29 de abril, 2014.
Desperté con un fuerte dolor de cabeza. Abrí los ojos lentamente, pero una punzada en la parte trasera de mi cráneo logró que los volviera a cerrar. Mi mano toca la suave sábana que cubre el colchón desnudo, quité delicadamente la tela que me cubre, diseñada para mantener el calor corporal mientras duermes y lo que los normales llamamos "una cobija". Intenté abrir los ojos de nuevo, teniendo éxito esta vez.
Miré mi habitación, simple, paredes cafés, y una de ellas en crema, mi mueble con el maquillaje y esas cosas se encontraba al dado izquierdo y al derecho el armario. La puerta al baño estaba al lado del armario, para solo salir y buscar que ponerme. El espejo encima del maquillaje, mi cama King size, con una mesa de noche a cada lado. Me puse en pie y salí de mi cuarto en busca de algo para comer.
- ¿Cómo dormiste, preciosa? - Me encontré a JJ terminando de preparar el desayuno. Me senté en el desayunador.
- Me duele la cabeza como si hubiera tomado un barril de licor anoche - dije llevando mis manos a las sienes y presionándolas.
- Son los medicamentos. Ya es hora de tu pastilla. - dejó de cocinar para darme la pastilla con un vaso de agua. Si no fuera por él, no tomaría nada y no acabaría mis medicamentos. - ¿Desayunamos? - asentí aun con la pastilla en la boca. - ¡Trágate eso! - dijo riendo.
- Odio esas mierdas. - dije haciendo cara de asco por lo que mi mejor amigo comenzó a reír.
- Lo sé. - aun riendo.
El delicioso desayuno fue un huevo con tocino y pan. Sé cocinar... o bueno, sobrevivo si me dejan sola, ero JJ ha estudiado cocina, aunque es editor en jefe en una de las más grandes firmas de la ciudad. Así que si él está en casa, él cocina. Si él llega temprano, él cocina. Si él llega tarde, pido comida rápida. Si él sale y no me deja nada qué comer, pido comida rápida. Es simple.
- ¿Hoy no tenías que trabajar? - pregunté luego de un rato de silencio.
- Sí - terminó su comida. - pero hablé con Mike y me dejó tomarme el resto de la semana para cuidarte. - ladeé la sonrisa. Michael es el jefe de la parte administrativa de la empresa. El hijo del dueño de la compañía y el mejor amigo de mi mejor amigo.
- ¿No tendrás problemas?
- Las ediciones que tengo que terminar las haré aquí en casa. - asiento. - Así me puedes ayudar e ir practicando.
- Yo quiero escribirlas no editarlas. - dije riendo.
- Pero es bueno que sepas editar para que evites los errores en tus escritos. - volví a asentir.
***
Al final decidí ponerme un pantalón de ejercicio gris, con una blusa de mangas cortas, gris, y unas medias blancas. Até mi cabello en un moño alto. Cero maquillaje. Y súper sexy con el yeso, espero que se note el sarcasmo. Miré el resultado en el espejo, no era mi mejor logro, pero no saldré de la casa.
Soy de descendencia alemana, aunque lo dudo. Se supone que mi abuela era alemana directa, mi madre nació allá pero se vinieron a vivir aquí, conoció a papá y nacimos mi hermana y yo. Mi madre, era una mujer hermosa, a ella si le podrías creer que era europea. Papá es atractivo, no un adonis pero tiene sus virtudes. Y mi hermana es menor que yo, ella heredó lo que yo no tengo de mamá.
No me quejo, tengo mis cosas. Mido un poco más al metro setenta, mi contextura es delgada, pero eso no evita que tenga buenas curvas, mi busto y trasero están equilibrados. Soy castaña oscura, con ondas en el cabello, un flequillo hacia la izquierda. Tengo pecas en mis mejillas, mis ojos son grises azulados, un poco más azules que los de JJ, obviamente más lindos. Mis labios son delgados, pero rellenos, en un tono rosa pálido.
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En tu mente. [Editando]
General FictionUn pasado complicado. Un presente confuso. Un futuro inesperado. Un accidente traumático. Un despertar atónito. Una sorpresa inexplicable. Una pista desconcertante. Una huella difuminada. Y una verdad escondida. Conoce el...