Ups.

6K 830 172
                                    


Hacer como si nada ha pasado no parecía tan difícil, digo, ese sábado juntos fue maravilloso como para que Jimin dude, no obstante el martes que se han citado para cenar siente de nuevo esa inseguridad de saberse burlado, de que el hombre con quien sale lo haya engañado, y esto dado a que lo encontró un tanto retraído, como si le estuviese dando vueltas a un asunto, e incluso les faltó la tan animada charla durante el camino en el auto, por ende el silencio que hasta ahora no pensaba que era incómodo, es interrupido por el teléfono del mayor quién contesta de inmediato, creando la tensión.

—¿Si? Dime, ah claro. ¿Que tienes para mí, Wang?. Por Dios ¿tiene que ser hoy?. Te dí un plazo pero me estás desordenado el horario, maldita sea—se le escucha bastante molesto, y Jimin cree que por ello ha estado retraído. —Tengo un compromiso ahora... No, no puedo. Estoy a punto de llegar a un restaurante.. ¿como crees?. Tengo tanta hambre que ladro de ella, no puedo hacer un breake porque decidiste que siempre si—lo escucha golpear ligeramente el volante, y gira a verlo, encontrándose con que él también lo ve.—Ya que, te quiero aquí en veinte minutos. No espero más—y cuelga tras darle la dirección a la cual ya casi llegan, aún sin quitarle la mirada de encima, lo cual le pone bastante nervioso.

—¿Sucede algo?—no ve en él esa tranquilidad que usualmente mantiene, y desea de alguna manera consolarle, sin embargo la respuesta de Yoongi es lo contrario.

—Lo siento Minnie, nuestra cena tendrá que esperar. No puedo cancelar esto—regresa la vista al frente para continuar el camino pero Jimin se lo impide, bastante molesto por lo que escucha.

—¿Me estás jodiendo? —reclama, sintiendo que joder, ha esperado días para verle y el desgraciado le cancela así como así. —Dijiste que esta noche sería para mí.

—Lo será, solo necesito un momento. Tengo un problema en el trabajo y joder tengo que solucionarlo—le explica, quizá demasiado alterado, y un tanto incrédulo de que se le esté pidiendo explicaciónes, y Jimin se siente un tanto culpable pero no piensa ceder, no cuando le preocupa que quizá, solo quizá le esté engañando.

—Esta noche has quedado conmigo—le recuerda coleriento, no queriendo pensar que le esté mintiendo pero no dispuesto a arriesgarse, y su reclamo cabrea de inmediato al ya enojado empresario.

—Es trabajo Jimin—este debate, con las fracciones tensas, su mandíbula apretada. —Tengo que hacer una pequeña reunión.

—No me importa—le reta. —Ya puede ser muy reunión con la reina pero esta noche es mía.

—Cuida como me hablas—Yoongi detiene el coche, bastante molesto de saberse burlado, sobre todo porque nunca nadie le ha hablado así, ni siquiera ese chico con quién mantuvo su relación más tóxica. —Una vez te advertí que no tolero que se metan en mis asuntos, en mis decisiones, así que respetalo.

Jimin hace oídos sordos.

—No estoy haciendo un berrinche de niño estúpido, y si de respetar nuestro acuerdo hablamos, también debes tomar en cuenta que no me puedes tratar como un escort a quien contratas para un horario en específico y le cancelas cada que te da la gana.

—Cuida tus palabras Jimin—le repite pero eso al menor poco le importa, ya que está decidido a no dejarle partir.

—Cuidado tú—se incorpora en su asiento, notando que ya están frente al restaurante donde habían planeado pasar la cena y joder, Jimin no quiere renunciar a este momento al que ya se ha acostumbrado. —O cenas conmigo, o créeme que te quedas sin amante—lo amenaza entonces, cruzándose de brazos, y no perdiéndose la expresión incrédula del otro.

Joder, es que Yoongi no se lo puede creer ya que jamás le han demandado algo así, y aunque sabe que Jimin no lo hace con mala intención: sabe que lo está chantajeando.

—¿Quién te crees, Park?—lo encara, con las mejillas rojas de rabia, y no debería pero deseoso de comérselo a besos pues verle en plan celoso es tan jodidamente caliente. Pero..—que seas mi amante no te da derecho a inmiscuirte en mis asuntos, mucho peor a chantajearme.

—Chantaje—Jimin repite, también molesto, sosteniéndole la mirada.—¿Es chantaje pedir que respetes una cita conmigo?.

—No, pero amenazar con dejarme si no cedo es demasiado ¿no crees?—lo ha tomado del mentón, su mano fría provocándole escalofríos. —¿No estás siendo muy injusto, amor? —su tono es frío, ronco, y maldita sea, Jimin se derrite.

—Solo reclamo lo que es mio.. —susurra, y pierde al aliento cuándo Yoongi lo besa de manera frenética, castigando con dominio la anomalía que Jimin se ha atrevido a hacer. Lo toma de tal manera en que joder, ese contacto es tan fuerte como entregarse a solas, y es entonces donde sabe que ha hecho bién en reclamar pues no puede estar sin él, no cuándo le añora demasiado.—Eres mío, no quiero que te quedes con nadie esta noche—le pide, cuándo con esfuerzo se separa un poco, logrando que el mayor le comprenda pues le ve con cierta ternura.

—Es trabajo, Minnie. No voy a irme con nadie más—intenta hacerlo razonar, acariciandole la mejilla antes de volverle a besar pareciendo complacido por el berrinche estúpido que le ha armado y Jimin no puede sentirse más confiando.

—Tu horario acabó, y lo que sea que te tengan que decir en esa reunión puede ser frente a mí, o si prefieres te espero en otra mesa, pero no me quiero marchar, hyung. Por favor no canceles nuestra noche..—negosea, no dándole opción, y es más: recibe una sonrisa hermosa por tales ocurriecias.

—Okay—su amante acepta, sabiendo que no tienen opción. —Okay. Has ganado, pero esta; me la cobro.

Y ups, le besa de nuevo, nublando pensamientos en él, hasta ser interrumpidos por la llamada que le informa que sus colegas ya están en el lugar y que joder, van a tener esa puta reunión con Jimin estando presente.

***

¡NO OLVIDES VOTAR!.

Irreversible. © [Yoonmin.]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora