Si me hubieras preguntado, te hubiera dicho SÍ

34. Negociaciones

Este capítulo está catalogado para +18, se describen escenas sexuales

Lilith

Llevo unos días que no paro, estoy agotada, pero mañana tengo el día libre ¡Bien! Sólo tengo que ir por la noche a cerrar, pero eso es un ratito.

Elsa y los chicos han salido algunas noches, me alegra que la hayan acogido tan bien, es buena chica y como nosotros también está sola, además ha hecho buenas migas con Nil, no creo que tarde mucho en caer, estos dos tienen un máster en seducción.

Me gustaría salir un rato esta noche, tengo ganas de divertirme.

- Elsa esta noche podríamos hacer algo. ¿O has quedado?
- Si estaría bien, a ver qué dice Nil. - Baja la cabeza con un poco de vergüenza, yo al verla así no puedo evitar reír.
- ¿Te gusta mi chico? Ya te dije que eran buena gente.
- Bueno... Sí. ¿Y al final qué hay entre Adán y tú? - Me mira curiosa.
- Esa es una buena pregunta, supongo que hay atracción, morbo, complicidad, por supuesto amistad y amor pero somos muy orgullosos.
- Es que no veas el jueguecito que lleváis...
- Ese juego es parte de nosotros. Oye Elsa ¿quieres divertirte un rato a costa de ellos? - Saco mi sonrisa malévola.
- Me das miedo con esa sonrisa.
- ¿Te fías de mí?
- Claro que confío en ti.
- Pues sígueme el juego, si te gusta Nil voy hacer que ruege estar contigo. - Le guiño un ojo.

Al cabo de un rato aparece Nil, va directamente a saludar a Elsa, no veas como sabe atraer a su presa. Al cabo de un par de minutos se da cuenta que estoy ahí.

- ¡Hola pequeña! - Ruedo los ojos.
- ¿Ahora me ves? Como se nota que ya no me quieres tanto.
- ¿Cómo puedes decir eso? - Ya salió el Nil ofendido. - Pequeña tú sabes que yo te amo.
- Ya lo sé. Yo también te amo. ¿Dónde está tu marido?
- ¡Oh! ¿Hoy tienes ganas de verlo? - Pone una sonrisa pícara. - ¿Sabes que para estar con él me tienes que pedir permiso?
- Me da más morbo sin permiso.

En eso entra Adán, muy chulo, con sus gafas de sol y un aire de superioridad. La verdad es que tiene el guapo subido o quizás és que cada vez me atrae más. Se sienta en la barra al lado de Nil, saluda a Elsa y luego me mira.

- ¿Quieres enrollarte conmigo?
- No.
- ¿Quieres ser mi amante?
- No.
- Hola nena, hoy estás... - Se muerde el labio.
- Oye dile a tu marido que no necesito su consentimiento para liarme contigo.
- Hombre... Es mi marido, algo tendrá que decir... - Dice divertido.
- Ah entonces si quieres estar con "mi chica" - Señaló a Elsa y miro a Nil. - También tendré que dar la aprobación.
- ¿Desde cuando es "tu chica"?

Me mira desafiante, sé que ahora le he tocado su orgullo. Vamos a divertirnos.

- Pregúntale a ella - Le digo desafiante. El mira a Elsa buscando su apoyo.
- Yo soy de Lilith desde que la conozco. - Le suelta Elsa, veo que eso lo descoloca. ¡Me encanta!
- Pequeña cuidado con lo que juegas. - Mira mis ojos. - Te recuerdo que sé tus puntos débiles.
- Y yo los tuyos. Mañana os invito a cenar a los tres en mi casa, vosotros tenéis que traer ropa interior "sexy".
- Ten cuidado marido que tiene la misma mirada que cuando me ató. - Ríe Adán, también sabe como retar a Nil.
- Para tener lo que pides tienes que dar algo a cambio. - No aparta su mirada de mis ojos.
- ¿Qué quieres? Recuerda que lo que vayas a pedir sólo me lo pides a mi, ella se queda al margen.

Se queda pensativo, está dándole vueltas al asunto, no le gusta perder.

- Por ahora cuando cerréis nos vamos a ir al "Reno" a cenar, allí te diré que quiero.
- Me parece perfecto. - Le guiño un ojo.

Una vez que lo tenemos todo listo para irnos, entro a la zona de la oficina de Jessica, me quito el pantalón y las bambas, me pongo unas medias, una falda un poco corta y unos pequeños tacones, la camiseta ya está bien.