Mirarte dos veces

Cap 13

[Flashback]

—Maestra, Kai y los demás están molestando a Jisung —le dije a la maestra con el pequeño cumpleañero a mi lado.

—Estoy ocupada Minho, ya falta poco para que se vayan a sus casas —me respondió la maestra y luego se fué.

Luego de la mañana de películas ya era hora de regresar a nuestras casas, estaba en el salón de Jisung acompañándolo mientras recogía su mochila.

—¿Ves? Las maestras no nos hacen caso —me dijo Jisung sentandose arriba del escritorio de la maestra al tiempo que cerraba su bolso.

—No importa, cuando le rompa la cara a esos estúpidos no podrán decirme nada porque la maestra no quiso hacernos caso —le respondí encojiendome de hombros.

—Creo que tienes razón —habló Jisung bajandose del escritorio y quedando frente a mi —¿Nos vamos?

—Espera —le dije y comencé a buscar algo en mi mochila —Toma.

—Me veo ridículo Min —dijo Jisung rodando los ojos con odiosidad.

—¿Pero qué dices? Te ves muy tierno con tu gorrito de cumpleaños —le dije mientras buscaba algo más.

—¿Hay más?

—Por supuesto. Mamá me ayudó a conseguir este, fue difícil porque son edición limitada y existen pocos pero lo importante es que pude conseguirlo —dije pasándole una caja envuelta en un papel de regalo con diseño de ardillas.

Jisung tomó la caja y comenzó a romper el papel con cuidado. Sus mejillas estaban rojas y tenía una sonrisa de oreja a oreja.

—¡No puede ser! ¡Era el dinosaurio que me faltaba! —dijo Jisung muy emocionado para luego abrazarme —Muchas gracias Minho, este es el mejor regalo de cumpleaños.

—De nada Jii. Ocho años es un cifra especial así que debía darte un regalo especial —dije tomándolo de la mano para salir del salón y poder irnos a nuestras casas.

Íbamos caminando por la calle, aún estábamos súper cerca de la escuela. Jisung y yo seguíamos caminando con nuestras manos juntas, él se veía muy feliz con su regalo.

—¡Oigan! —escuchamos una voz a lo lejos y por inercia volteamos a ver hacia donde venía la voz —Jisung, se nos había olvidado que hoy era tu cumpleaños —dijo Kai cuando estuvo frente a nosotros con sus otros cuatro amigos.

Kai tenía doce años al igual que sus amigos, por suerte no íbamos en el mismo grado pero siempre nos molestaban a Jisung y a mí en los recreos.

—Oh... Si, hoy es mi cumpleaños —le dijo Jisung escondiéndose sutil y lentamente detrás de mi con una sonrisa nerviosa.

—¿Por qué no nos recordaste? Te hubiéramos traído un regalo —dijo Soung con esa sonrisa malvada.

—Jisung no necesita regalos de su parte, adiós —les respondí con mala cara retomando nuestro camino aún teniendo a Jisung de la mano.

—¿Y esa caja? ¿Es un juguete? Para verlo, no seas malo —escuchamos a Kai decir y pude ver como Jisung puso más fuerza sobre el regalo.