Alas || Peter Parker

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Estaba en casa, eran como las 3 de la tarde, había transito así que tuve que caminar unas 12 cuadras hasta mi casa después del trabajo, encendí la televisión y empecé a ver las noticias, era de lo único de lo que la gente hablaba por el momento.

—Después de semanas de rumores, en la rueda de prensa de esta mañana el portavoz de la ONU, se ha confirmado que varios países han firmado lo que se conocen como Los Acuerdos de Sokovia para controlar a los superhéroes y alterados que operan en el mundo  —dijo la reportera—  y esto fue lo que dijo para el público genral— la toma cambio dejando ver a un hombre con un micrófono hablar.

—Tras unas semanas de deliberación con mas de 100 países, se ha creído necesario la creación de un pacto entre naciones para controlar un poder que se nos es desconocido —dijo tomando aire antes de continuar —todos agradecemos la labor del grupo conocido como Los Vengadores desde lo ocurrido del ataque extraterrestre en Nueva York, sin embargo, actos como lo ocurrido en Sokovia nos hacen ver necesario a tomar ciertas medidas para estas actividades. Por eso instamos a todos los superheroes y alterados a firmar los acuerdos de Sokovia de manera inmediata —dijo a lo que se iniciaron a escuchar murmullos —de este modo, los superhéroes trabajaran bajo la dirección de la ONU y no de forma libre. Esperemos contar con el apoyo de todos ellos y que esto sea un paso a la paz mundial, eso es todo —dijo a lo que algunos flashes inundaron su cara, hubo otro cambio de cámara mostrando otra vez a la reportera.

—Por el momento algunos superhéroes como el señor Stark mejor conocido como Iron Man y el coronel Rhodes el hombre detrás de Maquina de Guerra son los primeros en aceptar los tratados, los mantendremos informados y vamos de regreso en el estudio contigo Danny —dijo a lo que apague el televisor.

Yo solo me recargue en el sofá sintiéndome enojada, yo no firmaría esos tontos papeles, no solo dijo superhéroes sino también alterados y la verdad yo no quiero ser parte de esto, cuando me di cuenta había como niebla negra en el piso del apartamento, cuando lo vi este desapareció, tome las llaves del apartamento y salí de ahí para ir a la terraza. 

Cuando llegue extendí mi mano y pensé en aquella niebla, a los segundos esta apareció —¿Qué es esto? —me pregunté a mí misma.

Empecé a mirar  y al observarla detenidamente vi una paloma paso por ella, pero a los segundos ella cayó y transformarse en piedra. Guardé la niebla y me acerque a la paloma, era increíble, era como ver una obra de arte detallada, la tomé y me dirijo a mi departamento, abrí la puerta y entre a el tomando rapidamente el teléfono para marcarle a Stark.

—Hola— decía el en teléfono.

—Stark necesito tu ayuda— dije a lo que el me interrumpió.

—¿Hola? no te escucho —dijo a lo que lo volví a repetir —es broma, por el momento no me encuentro, deja tu mensaje—  dijo a lo que negé enfadada.

—Stark, se que estas ocupado pero acabo de descubrir que creo que tengo un tipo de superpoder nuevo— dije y continué — espero tu llamada, hasta luego— dije para terminar el mensaje y apagar el teléfono. Decidí mantenerme calmada y encender la televisión y ver una caricatura o una película dejando la paloma en la mesa del comedor.

—Hace unos momentos donde se llevaban acabo la junta de la ONU para firmar los acuerdos de Sokovia fue bombardeado— dijo la reportera mostrando el edificio— las cámaras de seguridad de un estacionamiento captaron al culpable, al cual fue reconocido como James Barnes o también el Soldado del Invierno— dijo haciendo que mi sangre se congelara— por ahora las autoridades lo buscan por todo el mundo para capturarlo y que sea juzgado por sus actos— dijo a lo que le cambié de canal mostrando las caricaturas.

El Soldado del Invierno, ese nombre es tan aterrador como el sujeto que lo porta. Cuando estaba en H.Y.D.R.A. ese hombre torturaba a niños y niñas para aprender a seguir ordenes, el nos enseñó a utilizar armas y combatir cuerpo a cuerpo. Los días que nos tocaba entrenar eran un infierno y eso que ya vivíamos en uno, alguno que otro no soportaba y moría durante los entrenamientos, decidí dejar de pensar en eso y me fuí a dormir y esperar dormir bien.