Just Dance. 🌞 |JH Y TN|🌞 ✔

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— Lo único bueno, fue que nos dieron la última hora libre. — Suspiro Channel. No le estaba prestando la debida atención a su conversación, me sentía algo ajena, supongo que empezaba a extrañar mi casa, ¿Cuánto había pasado? ¿Dos semanas? ¿Un mes? Aleje los pensamientos, me sentía aérea.

Habíamos salido de la academia una hora antes, había reunión de los profesores con no sé qué comité, pero aprovechamos para ir 'RJ', ya estaba adorando ese lugar. Miré nuestro grupo y era el grupo más raro que había visto, bueno para mí al menos porque todos los demás parecían cómodos.

Channel, es una chica con la piel blanquecina, con su cabello súper lacio que le caía hasta la mitad de la espalda, con un espíritu muy enérgico, su cara es de una chica inocente e ingenua, de esas que quieres proteger todo el tiempo, era más alta que yo por unos centímetros, sin ella al rededor el mundo parecía muy silencioso. Iba caminando de la mano de su novio: V.

Taehyung, mejor conocido como V, o Tae, era alto, con una graciosa sonrisa cuadrada, infantil y extrovertido, siempre anda haciendo bromas, travesura o todo lo que se le ocurriera, en ocasiones se ponía muy serio, volviéndose una persona muy profesional, es como si tuviera otra personalidad, pero entendí que simplemente le gusta disfrutar de la vida y se comportaba como cada ocasión lo a merita. Es un buen chico, haría cualquier cosa por su novia, no puedo imaginar que terminen, creo que lloraría la relación de ambos.

A mí izquierda venía Jimin, aquel badboy, mejor amigo de V. Su cara es redonda, tiene los ojos pequeños y una sonrisa tierna cuando se avergonzaba, en realidad todo él es una ternura hasta que decide ser un romper corazones, iba al área de canto igual que V, su voz es muy bonita y llega unos sorprendentes agudos.

Al lado de este venía nada más y nada menos que el tatuado, sí, el tatuado que me había aterrorizado hace unos días atrás.

FLASHBACK.

—Disculpa— Dijo una voz nerviosa.

—Jungkook, tenía mucho que no te veía, ¿Estás bien? — La amigable Channel lo saludó efusiva.

—Eh, si, lo estoy, puedo hablar con ella un poco. — Hizo un ademán hacia mí, ella me miró, yo asentí y se alejó un poco. — Miane, no volveré a comportarme así, seré una mejor persona y pensaré en la consecuencia, de verdad que me asustaste, pero me alegra que estés bien. — La manera de disculparse era sincera. Se quedó viéndome, esperando mi respuesta.

—Está bien, para la próxima piensen mejor en como tomarse las cosas, pudieron haberme matado en serio. — Me reí y él se avergonzó, pero también sonrió.

Fin del flashback.

Es muy lindo y divertido, famoso entre las chicas, aunque parece aterrarse cuando está frente de alguna, a excepción de mí o Channel, nos veía como unas más del grupo. Aunque sé que esconde alguna historia con las arpías, ya que la vez que nos encontramos en la escalera, no estaba del mejor humor para lidiar con ella.

Íbamos caminando de espacio, observé a mi diminuto grupo de amigos, podía llamarles así, creo, pero falta alguien, desde el día del café no le he vuelto a ver y no me atrevía preguntarle al tatuado al respecto, prefería esperar que pasará lo que tuviera que pasar.

Entre divagues y pensamientos, llegamos al Café, un lugar amplio, con una atmósfera suave. Las paredes estaban pintadas de blanco con pocos diseños Beige, la marca personal era una Alpaca con una bufanda roja, es algo muy lindo, daba toda la voluntad de quedarte todo el día allí, elegimos la mesa de siempre, y como costumbre tomé la ventana.

Alguien despeinó mi cabello.

—Es la única forma para devolverte a la tierra, ¿Estás bien? — Joonie me sonrió, sus hoyuelos siempre me llamaban a la atención.

—Si. — Le dije, yo había desarrollado un pequeño crush por su hermano mayor, Jin era muy responsable, su risa hacia que casi me meara, es muy chistosa, además cocina muy rico, se vestía genial, y aunque no fuera a la academia su voz es muy bonita, lo había encontrado cantando en la cocina, cuando pasé por el otro lado del pasillo camino al baño, solo que por amor a toda la humanidad no lo hagan enfadarse.

—Jin ¿De casualidad necesitas alguna mesera o ayudante de cocina por ahí? — Le pregunté, recordé que debía conseguir un trabajo mientras estudio, además debía pagar los gastos de la casa de huéspedes.

—No, ahora mismo no estamos solicitando a nadie. — Lanzó una toallita que tenía sobre el hombro al regazo de Nam, que intentando sorber el café su tasa se rompió derramando el líquido por toda la mesa y solo se había quedado con el asa en la mano, todo se estaban riendo, pero me contuve, quería convencer a Jin, era mejor estar aquí que en algún lugar desconocido.

—¿Seguro? Eres una grandiosa persona, ¿Vas a dejar una pobre indefensa como yo en la calle? ¿Crees que tu conciencia te lo permita? Vamos Jin— Supliqué.

—¿Estas intentando persuadirme con remordimiento de conciencia? No seas ridícula— Se rió. — En serio, no tengo nada que ofrecerte. Aunque...— Se retiró hasta el mostrador cerca del teléfono, se inclinó y volvió con un papel en la mano. — Toma.

Era una hoja dándole la bienvenida a una nueva biblioteca, que acaba de inaugurar no muy lejos de aquí.

—Si es nuevo, tal vez estén buscando empleados. —Me informó.

—Gomawo. — Nos quedamos ahí hasta que Jin cerró.

—Vamos a un karaoke— Propuso Jimin.

—¿No creen que es muy tarde? — Dije mirando mi reloj que marcaba ya sobre las once.

—A penas la noche empieza. — Dijo Joonie.

Caminamos un rato, había muchas tiendas, muchas de ellas se encontraban cerradas y otras abiertas. Llegamos al lugar, nos sirvieron bebidas y algunos aperitivos, si mami supiera donde estoy ahora mismo, viniera y me sacaría de las orejas, no solo a mí, sino a todos.

Me reí, mientras bebía un sorbo de mi refresco de naranja y por encima del vaso, vi entrar aquel chico de cabello café, alborotando más aún el ambiente, los demás chicos le hicieron una ovación alegrando se por su llegada. Saludo con un abrazo a Channel que andaba haciendo loqueras con Jimin.

Vino a mi lado con una gran sonrisa que inmediatamente se me contagió, se sentó, puso un brazo sobre la mesa y recostó su cabeza en el, nos miramos directamente a los ojos y el habló primero.

-Hola tú.

-Hola tú.