Sin promesas

Capítulo 12.

El camino a Scotland Yard se nos hizo eterno, porque el taxi se tardó mucho en llegar y además de eso nos perdimos, porque el taxista era demasiado joven y no conocía las rutas aún, Caleb estaba frustrado, afortunadamente controlaba sus emociones de manera magistral, cuando por fin llegamos, bajamos y entramos corriendo al edificio, subimos al ascensor, ya con los pulmones empezando a salirse por la garganta.

—Esto cuenta como mi ejercicio de la semana —hablé jadeando y Caleb rio.

—Eres demasiado floja —negué con la cabeza —Si lo eres, solo mira lo cansada que estás por correr un poco. Vas a necesitar más entrenamiento del que creía.

—Cierra la boca —me reí y salí del ascensor cuando llegamos al piso que había marcado.

—Que agresividad —me señaló hacia la izquierda y empezamos a caminar juntos hasta el lugar donde nos reuniríamos con su superior.

Entramos en una oficina y nos sentamos a esperar a que llegara Jean Paul y los que lo acompañarían a negociar mi inclusión dentro de sus investigaciones. Caleb y yo esperamos en silencio, dándonos miradas coquetas cada vez que nuestros ojos se encontraban, era divertido. Unos cinco minutos después, entro en la oficina un hombre moreno, alto, de ojos café y muy bien peinado, iba a levantarme de la silla, pero él negó con la cabeza.

—No se levanten —se sentó frente a nosotros sonriendo y me miro —Al fin veo en persona el rostro de Ariana Collingwood, es un gusto conocerte, soy Jean Paul.

—Ya sabe quién soy, así que no veo necesario el presentarme y supongo que encontraron mis cuentas en redes sociales —asintió y me miró.

—Así es, necesitábamos saber quien era la mujer que Caleb impulsivamente trajo —miro a Caleb como si le reprochara algo y luego me miró de nuevo —Teníamos que estar seguros de que no fuera parte de alguna organización criminal, fácilmente podría ser una infiltrada de la mafia que esta asesinando gobernadores.

—Si fuera parte de alguna de esas mafias no estaría siendo buscada por toda Rusia —respondí mirándolo, era una tontería, lo único que hacía en Rusia era cuidar y cocinarles a las ancianas que vivían cerca de mi casa, por una pequeña cantidad de dinero que a veces no era suficiente para vivir bien.

—Pueden hacer que creamos que es así —negué con la cabeza, que clase de mierda tenia este hombre en la cabeza.

—No entiendo porque está diciéndome esto, cuando estoy segura de que a este punto, ya debe tener en una carpeta llena de información acerca de quién soy y como he vivido mi vida hasta ahora, así que por favor déjese de juegos e intentos de intimidación —miré a Caleb —Y hablemos de lo que realmente es importante.

—Wow —dijo el hombre cuando terminé de hablar y miró a Caleb —Cualquiera que la viera, con su cabello tan largo y rostro tierno, pensaría que es la princesa del cuento.

—No quiero ser la princesa de ningún cuento, porque estamos en la vida real y es mi vida la que está en peligro —lo miré y suspiré —Lo único que quiero es que me digan cómo puedo ayudar, no quiero quedarme encerrada esperando a que otros resuelvan mi vida cuando puedo formar parte de la solución a todos mis problemas.

—Entiendo lo que pides —asintió y sonrió un poco —Y de hecho si puedes ayudarnos, hay varias cosas que podrías hacer por nosotros, pero primero debemos saber que tan fuerte eres mentalmente.

—¿Por qué? —Caleb estaba en silencio a mi lado, mientras Jean Paul hablaba.

—Por qué para algunas de las cosas que queremos que hagas por nosotros, es necesario que seas emocionalmente estable, que no vas a terminar llorando y suplicando que te saquemos de ahí porque estas nerviosa, vas a estar bajo mucha presión, te haríamos algunas pruebas hoy para que mañana vayas a un lugar donde...

—No, Jean Paul, no pueden hacer eso —lo interrumpió Caleb —No pueden enviar a Ariana a hacer trabajos encubierta cuando no ha tenido un solo día de entrenamiento para eso, pasan meses antes de que alguno de nosotros salga a hacerlo.

—¿Y qué quieres que la pongamos a hacer? —preguntó mirándolo, parecía algo molesto.

—Quiero que le den entrenamiento antes de que haga cualquier cosa, que la preparen —hablo serio —O que de una vez digan que no quieren que forme parte de esto, porque me parece una estupidez lo que acabas de decirme.

Me quedé en silencio, no dije ni una sola palabra, Caleb se veía muy molesto al igual que Jean Paul.

—Esa es una falta de respeto Caleb, soy tu superior.

—Que seas mi superior no te hace inteligente —respondió Caleb y se levantó —No estoy dispuesto a seguir escuchando las tonterías que estas diciendo.

Me levanté junto a él y juntos caminamos hasta la salida, Jean Paul no dijo nada, se quedó sentado mirándonos con una expresión de orgullo en su cara, no estaba dispuesto a decir nada mas ni ofrecernos otras opciones. Caminamos hasta el ascensor y subimos, al llegar al primer piso, bajamos y nos encontramos con Garret que venía con un traje bien planchado, pero su cabello completamente desordenado.

—Caleb, Ariana —se acercó sonriendo a nosotros, pero dejo de hacerlo cuando vio la expresión que tenia el hombre a mi lado —¿Qué paso?

—Jean Paul dijo que examinarían su estado emocional esta tarde y la enviarían mañana encubierta quién sabe a dónde —Garret lo miró y luego frunció el ceño.

—¿Está loco o qué? —preguntó confundido.

—No sé que demonios le pasa —Caleb se escuchaba frustrado, no entendía a la perfección su molestia, pero si que enviar a alguien de encubierto sin entrenamiento probablemente fuera peligroso, ya que no tenia idea de como reaccionar frente as situaciones peligrosas.

—Iré a hablar con Lena, ella debe saber mejor que cualquiera las intenciones de O'Malley al decirte eso, te llamaré en cuanto sepa algo —se despidió con la mano y camino hasta el ascensor, mientras que Caleb y yo salíamos del edificio.

—¿Por qué es tan malo lo que propuso? —lo miré y cuando vi que me miró con una expresión de ¿estas preguntando eso en serio? —Mi sentido común me dice que obviamente no debería hacerlo, no estoy entrenada para hacer algo encubierta, pero quiero entender porque te molesto tanto.

—Porque ningún policía con el conocimiento que tiene él haría algo así, él tiene otras intenciones y si son lo que creo no me gustan nada —detuvo un taxi y subimos en el —Garret, Lena y yo vamos a buscar que es lo que tiene en mente.

—Pero él forma parte del Scotland Yard, ¿no es ilegal investigarlo?

—No es ilegal si no se enteran —respiré hondo, esta situación empezaba a salirse de control —Necesitamos protegerte de todos, incluso de los policías que se suponen que deben protegerte.

Las cosas estaban volviéndose un poco turbias, solo esperaba que las personas que tuvieran información de mí, no vendieran mi cabeza a los Rusos.

Yo quiero más de estos dos.... oh si, oh si.
Los amo.
Francy.