la cocina, olía delicioso.

—¿Por qué no me dijiste que estabas haciendo cupcakes? —le reclamé mientras me ponía a su lado y con mi dedo índice robaba descaradamente un poco de la mezcla.

—No tengo que contarte todo —me respondió él encojiendose de hombros —Si vuelves a meter tus sucias manos otra vez te las voy a cortar.

—Uhhh, andamos agresivos —dije riéndome y Jisung me miró con una cara asesina pero luego su cara cambió a una de confusión y de repente comenzó a reír —Pareces loco ¿Qué te pasa? ¿Por qué te ríes?

—¿Eso que se escuchó hace rato fuiste tu? —me preguntó Jisung —¿Te caiste?

—No ¿Cómo creés? El único patas chuecas aquí eres tú —le dije cruzandome de brazos.

—Uhm ya veo —dijo Jisung acercándose a mí. Rodó los ojos y luego pasó su pulgar por la punta de mi nariz —Mentiroso.

—¿Por qué?

—Tenias la punta de la nariz sucia de polvo, no he barrido la habitación en dos días y al abrir las ventanas entra mucho polvo —me respondió Jisung y yo solo me quedé callado.

Recosté mi espalda baja en el mesón de la cocina, así podía ver las caras de Jisung a la perfección mientras preparaba los cupcakes.