Just Dance. 🌞 |JH Y TN|🌞 ✔

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Jean Carlos tarareaba una canción mientras seguía en la computadora, tenía que retrasarlo el mayor tiempo posible, ya no estaba segura que pasaría con los chicos, pero alguien debía sobrevivir para poder darle su merecido a ese imbécil. Bastante incertidumbre y miedo tenía ya, al no saber si seguían vivos o muertos.

—Quiero ir al baño. — levantó la vista del computador. Minutos antes cuando había ido a sentarse, se había sacado el arma del cinturón así que estaba a su lado, rogué porque no la tomara.

—¿No puedes esperar? — preguntó con desgana.

—No. — comencé a mover un pie como pude para hacer más creíble mi actuación.

Bufo mientras se paraba, me desató completamente e hizo gesto de que empezara a caminar.

Esto significa dos cosas, uno: está muy confiado en que cualquier situación puede reducirme; y dos: que no le importa lo que tenga que hacer para lograrlo. Al menos ya no tenía la pistola.

Caminamos por los pasillos en silencio, me di cuenta que las cámaras de seguridad estaban grabando, pero de nada me servía esa información porque el seguridad yacía muerto en el gimnasio.

Cuando llegamos me giré hacia él.

—¿Al menos podría tener privacidad? — le dije consiente de que iba a negarse, no dijo nada y me abrió la puerta, entró detrás de mí. Caminé al último cubículo sin saber qué hacer, no quería ir al baño así que sabría que había mentido, de todos modos entré cerrando la puerta.

Si lograba al menos escapar del baño podría correr hasta la biblioteca que está en el segundo piso a la izquierda donde había una salida de emergencia. Ir por el gimnasio era más peligroso porque no sabría cómo sortear a jean Carlos y me atraparía de inmediato.

Conocía bastante bien la Academia así que podía ingeniármela solo si tenía suficiente tiempo en alejarme de él. Cualquier cosa que no pudiera escapar por la biblioteca al menos podría esconderme.

—TN ya llevas suficiente tiempo ahí, abre. — le escuché decir detrás de la puerta.

—Ya voy a salir. — eché la cadena, para continuar con el teatro que había montado. Cuando quité el seguro empujó la puerta haciéndome caer sentada en el inodoro, entró y puso seguro.

—¿Qué haces? — dije intentado no pensar en lo que sí estaba pensando.

—Podemos divertirnos un poco. — se quitó el cinturón. Mis manos comenzaron a temblar.

—No quiero hacerlo. — le suplique.

—No estaba pidiendo tu permiso. — me tomo de la manos haciéndome poner de pie, me comenzó a besar y yo solo quería morir. No podía pasarme esto.

¿A caso maté a un rey o un presidente en mi otra vida?

—Shhhh, no llores, se buena chica. — quitó las lágrimas de mi cara. — Solo nos vamos a divertir, verás que lo disfrutaras como antes.

Siguió besándome mientras yo habría preferido morir en las tantas veces que tuve oportunidad. Mamá sufriría mucho, tal vez los chicos también, pero yo... Yo no podría seguir viviendo en este cuerpo.

No podía rendirme tan fácilmente, ya había Sido mucho el daño emocional que me había causado, no dejaría que marcara mi cuerpo y mi alma.

Solo debía aguantar un poco, cuando desabrochó sus pantalones mi cuerpo se estremeció ante el miedo de no poder escapar, yo misma hice que diéramos la vuelta, si me apoyaba a la puerta podría quitarle el seguro sin que se diera cuenta. Pero no pude lograrlo.