Alas || Peter Parker

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Podía ver su sufrimiento en su rostro, no decía ninguna palabra y solo se dedicaba a acariciar la cara de su madre que ahora era mármol, solo las observé unos segundos antes de ver como ella se levantaba y observaba el cuerpo.

—Si te sirved e consuelo, no la conocí pero creo que era una maravillosa madre — le dije iniciando a sentir un poco de incomodidad por la situación.

—¿Tu crees? —me preguntó en un tono molesto —era una mujer excepcional, era cariñosa, era divertida y H.Y.D.R.A. llego y lo arruinó todo... todo para crearte a ti — dijo para dirigir su vista a mi.

—Se que le tienes odio a H.Y.D.R.A. tanto como yo, pero no me intentes culpar de algo que yo no provoqué — dije iniciando a acercarme a ella —se que quieres descargar tu ira con alguien pero estás en el peor lugar como con la peor persona para hacer eso, así que toma a tu madre y salgamos de aquí — le dije caminando a la salida de la habitación pero el sonido de una bala como de un cristal rompiéndose se hicieron presente.

—Eres la única que falta, los demás no pudieron traerme aquí pero tu eres la que pudo traer aquí — me dijo a lo que volteo a ver donde se estrello la bala, por poco y me disparaba a la cabeza —eres lo ultimo de H.Y.D.R.A., si te mato ellos no existirán nunca más.

—No soy de H.Y.D.R.A., he demostrado en muchas ocasiones que no tengo nada que ver con ellos, soy una Vengadora y he luchado por el mundo no solo en este planeta — le dije iniciando a enojarme —no importa que intentes asustarme, intimidarme o quieras hacerme sentir inferior voy a luchar hasta que la única que esté viva en esta habitación sea yo.

—Hay que ver si no mientes.

Ella me disparó un par de veces pero formé un escudo con mármol el cual hizo que todas las balas rebotaban, intentaba dispararme pero no le daba el lujo de lograrlo. Me acerqué a ella y con el escudo le quité el arma para aventarla a otro lado de la habitación, una pelea mano a mano inició, algunos de sus golpes si me lograban dar pero eran más los míos los cuales les causaban más daño. Con varios de mis golpes logré derribarla al suelo y solo podía notar un poco de temor en su mirada hasta que tomó una de las barras de metal que se encontraban en el suelo y me golpeó con ella, cuando volvió a intentar el mismo movimiento tomé la barra y la posicione entre las dos, poco a poco se hacía mármol hasta que con suficiente fuerza la clavé en su pecho.

—Lo siento — le dije quitando la  barra de su cuerpo para aventarla a otro lado —,era la única manera para que no causaras más daño.

—Yo no lo siento— dijo antes de escupirme sangre —y nunca lo haré — dijo para mirar a su madre— por lo menos me voy a reunir con mi familia — dijo antes de mirarme y dejar de moverse, la miré por unos segundos antes de tocarla y volverla mármol, la miré unos segundos para limpiarme, me levanté del suelo y tomé el arma, revisé que tuviera balas y me adentré en los pasillos buscando la salida.
Cada hombre que me intentaba atacar caía muerto en el piso, cuando se me acabaron las balas formé estacas de mármol y continuaba atacando.

—¿Dónde está Mariana?— me preguntó Sebas acercándose a mi antes de matar a un par de hombres.

—Muerta — le dije antes de degollar a otro hombre.

—Hay que salir de aquí, no creo que Fury llegué tan rápido — dijo antes de que tomaramos el ascensor — habrá más hombres arriba, nos han de estar esperando así que prepárate para la lluvia de balas que se avecina — dijo posicionandose a una de las paredes alado de la puerta.

Al abrirse las puertas las balas iniciaron a entrar, no nos podíamos mover e intentar salir rápido del ascensor parecía una pésima idea, me asomé rápidamente antes de volver a acomodarme en la pared —se están acercando, tenemos que hacer algo para salir de aquí—.