¿Hasta qué punto se puede medir el cansancio? Ya íbamos de vuelta a Corea. Horas de viaje de ida y de vuelta, eran alrededor de dos días, estoy hecha polvo. Tratamos de perder el menor tiempo posible en trivialidades, aunque J-Hope me comentó que quisiera volver como turista y no en caso de emergencia. Cada momento veía a mamá atada a esa camilla, con muchos tubos y cables en su alrededor, me dolía el corazón tan solo verla.
—Haremos todo lo posible para que ella esté bien. — El no dejaba de darme ánimos y le sonreí.
—¿Entonces? — Cambié de tema.
—Entonces qué?
—Todo esto. — Dije de manera obvia.
—¡Ah!, ¿El jet? — Negué con la cabeza, no solo me refería a Jet, sino a todo lo que habían logrado, habían armado un plan en minutos, así que me expliqué.
—Entonces, supongo que tienen mucha influencia. — Le dije recordando cómo habían buscado una solución de inmediato.
—Es complicado, no somos nosotros, son nuestras familias. — Miró sus manos y comenzó a jugar con sus anillos.
—¿No es lo mismo? — Dije un poco desconcertada.
—Es cierto que el dinero hace las cosas más fáciles, y muchos solo viven por hacer crecer su cuenta de banco, otros viven para gastarlos, pero cuando tienes una familia influyente, las exigencias te asfixian. —Su entrecejo se hundió, parecía incómodo consigo mismo.
—Sé que el dinero no trae la absoluta felicidad, pero no me importaría tener de vez en cuando una crisis existencial en un Yate o en un hotel de lujo en algún país europeo. — se rió fuerte y yo le seguí, me sentía un poco más relajada.
—Supongo que no, pero hay sacrificios que no valen la pena.
—¿Cuáles sí?
—Luchar por lo que quieres. Siempre valdrá la pena.
—¿Y tú estás luchando por algo? — Era un chico muy relajado y divertido, incluso si no lo llegabas a conocer podrías creer que es vago, pero lo había visto en las clases, realmente era aplicado y decidido.
—Todos luchamos por algo.
—Supongo que los ricos también son interesantes. — Le dije en broma.
—¿Creíste que no lo sería? — Preguntó haciéndose el ofendido de manera dramática.
—Quien los ve a todos ustedes juntos, los juzgaría fácilmente. — Después de todo fue lo que hice con V, pensé que era un acosador cuan equivocada estaba, me había acostumbrado a su compañía.
—Y sí que lo han hecho, sobre todo si conocen nuestras familias. La familia de Nam tienen una cadena de hoteles famosa, la familia de Jimin es dueña de una de las más grandes empresa de comunicación de todo Corea, el padre de Taehyung durante los últimos quince años ha desarrollado los mejores videojuegos y por último Jungkook es heredero de una academia de artes marciales, tienen escuelas en casi todo el país. Así que sí, es complicado todo.
—¿Y tú? — Se había excluido de los demás.
—Lo mío no es importante. — Sonrió, una sonrisa que no llegó a sus ojos y que fue bastante falsa. — Creo que debería comunicarme con Jimin, necesitamos unos días más para descansar.
Acto seguido, se puedo de pie y camino hasta otro asiento, hizo la llamada y yo me quedé allí, analizando todo lo que me había dicho. Ellos venían de familia muy adinerada, y claro que debía ser así, la Academia de Artes Jung, era Élite, no cualquiera podía entrar allí, solo los niños ricos y los menos agraciados debíamos pasar muchas pruebas y tener un promedio en excelencia para obtener la beca.
Pero lo que más me hizo un nudo de preguntas, es el hecho de que J-hope no quisiera hablar de su familia, entendí que podían ser estricto, muy estricto, porque a Jimin lo había corrido por simplemente haber sido detenido por la policía, en un accidente de adolescentes. ¿Pero qué tan mal se la pasaba Hobi como para ni siquiera mencionarlo? Tendría que hacer mis investigaciones con Channel. Mi vena de la curiosidad necesitaba ser saciada de alguna forma.
Después de unos minutos, volvió al asiento que estaba frente a mí.
—Cuando lleguemos, la llevaré al hospital, sí, yo, porque tú te irás a la casa de huéspedes a descansar. Todas las informaciones que necesites saber sobre tu madre te la daré.
—Pero...
—Sin peros, si te dejo seguir así colapsaras por el cansancio y no lo permitiré. Debes estar bien.
—¿Y tú estarás bien? — Le pregunté.
—Lo estaré, así que toma. — Me pasó unas pastillas. Me las quedé viendo aún en sus manos.
—No son drogas. — Dijo divertido.
—¿Seguro?
—Me la dio la enfermera, son para descansar. — Miré hacia atrás y la mujer que estaba al lado de la camilla asintió, anteriormente le había agradecido por acompañarnos en todo el vuelo para llevar un control en la salud de mi madre hasta que lleguemos a Corea.
—Si me pasa algo, te golpearé. — Cogí las pastillas, en ese momento el avión se sacudió de una manera violenta, J-hope y yo gritamos del susto. Pero todo volvió a la normalidad, nos miramos detenidamente, el piloto se disculpó por el intercomunicador.
—Sí, hay cosas que me asustan. — Dijo suave y me reí incómoda, porque mi corazón aún latía fuerte por el susto.
—La pastilla se me cayó. — Y era cierto, había rodado por algún lado.
—¿Quieres otra?
—No, con un poco de leche caliente está bien.
Nos sirvieron lo que pedimos, y más que el efecto de la leche caliente, el cansancio me ganó. Me dormí.
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Just Dance. 🌞 |JH Y TN|🌞 ✔
FanfictionLa típica historia de TN con algún miembro de BTS... ¿o tal vez no? Si quieres saber, te invito a leer. Terminada y corregida.