Si te importo, sálvame. (He Tian & Mo Guan) 19 Days.

42~ Cambios

El lunes temprano, exactamente una semana después de todo lo sucedido, He Tian y Mo Guan Shan se encontraban en la entrada de la escuela, preparados para enfrentarse a las preguntas y a las pesadas clases de ese día.

El primero en recibirlos fue Jian Yi, quien literalmente saltaba de alegría por tener a sus amigos al fin ahí, a su lado. Él mismo se encargó de darle una cálida bienvenida al pelinegro.

-¡Te extrañé mucho!- exclamó mientras lo abrazaba por los hombros.

-Y yo a ustedes, tontos- dijo Tian, tan sonriente como le era posible- ¿Y dónde está tu...?

-¡He Tian! ¡Él está aquí!- de pronto se oyeron los gritos de varias mujeres aproximándose a los tres. El típico grupo de fans del ojigris estaba más emocionado que nunca, algo que ninguno echaba de menos ver.

-Son insoportables- susurró Mo, con los brazos cruzados y el ceño fruncido.

-Cierto, ningún día pararon de hacerle preguntas a cabeza roja. ¿Las castigarás?- mencionó el rubio, mostrando una sonrisa juguetona.

He Tian observó a los dos, pensando en qué hacer a continuación. Realmente nunca le habían molestado esas chicas hasta ese momento, y se sentía mal por ello.

-Adelante, puedes ir con ellas, nosotros estaremos bien- dijo al instante el pelirrojo, tratando de sonreir.

-¿Seguro?

Iba a contestar, pero las chicas ya se habían acercado lo suficiente como para que su voz fuera opacada por los interminables y agudos gritos. Tian se apresuró a alejarlas de sus amigos y guiarlas a un espacio más abierto y seguro.

-¿Dónde estábas?

-¿Por qué faltaste tantos días?

-¿Qué te ha pasado en el rostro?

-¡Sigue igual de atractivo, no lo molestes!

-¡Pero está lastimando!

-¿Qué sucedió todo este tiempo?

Las preguntas no cesaban, haciéndolas imposibles de responder. ¿Qué podía hacer He Tian? Sólo sonreír y asentir, rogando para que se callaran por al menos cinco segundos.

Lo peor de la situación era, sin duda alguna, que a pesar de su cuerpo aún golpeado y adolorido, esas chicas no se controlaban en ponerle las manos encima. Por suerte era un experto en disimular su expresión, lo último que quería era preocuparlas más.

Y lejos, donde el ambiente no era tan ruidoso ni sofocante, sus amigos iban sin conocer el desastre en el que él se había metido.

-¿Acaso no estás celoso?- le preguntó Jian Yi a Shan, ya ambos caminando hacia el lado contrario.

-Son sólo un grupo de niñas idiotas- murmuró éste, notablemente enfurecido.

-¿En serio piensas eso? Yo las veo como lindas chicas detrás de tu principe.

-Asco, nunca llames a He Tian así- se quejó frunciendo el ceño.

Entonces el rubio rió orgulloso por haberlo molestado y lograr ver ese rostro de niño con pucheros. Desde hacia tiempo, más específicamente desde que Tian no volvió a la escuela, el pelirrojo no respondía a ninguna de sus provocaciones. Se sentía feliz por al fin obtener una reacción.

-Oh, pero creo recordar que él te llama "rey". ¿No es así?

Inmediatamente Mo se detuvo y dió media vuelta, decidido a enfrentar a su amigo.

-Escucha, esas chicas no me importan en lo más mínimo- dijo con firmeza- Si He Tian está con ellas es porque son imposibles de controlar, no hay otra razón.