ATENAS POV.
Hoy nos iban a quitar el micrófono a mi y a Río, la verdad estoy un poco nerviosa, con el embarazo me preocupa demasiado el bebé no quiero que le pase algo malo.
- Atenas. - Me llamo Nairobi entrando al despacho, le sonreí y me acerqué a ella.
- ¿Si? - Me abrazó con fuerza y me dio un besito en la mejilla.
- No me creo que estés conmigo, todo esto parece un sueño. - Le acaricié la mejilla y sonreí.
- Pues aquí estamos yo y el bebé... Contigo.
- Y no puedo estar más feliz por esto porque si no exploto. - Solté una carcajada y Nairobi se dirigío a la puerta. - Nos están esperando abajo. - Asentí con la cabeza y la seguí. Al llegar toda la banda estaba presente. Me hicieron señas y me acerqué a ellos, me acosté encima de una mesa y Helsinki empezó a pasarme un detector de metales por mi cuerpo.
- No... Nada. - Dijo Helsinki, miré a Río y supe que Alicia solamente le ha puesto el micrófono a el, me baje de la mesa y me acerqué a Nairobi, cuando estuve alado de ella me miró alegre.
- Sierra no te ha insertado nada, estoy feliz por ti y por el bebé. - Asentí feliz y sonreí, sabía que mi madre no sería capaz de hacerme daño a mi o al bebé. Escuche el aparato pitar y supe que Río tenía el micrófono
- Nairobi... Voy con nana, no quiero ver lo que le van a hacer a Río.
- Te acompaño. - Asentí con la cabeza y nos fuimos de allí. Al llegar donde los rehenes, todos nos miraron.
- ¡Carmen! Por favor acérquese. - Dijo Nairobi con una sonrisa, esta se levantó de su sitio sonriente y al estar enfrente mía la abrace.
- Mi niña, que bien te sienta el rojo.
- No tanto como a ti nana, ¿Podrías venir con nosotras para hablar?
- Atenas... - Me di la vuelta al escuchar mi nombre y la persona que me llamo era Gandía.
- Gandía, dime. - Intenté acercarme a él pero Nairobi me paro.
- No te acerques a él, es peligroso. - No le hice caso y seguí andando, al estar enfrente suyo me sonrió.
- ¿Como estás? Te desmayaste y no me han dicho nada...
- Oh estoy muy bien Gandía, no se preocupe son síntomas del embarazo. - Su mirada se iluminó y yo sonreí.
- Enorabuena.
- Gracias, me tengo que ir ya. - Asintió con la cabeza y me acerqué a Nairobi y nana.
- No te acerques a él Atenas es malo. - Me dijo Nairobi preocupada.
- No me va a hacer nada Nairobi. ¿Nana que dices vienés?
- Claro que si cariño, vamos. - La guíe al despacho y al llegar se sentó en una silla.
- Nana... Esta es Nairobi estuvimos saliendo en el anterior atraco.
- ¿Y ahora? - Nairobi se sentó en el sofá y yo repetí su acción.
- Señora Carmen, Atenas ha sido capturada por la policía, necesita tiempo. - Dijo Nairobi con una sonrisa triste.
- Nana, necesito vuestra ayuda, para yo volver a estar normal... Eres una gran persona y con tu ayuda y la de Nairobi volveré a estar como antes.
- Pues claro que te voy a ayudar, me encantaría.... Ay mi niña ven aquí dame un abrazo. - Me levante de mi sitio y la abrace.
- Señorita Nairobi, venga usted también. - Nairobi asintió feliz y se unió al abrazo.
- No sabía que encontraría a dos preciosas hijas en este atraco. - Le acaricié la mano a Nairobi y le sonreí.
- Gracias nana... - Dijimos yo y Ágata al unísono.
Pasaron las horas y nana ya tenía que irse de nuevo con los rehenes.
- Mis niñas me tengo que ir.
- Claro nana, espera que llamo a alguien para que te acompañe. - Nairobi salio del despacho y a los segundos vino acompañado de... ¿Bogotá? Creo que así se llamaba.
- Hasta luego chicas.
- Adiós nana, adiós Bogotá. - Este me sonrió y yo baje la cabeza.
- Atenas, que quieres hacer ahora. - Me pregunto Nairobi, me acosté en el sofá y Ágata en la silla.
- Nairobi, tienes que trabajar. - Asintió con la cabeza y se acercó a mí.
- Vale, pero tú no puedes acompañar, allí abajo hace demasiado calor.
- Vale, iré al baño. - Nairobi asintió con la cabeza y se acercó a mí.
- Cuidate, cualquier cosa manda a alguien y que me llame. - Me dio un besito en la frente y se fue a trabajar yo me dirigí al baño y al llegar allí se encontraba, Mónica, Denver, Tokyo y Río.
- ¿Sabías que estuve a punto de enrollarme con Denver? - Escuché la voz de Tokyo... Parece estar borracha.
- Tokyo ¿Pero que te pasa a ti por la puta cabeza? - Pregunto Denver.
- Emm... En Toledo, en la verbena. - Yo entre al baño y todos los presentes me miraron.
- Atenas, amiga mía. - Se tiro encima mía y yo miré a Denver.
- Tokyo deja Atenas. - Dijo Río, esta se separó de mi y me miró mal.
- Que mala amiga eres... Quieres que me aleje de ti... - Hizo un puchero y yo baje la cabeza.
- Tu sigue así, alejándote de la gente... Nairobi se cansará de ti... y se irá con Bogotá. - Dijo riendo, Denver la miró serio.
- ¿Porqué no te largas de aquí? - Pregunto cabreado.
- Tokyo, que te parece si vamos a hablar tú y yo y dejamos esto... Es pasado y ya no importa. - Dijo Mónica intentado tranquilizarla.
- No te necesito, me voy sola. - Se acercó a mí y me dio un beso en la mejilla.
- Que piel más suave tienes, ya se porque Nairobi te quiere tanto y no se quiere ir con Bogotá. - Me giño un ojo y se fue de allí.
- Río... - Me acerqué a él pero bajo la cabeza.
- Atenas, Tokyo...
- Siempre te lo dije Río, no sabe lo que quiere... Es una bomba, que no te duela lo que te ha dicho sobre la verbena.
- Y a ti que no te duela lo que dijo de Nairobi, ella te ha esperado mucho y lo de Bogotá es una tontería.
- Ya lo se Río y tu igual intenta olvidarte de ella, esa chica te hace mal.
- Pero yo le quiero.
- El amor es difícil Río, haz lo que más te convenga... Con lo que estés mas cómodo, que yo te voy a apoyar.
- Rio, Atenas el plan Alcatraz se pondrá en marcha. - Dijo Martín entrando al baño.
- Palermo, no habéis cambiado nada del plan verdad. - Este negó con la cabeza y yo asentí.
- Entonces que empiece el plan ¿No?. - Dijo Palermo feliz.
Gracias por leer, hoy pensé publicar dos capítulos, pero no será posible😔.
Lo más probable es que está semana este inactiva.
Lo siento, os amo a todos/as ❤️❤️.
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Mi Plan No Era Enamorarme
FanficAtenas, tenía un solo propósito y era atracar la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre y desaparecer con sus millones, pero no todo sale como espera cuando se enamora y rompe la primera regla del profesor. ❛Al fin y al cabo el amor es una buena razón...