Wrong Room ⊰• Kookmin

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Las cosas iban de mal en peor. La falta de comunicación entre Jimin y JungKook era bastante. Ya iba una semana sin poder hablar. Ambos estaban lo suficientemente ocupados como para agarrar la laptop y hacer alguna video llamada con el otro.

A Jimin hace unos días lo habían llamado de la academia de baile del primo de su novio, Hoseok, pero la que se encontraba en la cuidad, la cual era manejada por la hermana adoptiva del chico. Días después de haber dado la prueba lo llamaron felicitándolo por haber conseguido el puesto, como profesor de baile y posiblemente creador de coreografías para algunos artistas.

JungKook cada dia se daba cuenta lo dependiente que se había vuelto de su pareja, cada dia lo extrañaba mas y mas, pero su preparación como dueño de las empresas de su padre en unos meses le consumía demasiado tiempo. Aunque no se quejaba, de igual manera quería aunque sea un par de horas para poder llamar a sus hermano, a su madre o su pareja.

-Kook. - Dijo su padre pasando una mano frente a su rostro.

El pelinegro agito levemente su cabeza y volvió a prestar atención a la pantalla de la computadora, para leer lo que su padre le mostro hace unos minutos, pero el hombre simplemente saco la pestaña y miro a su hijo.

-¿Qué pasa?

JungKook lo miro y negó tomando el mouse para volver a abrir la pestaña.

-¿Hace cuanto que no hablas con Jimin? - Pregunto moviendo la pantalla del computador hacia otro lado.

El pelinegro lo volvió a mirar y luego bajo la mirada.

-Una semana o un poco mas. - Murmuro.

-¿Y no crees que debe estar preocupado por ti? - Se cruzo de hombros.

-No lo se, supongo. - Se encogió de hombros. -Pero...

-Nada de peros. - Negó. - Te contare algo que me paso un tiempo con tu madre.

JungKook lo volvió a mirar con curiosidad. Rara vez hablaba del pasado de su madre y el.

-Cuando ustedes aun no nacían, estuve un tiempo ausente en casa. Tu madre vivía con el contante miedo de que yo la engañara y mas cosas. El tiempo que pasábamos juntos era poco, hasta que me di cuenta que eso era una de las cosas mas fundamentales en una relacion y mas si es así de reciente como la tuya y Jimin.

El pelinegro guardo silencio un momento y mordió su labio.

-Después de eso tu madre me dijo que esperaba mellizos. - Sonrió. -Y hay fue cuando me di cuenta de que debía pasar tiempo con mi familia, que mi familia es una de las cosas mas importantes para mi.

-¿Crees que deba llamarlo?

-Una llamada no le hace daño a nadie. - Se encogió de hombros.

JungKook le sonrió y se levanto de la silla para acercarse a la gran ventana de la oficina, busco el contacto del rubio y le marco mirando hacia afuera.

∙•⋅🌻⋅•∙

Su celular sonó el su bolsillo por segunda vez consecutiva, pero Jimin se encontraba demasiado ocupado en el baño, votando lo como que consumió por las nauseas que le provocaban algunas cosas.

Como pudo saco su celular y atendió.

-K-kook, amor no puedo hablar... - Una nueva arcada se hizo presente interrumpiendo sus palabras.

El ceño del pelinegro se frunció mirando la pantalla escuchando claramente como su novio vomitaba. Su padre que se acerco a el, lo miro confundido.

-Nene, ¿te encuentras bien? - Pregunto en un tono preocupado.

-S-si, no te preocupes, es un dolor estomacal. Hablamos mas tarde. - Y corto la llamada.