Irreversible. © [Yoonmin.]

Iniciativa.

CANSADO DESPIDE A SU ALUMNO, y se dispone a recoger los materiales usados, sintiéndose agotado y además un tanto ansioso pues hoy no verá a su amante, o al menos eso cree pues son más de las seis y Yoongi no le ha llamado, y debe admitir que lo estubo esperando, aún así procura que ello no afecte su ánimo.

Una hora después está sentado frente a sus padres, bromeando sobre la ridículez de su única tía materna, quién ha montado un escándalo solo porque creyó que habían robado su auto, y discutió con la mujer que supuestamente lo ha hecho, solo para darce cuenta que simplemente los autos de ambas eran exactamente inguales y la única manera de diferenciarlos era la placa, pero claro; los antecedentes de su tía están a favor de primero acusar a una inofensiva persona antes de investigar que ha pasado. No es una mala persona, pero si posee un jodido mal carácter, es hipócrita y egoísta, como toda tía en cada familia.

Jimin siente lastima pero por la pobre desconocida que ha tenido la mala suerte de cruzarse en su camino pues el escándalo seguramente le costó no solo perder el tiempo sino la paciencia al saberse insultada por la mayor de su madre, y agradece que dicha inadaptada señora no los visite casi nunca pues ese tipo de personas es mejor tenerlas lejos. No sabe ni como su madre la soportó durante toda su vida.

—Subiré a terminar mis deberes—anuncia tras haber puesto fin a la charla, y ayudar a levantar la mesa, sin embargo la señora Park lo detiene cruzada de brazos.

—¿No saldrás hoy?—le observa alzando las cejas inquisidora, haciendo que sus bonitas fracciones resalten de curiosidad.

Jimin sabe que ella ya es consiente de a donde se escapa al menos cuatro veces por semana pero prefiere hacerse el tonto, ya que; ¿Como demonios le explica que sale con un tipo con facetas dominantes Daddykink que lo azota y folla con la intención de que ambos obtengan un placer indescriptible que nadie nunca le hizo sentir?.

Niega, sabiendo que no podría hacerlo por ahora.

—Tengo deberes—repite rascandose el cabello nervioso pues además su padre también le observa medio divertido desde su asiento.—Buenas noches.. —así que mejor sube corriendo a su habitación y carga con la responsabilidad de las muchas tareas que la universidad pone sobre él.

🍷🍷🍷

Finalmente dos días después aún sigue sin recibir noticias de él, logrando que admita que le extraña ya que aunque es normal que no le hable por varios días: esta vez lo echa mucho de menos y se encuentra deseando que le marque ya. Quiere revivir esos besos que nadie nunca le ha dado salvo él, quiere salir en una de sus tantas citas y saber que pueden disfrutar y coquetear como si fuera la primera vez, quiere... simplemente terminar bajo ese cuerpo que lo tiene tan trastornado y le da todo lo que físicamente necesita.

Tres meses, ya casi tres meses juntos y joder aún se siente como esa primera semana donde todo comenzó, donde acordaron iniciar eso a lo que ambos ya se han acostumbrado, a lo que a pesar de estar planeado no se siente obligatorio, ni mucho menos es una rutina pues todo aún funciona, es excitante, emocionante, y le llena tanto que joder, ahora mismo sería él quien pagaría simplemente por escuchar su voz luego de más de cuarenta y ocho horas en sequía.

Lo añora, lo necesita, así que no lo piensa mucho y toma el móvil para acabar con esto de una vez por todas.

Él le atiende a los dos tonos, y Jimin ignora lo sorprendido que está.

—¿Bueno?—el hombre teme incluso que algo malo le ha pasado pues Jimin nunca lo ha llamado.

—Hola.. —el aludido suspira bajito, armandose de valor. —¿Como estás? —con solo haberle escuchado le tiemblan la voz y las jodidas piernas.

—Bien.. —un confundido Yoongi del otro lado le sonríe.—¿Tú estás bién?.

—Si, si—asiente aunque no pueda verle. —Y-o.. me preguntaba si..

—Mh.

—¿Quieres que nos veamos hoy? —pregunta con mucho valor, intentando parecer casual y Dios, ignora como ha noqueado al mayor pues este definitivamente no esperaba que tomase la iniciativa pero maldita sea, no se va negar.

—Está bien—Jimin suelta el aire en un suspiro discreto al escucharle y además notarle satisfecho.—¿Qué tienes en mente?.

—Podemos ir a un bar que conozco.

—Perfecto. Paso por tí a las ocho. ¿Si?.

—Si señor. Nos vemos.

🍷🍷🍷

Como ya es usual se han divertido juntos, no han puesto límites a la hora de besarse en público y además se demuestran lo mucho que se han extrañado aferrados en un agarre que para quien sea que los vea es evidente que entre ambos hay un romance. Jimin mantiene las manos sobre sus hombros, acariciando su cuello con sus pequeños dedos mientras Yoongi le sostiene de la cadera, estando ambos muy cerca aún cuándo están en una de las mesas privadas del bar. Y Diosss, créanme que poco les falta para derramar dulces y chocolates pues irradian dulzura mientras se ven a los ojos y conversan sobre temas tan comunes y estúpidos que realmente es increíble que logren parecer en ese instante; interesantes.

Han bebido dos o tres copas de vino blanco y quizá sea eso lo que los tiene mesiendose en un lento baile con la melodía de una canción lenta que suena en el lugar, mientras aún se cuentan su día a día y se roban unos cuantos besos traviesos.

—Te extrañé—Jimin no puede contenerse más y dice eso que tanto le costó admitir, esperando no cruzar un límite pues lo vió por última vez el miércoles en la mañana.

Afortunadamente el pálido simplemente le sonríe, sin un deje de burla u desinterés.—También te extrañé, cielo—y incluso le corresponde, pasando a dejar un cálido beso en sus rosados belfos gruesos. —He estado colmado de trabajo y por ello no he tenido tiempo de llamarte. ¿Me perdonas?.

¿Como negarse?.

—Te perdono—asiente, dejándose besar como un niño pequeño.

—Aunque debo decir—Yoongi se separa, la ilusión brillando en sus hermosos ojos. —.. que realmente me sorprendió que tomaras la iniciativa de llamarme.

A Jimin se le aprieta el corazón pues joder, sabe que ese fue un gran paso, no obstante no está listo para afrontar porque lo ha hecho así que se va por el lado fácil, y su carácter ayuda a ello.

—Pues si no lo hacía tú no te reportas, y necesitaba mi docis de tí y de estos deliciosos besos—lo besa, dando fé a sus palabras, haciéndolo reír y que el momento no sea tenso.

—De acuerdo..-el mayor se incorpora de nuevo, con la mente clara y fresca porque su Jimin es incapaz de hacerle sentir incómodo.—Me disculpo de nuevo, pero amor; debo darte un descanso. Este precioso culo no aguantará mi ritmo todos los días—baja una mano hacia su respingón trasero y lo aprieta, haciendo a Jimin jadear ofendido.

—¡Hyung! —lo regaña, mas está riendo.

—¿Qué?. Esto es mío, y de hecho—afortunadamente sube la mano para sostenerle otra vez la cadera.—Estaba planeando que pasemos el próximo fin de semana juntos ¿que tal?.

—Suena perfecto. —sonríe como un tonto, porque maldita sea, ¿como se va negar?. No es un jodido idiota.

Yoongi se ríe, reconociendo que ver a este niño realmente es refrescante, y joder no quiere dejarlo marchar jamás.

—¿Bailas conmigo?—propone, dejando el tema para otro momento y agradece cuándo Jimin se deja guiar hacia un lado de la mesa para meserse con más libertad aprovechando la música del lugar.

—Aquí quería estar.. —lo escucha murmurar, y realmente espera que esté diciendo la verdad, porque eso es algo que Yoongi jamás olvidará.

***

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