En tu mente. [Editando]

Capítulo Sesenta y nueve.

4 de junio, 2015.

- ¿Lista? - escuché la voz de mi mejor amigo detrás de mí haciendo que mi piel se erizara y un escalofrío recorriera mi cuerpo.
Asentí y dejé de ver la fotografía que tenía en la mano, para dejarla caer en la maleta y seguidamente cerrarla. Sentí una mano en mi hombro - Solo son un par de semanas, volverás antes de que te des cuenta.

Volví a asentir sin decir nada. Escuché la puerta de la habitación abrirse un poco más y la campanita del collar resonar mientras los pasitos se hacían presentes en el lugar. Volteé a mirar al pequeño y ladeé mi sonrisa.

- ¿Listo para irnos? - me agaché hasta quedar cerca de él. Se levantó dejando su peso sobre sus patitas traseras y posicionando las delanteras sobre mis rodillas.

- ¿Segura que te lo llevarás? - asentí tomando a Visto en brazos.

- Viviré sola por unas semanas, necesito a un chico fuerte y valiente que me proteja de cualquier cosa - dije tomando la patita del perrito y golpeando con ella el hombro de Jay. Mi mejor amigo rió mientras negaba con su cabeza.

Visto sacó su lengua, jadeando. Hice una mueca haciendo que la carcajada de Joshua se aumentara.

Dejé a Visto en la cama y tomé el bolso de mano. El perro caminó fuera de la habitación siendo seguido por nosotros, en la sala se encontraban Nathan al lado de Hannah, Hill mirando una revista; definitivamente ya se ve embarazada de seis meses con un pequeño creciendo dentro de ella.

Hill levantó la vista para darnos una sonrisa ladeada, sus ojos se cristalizaron nuevamente y las lágrimas comenzaron a rodar mejilla abajo. Jay corrió de nuevo hasta rodearla con sus brazos, intentando calmarla.

- Amor, solo me iré una semana. - Besó su cabeza - Volveré antes de que te des cuenta.

A pesar de que no tuvo los síntomas del primer trimestre del embarazo, al parecer la sensibilidad la está invadiendo ahora. Antier lloró por dos horas porque Hannah mató un zancudo, Hill la regañó diciéndole que el pobre insecto debía tener una familia y que ahora los hijos estarían solos y desamparados.

El día que conoció a mi madre la abrazó por diez minutos y lloró en el hombro de ella, le repitió que había sido una mujer fuerte y que no tenía la culpa de lo que yo había pasado en mi juventud.

- Te llamaré apenas lleguemos a California... - ella lo interrumpió.

- ¿Vas a volver, cierto? - Jay asintió inmediatamente.

- Hillary, te he dicho que no te voy a abandonar. No estoy escapando. - Dijo tomando el rostro de ella entre sus manos - Te amo a ti y al pequeño, no huiré.

Dejó un beso corto en los labios de ella. Ladeé mi sonrisa, nunca había visto a Jay tan feliz con alguien.

***

El avión despegó haciendo que mi espalda se arregostara al asiento. Vi por la ventana como los edificios se comenzaban a hacer pequeños y como los autos dejaban de poder observarse. Di un suspiro cansado y arregosté mi cabeza en el respaldar.

Esta semana ha sido algo exhaustiva, Kyle, Lucy y Alex se fueron la semana pasada, luego recibí un mensaje de parte de Alex diciéndome que si podía hacerme cargo de Visto mientras que él no estaba en el país, así que tuve que ir a recoger al pobre perrito a la casa de los Jones.

Scar, Hannah y yo hemos estado planeando el baby shower para Hill, por lo que hemos estado comprando cosas para decorar y organizando el lugar y la comida.

Luego tuve la reunión con los socios de la editorial donde me informaron de que debería tomar el puesto de editora en jefe en la nueva sede mientras que consiguen a alguien calificado para el puesto ya que accedí, pero por unas semanas. Molly se encargará de diseño por el tiempo que estaré fuera.