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—Ya te dije que estoy bien. — se quejó.

—¡Que te calles! No hables o perderás fuerzas.

—Necesito que ambos se calmen o me veré obligado a sacarla a usted de la ambulancia. — se dirigió a mí y luego a Jin. — y a usted a sedarlo.

—Bien. — refunfuñamos mirando al enfermero de malas ganas.

—Señorita, sabe que debe ir a qué le curen la herida de la pierna porque esto solo es temporal. Y al señor inmediatamente lo llevaremos a quirófano para sacarle la bala.

Continuamos el recorrido en silencio, me había negado ir en otra ambulancia que no fuera la de Jin. Había recibido la bala en un hombro y gracias a la dureza de su cuerpo nada había sido grave, al menos para nosotros. Hoseok tuvo que ser arrastrado por los demás chicos hacia otro vehículo, el enfermero no le permitió venir con nosotros.

Jean Carlos recibió varios disparos uno en una pierna, otro en un hombro y uno en el lado izquierdo del abdomen, si sobrevive es un milagro, aunque yo prefiero que se muera.

—¿Estas bien? — me preguntó Jin.

—Yo debería hacer esa pregunta.

—Eso no es una respuesta. — me dijo burlón.

—Estaré bien cuando sepa que Jean Carlos ha salido de nuestras vidas de una vez por todas.

—Ya, creo que ahora estamos seguros, así que relájate, tienes los hombros cuadrado como si te fueran atacar en cualquier momento y tendrías que defenderte a muerte.

Suspiré ante lo que dijo, ¿acaso podría por fin dormir como se merece? Pocos minutos más tarde llegamos al hospital. A Jin lo llevaron en la camilla y a mí en silla de ruedas.

Limpiar unas quemaduras dolía y picaba como nunca me había imaginado, me vendaron el pie y en la herida del cuello me pusieron una pequeña pomada.

—Debes limpiarla constantemente para que no se te infecte y tomar este medicamento. — me pasó varias recetas.

—Gracias doctora. — le hice una reverencia y luego salí cojeando un poco. Debo ir a ver a Jin, ese hospital era bastante grande así que me fue difícil encontrar el pasillo que iba para el quirófano.

—Disculpe, ¿sabe dónde está el quirófano? — le pregunté a una enfermera que pasaba por ahí.

—Sí, debe bajar al primer piso y doblar a la derecha, ahí puede preguntar.

Seguí mi camino justo cuando llegué al pie de la escalera, vi entrar al resto de nuestro escuadrón.

—¡TN! — gritaron Channel y mamá. Esperé que llegarán hasta mí y las abracé, aunque quise no lloré, ya no me quedaban fuerzas para hacerlo.

Los abracé a todos uno por uno, tomándome tiempo de disfrutarlos con vida, J-Hope me sonrió, una sonrisa que no pude descifrar, de igual manera, me tomó de las manos y comenzamos a caminar hacia el quirófano, con el de un lado y mamá del otro.

—¡¿Dónde está?! — escuchamos un grito, una chica entró como huracán mientras unos guardias trataban de detenerla.

—Señorita, no puede entrar así... — era la chica que había estado con Hoseok en aquel almuerzo. Ella hizo contacto visual con nosotros, específicamente conmigo.

—¡Oh, cariño! ¿estás bien? — corrió hasta donde yo estaba y me abrazó. Yo miré a los chicos alarmada.

—Si. — le dije despacio, luego me soltó.

—¿Dónde está Jin? Si sale vivo de esta lo mato. — continuamos nuestro camino.

Cuando llegamos a la sala de espera la ansiedad quería apoderarse de nosotros, OH JaNi caminaba de un lado para otro comiéndose las uñas.

Just Dance. 🌞 |JH Y TN|🌞 ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora