Capítulo Dieciocho.

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2 de setiembre, 2014.

Subí el cierre de mi vestido y me miré en el espejo. Era ceñido al cuerpo, azul rey por medio muslo, de tirantes gruesos y sin escote. Me coloqué unos botines color crema con unos cuantos centímetros de altura y un abrigo de seda blanca con bordados de flores. Mi cabello lacio, el cual tuve que alaciar anoche, caía cubriendo hasta la altura de mi pecho.

Tomé las llaves de mi auto y caminé hasta la cocina donde estaba JJ y Hannah terminando de desayunar.

- ¿Para dónde vas? - preguntó Jay terminando de tragar. Él andaba una camisa negra de manga ¾ abierta hasta el tercer botón, unos vaqueros ajustados y zapatillas. Con su barba de días y su cabello desordenado.

- Tengo presentación hoy. - besé la mejilla de Jay. - ¿Te llevo al instituto? - Hannah asintió.

- Voy por el bolso.

Mi teléfono vibró, miré el mensaje:

"Éxitos en la presentación, chica del supermercado."

- ¿Por qué el súper bolso? - miré el bolso, me encogí de hombros.

- Sabes que no me gustan los vestidos. Me cambiaré cuando termine la presentación.

Hannah llegó colocándose una gorra sobre su cabello y despidiéndose de su hermano. Ambas salimos, subí al asiento del conductor, puse la llave en el contacto y encendí el motor, poniendo en marcha mi auto.

- ¿Me firmas esto? - dijo Hannah antes de bajar del auto. La volteé a ver y fruncí el ceño. - Mis maestros quieren hablar con el responsable que me cuida - se encogió de hombros.

- ¿Por qué no se lo enseñaste a tu hermano?

- Porque Joshua no tiene tiempo para eso. - leí la hoja y firmé. Era la convocación para una reunión con el encargado de Hannah Johnson, para hablar de temas académicos y de comportamiento.

- Bien, yo vendré. - ella ladeó la sonrisa y asintió. - No hagas desastres.

Ella bajó del auto y se perdió entre los adolescentes. Este no fue el instituto al cual yo fui, pero tiene mucho en parecido, por lo menos la estructura y las zonas verdes, aparte de los niños arrogantes y creídos, las chicas tipo Barbie en busca de la corona del baile escolar de fin de curso.

***

- ¡Oh vamos Lauren! - dijo Scar desde afuera del baño. - Tienes que contarme.

Terminé de cambiarme el jodido vestido por algo más como yo: un short con una camisa de alguna banda, medias negras a la rodilla con botines negros de tacón ancho. Tomé mi gorrito del mismo tono que mi ropa, me miré en el espejo y lo coloqué en mi cabeza.

- Te veías genial con el vestido - halago mi amiga mirándome a través del espejo.

- Me veo genial con todo, cariño. - le di un guiño y salí del tocador, con Scar pisándome los talones.

El pasadizo estaba vacío, la mayoría están en clases, pero para nuestra suerte el profesor no llegó, así que tenemos esta hora libre. Scar caminó hasta uno de los basureros cuadrados, verdes, como los que hay en los centros comerciales, se sentó encima del basurero, recogiendo sus piernas llevándolas a su pecho. Me coloqué al frente de ella.

- Vale... cuenta.

Llevé mis manos al dobladillo del gorrito, jalándolo hacia atrás y no pude evitar la sonrisa que se escapó de mis labios.

- Terminamos planes de ir a algún lugar a comer, aunque nos desviamos... - me interrumpió.

- ¡Golosa! - rió apuntándome con su dedo índice.

En tu mente. [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora