Amanece. El mar se ve peligrosamente calmo. La joven avanza entre las olas, su vestido ligero mojado, pegándose a su cuerpo, delatando redondeces incipientes que hubiese deseado ocultar. Lágrimas saladas como el océano le surcan el rostro.
El cielo y ella saben qué angustia la lleva hasta allí. El cielo, ella y John. Pero a él no le importa. Tal vez al cielo tampoco.
-Te amo, Celine- aquella frase había sido suficiente.
Ella lo ama con las ansias que sólo se reservan para el primer amor. Él la aprecia con el cinismo del que algunos hombres de mundo se enorgullecen. Con la pasión ligera y teñida de lujuria que sólo puede inspirarle una joven de 16 años.
Hace frío y su cuerpo se entumece. Piensa que será mejor. Quizá así no sentirá nada o muy poco.
El agua sube por sus muslos. Le cubre el vientre, la protuberancia leve que abriga al niño que ella ama pero que el padre desprecia. Tal es su desdén, que jamás respondió a sus cartas, jamás quiso enterarse de que, aquello que los unió un verano, ahora los uniría para siempre.
Las olas la salpican directo a los ojos. Sigue avanzando, casi a ciegas. Piensa en su madre, en su hermana, en el pequeño Nick. Podría haberse criado junto a su bebé. Pero eso no sucederá.
La querida memoria de su padre, con la que está presta a reunirse, vuelve a su mente.
Dos bocanadas de agua salada bastan para abatirla, para que el mar implacable, se cobre otra víctima.
Nick observa desde lejos. Intenta correr pero no puede. Se debate, grita, quiere salvarla pero las piernas no le responden. Para cuando logra moverse, sus extremidades se sienten pesadas. Avanza a pasos lentos dados con grandes esfuerzos.
-¡Celine! ¡Celine!- a la orilla del mar, grita el nombre de su hermana. (1)
Observa desesperadamente a los costados, en busca de ayuda. Pero está solo. De pronto, es oscuro.
La marea devuelve algo y Nick se acerca. Es una caja de cartón húmeda medio deshecha. Dentro, yacen sin vida un cachorro recién nacido junto a su madre. Intenta reanimarlos, sin éxito. Abriga a la hembra contra su pecho. "Pobrecilla. Debió pensar que la amaban, que era importante y cuidarían de ella. Y sólo la usaron para botarla después", se lamenta.
Como siempre que aquel sueño lo visita, Nick llora. Llora y se debate entre las sábanas. Sus gemidos alertan a Julian, que como cada noche, yace a su lado.
-Nick, amor- susurra- Nick...despierta- dice apretándolo contra sí.
Con el pecho agitado y las lágrimas aún corriendo por sus mejillas, abre los ojos. A su lado, sólo está Julian.
-Tranquilo, cariño. Ha sido un mal sueño, nada fue real- lo calma acariciándole el cabello.
-Nada fue real...nada...- repite Nick con la mirada perdida, mientras intenta convencerse.
(1) Celine, mencionada por primera vez en el capítulo anterior, es en la vida real el nombre de la hermana menor de Valensi. A efectos de esta ficción, se la retrata como mayor.
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Némesis
FanfictionUna historia de amor y revancha. Ship: Julick (Julian Casablancas x Nick Valensi). Bienvenidos a mi primer fanfic sobre The Strokes. Quedan todos invitados a leer y comentar. Idea original. 15-07-2020