Irreversible. © [Yoonmin.]

Ya no.

Durante su primera noche en casa tras regresar del viaje se mantuvo inquieto, y fue la misma hiperactividad la que le ha impulsado a ponerse no solo al día sino a adelantar trabajo, por lo cual también entró a su clóset buscando ocupar su mente y no dejarla volar a donde ya todos sabemos que va, no obstante inevitablemente ha clavado el pensamiento y la mirada en su vieja caja de zapatos, esa que contiene los sobres que semana tras semana Yoongi le ha dejado sobre la mesita de al lado de la cama, ese que corre a guardar en su mochila pues le hace sentirse inquieto pese a que siempre lo recibe de manera tan ambigua y el cual corre a guardar al estar en su habitación tras que ha regresado solo a casa pues para su pago Yoongi no le da la cara y ninguno hace mención al tema cuándo el momento acaba.

Es bastante dinero ya, o al menos lo suficiente para salir de compras a lo desgraciado, sin embargo hasta teme tocarlo, y es que sabe que no le gusta para nada la manera en que lo ha conseguido, y no porque se crea una prostituta sino porque joder. Él desearía ver a su hombre sin necesidad de que le pague, sin que piense que todo es un trato, o que debe darle miles de won para obtener un poco de su cuerpo. Jimin se entregaría de a gratis, es más, sería él quien pagaría para ser tocado por esos dedos imposiblemente ágiles y esos labios traviesos y dulces.

¿Y por que no?.

Maldita sea, ¿por que no va y le dice que ya no quiere estar atado a un compromiso pre programado?. Lo ha pensado bien, ya no quiere estar en esta situación, ya no piensa fingir que nada sucede, será valiente y se arriesgará a ganar o perder a ese hombre merecedor de su lucha.

A la mierda lo demás.

No puede decirle que no. Jimin se considera a sí mismo alguién atractivo de ver no sólo física sino sexual y moralmente. Sabe que, si se le da oportunidad puede hacer de su vida una montaña rusa de emociónes donde claro habrán altibajos y momentos de terror pero que mayormente lo subirá a las alturas de la gloria que todo ser humano debe disfrutar, y quiere confiar fielmente en que Yoongi se arriesgará.

Obviamente piensa en Hoseok, su mayor miedo es de hecho que el corazón de su amante esté ocupado por ese chico, no obstante le importa una mierda y la idea descabellada de conquistarlo le ronda la mente durante varias horas.

🍷🍷🍷

Digamos que su mente aún sigue nublada a la noche siguiente, y aunque los besos dulces y sensuales en su cuello son tentadores, el chico se siente como la mierda de incómodo.

Y Yoongi lo nota.

Lo tiene bajo su cuerpo aferrándolo como ya es su costumbre cada que desea hacerlo suyo, sin embargo lo siente tenso, buscando apartarlo pero sin decir algo, de hecho desde hace ya varios días lo encuentra retraído, y teme haberle lastimado física o emociónalmente y que esa sea su razón para rechazarlo, por ende se aparta, suspirando pesado. Su respiración acelerada, y el pecho dándole golpes en latidos salvajes, notablemente nervioso, no obstante lo observa fijamente, buscando solucionar esto ya pues ya no lo puede soportar.

—¿Sucede algo? —se inclina, poniendo ambos brazos en el colchón, sustentando su peso para no tocarle pero dejándole aprisionado.

Y el chico solo le devuelve la mirada, efectivamente inquieto.

—¿Algo como qué? —rezonga tímido, logrando que una vez más el mayor suspire, sintiéndose agotado.

—Estás distraído Jimin, y no sé por que—su mirada se oscurece aún más fuerte, y es obvio como comienza a desesperarse. —¿Acaso te hice daño?. Ya sabes, sexualmente hablando, ¿hice algo que no te ha gustado?. Si es así dímelo, créeme que reconozco que soy muy brusco.