THE LIST - EXO [TRAD ESP Oficial]

Capítulo XXVI: Mi Princesa [+18]

POV Chanyeol

Baekhyun soltó un pequeño gemido, arrugando la nariz adorablemente. Debería de estar dormido ahora, aún tenía que ir al trabajo en la mañana, pero era difícil considerando que él había tomado casi todo el espacio en la cama. Le gustaba dormir en la mitad de la cama. Tenía la teoría de que las sábanas eran más calientes en medio que a los lados. Aunque la temperatura de la habitación era perfecta, siempre se quejaba de que era muy fría. Le gustaba usar mis suéteres de invierno que eran muy grandes para él y lo hacía verse más adorable de lo que ya era. Había tomado el hábito de tomar una pequeña cobija a todos lados, solo en caso de llegar a tener frío. Una persona normal habría tomado una chaqueta o un suéter, pero Baekhyun le gustaba la cobija. Al principio, parecía raro porque me pedía, más bien me ordenada, que la cargara por él cuando ya no sentía más frío.

Baekhyun se movió y se giró para abrazar esa estúpida cobija. Debería de haber sabido que esa estúpida cobija me bloquearía incluso ahora mismo; estaba en medio de mi sexy zorra y yo. La mayoría de la gente creía que el embarazo podría provocar hormonas furiosas, poniéndolo excitado y complaciente constantemente, pero Baek era diferente. Se había quejado que estaba muy cansado y que no se sentía como para tener sexo todo el maldito tiempo. Específicamente me había dicho: "No me toques cuando tienes pensamientos pervertidos, solo usa tu mano si estás tan caliente". Había herido un poco mi ego. En el pasado, los omegas me habrían rogado para que los tocara, pero ahora mi propio compañero no me quería. Era muy difícil, pero lo entendía. Se estaba volviendo más perra conforme su embarazo avanzaba.

Una de las cosas que aborrecía era que lo abrazara mientras dormíamos. Decía que se sentía atrapado o alguna mierda sin sentido, entonces le di el espacio que quería. Luego se quejó que no le daba suficiente "apoyo" y que nunca lo abrazaba o lo besaba más. Le recodaba que solo seguía sus reglas y órdenes, pero el discutía de nuevo que debería haber una doble comprobación y estar seguro que era lo que él quería.

Claro, no tenía ninguna experiencia con una persona embarazada y levanté la voz una vez que él me pedía algo. ¡Mala idea! Pasaba el resto del día tratando de convencerlo que abriera la puerta de la sala de estar. Después de cinco horas de rogarle y prometerle libros nuevos, abría la puerta. Su cara estaba hinchada, sus ojos y su nariz estaba todos rojos. Esa fue la última vez que levanté la voz, viéndolo tan vulnerable y sentimental me hacía sentir extremadamente culpable.

Casi el mes había pasado desde que supe que mi hermoso Baek estaba cargando a mi bebé. Aun no se le notaba mucho, era aún muy pronto para eso, pero su ombligo ya se había endurecido, también había subido algo de peso algunos kilos en sus caderas y no más. Era algo que esperaba que pasara con el embarazo, pero Baekhyun no lo pensaba, estaba enojado porque ya no entraba en sus pantalones.

Sus pantalones ya eran apretados desde un principio así que era normal que no cupiera más en ellos después del poco peso que había subido. Aun así, quería usarlos, pero se lo prohibí y le dije que le compraría más ropa. ¡Mala idea de nuevo! Se enojó por dos días diciendo que su ropa lo hacía verse atractivo así que prohibirle de ponérselos pensó que ya no lo veía "sexy". No sé cómo se le ocurría tanta mierda, en serio, no tenía sentido.

Nuestro manojo de células lo estaba enfermando. Las náuseas del embarazo comenzaron después de una semana que supimos la existencia de nuestro hijo. Era normal, pero eso no me hacía preocuparme menos. Después de vomitar todo, se veía frágil y pálido. Le daba un té y algunas galletas para hacerlo sentir mejor. A veces me culpaba por lo que estaba pasando, pero siempre se disculpaba después, aun si no era necesario.

Hubo algunos momentos raros cuando volvíamos a actuar atrevidos, pero aún así no estaba de humor para hacer el amor, no significaba que me dejara solo con la mano. Envolvía sus suaves y delicados dedos alrededor de mí y lo frotaba tan fuerte como podía, así como a veces usaba su hermosa boca. Estaba bien, pero cuando estaba de buen humor era fantástico. Era más apretado y no sabía si era mi cabeza, pero se sentía muy apretado y cálido. La sensibilidad extra era un bono, aun la más mínima caricia, hacía gemir a Baekhyun sin motivo cuando entraba en él. Era tan excitante, todo en él era excitante, desde su propia belleza hasta los sonidos que hacía y el hecho que llevaba a mi hijo.