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Podía sentir el cuerpo de Namjoon fundirse con el suyo en esa comprometedora posición, era pesado, pero no de forma insoportable, sus labios aún estaban sobre los suyos, besando y reclamando algo que él también quería, Namjoon acarició su mejilla en un acto tierno, mientas que sus propias manos estaban sobre su cabello, las hebras castañas se enredaban entre sus dedos, se sentía tan suave y fino.

Su cuerpo se sentía muy caliente, excitado, hacía mucho tiempo que no estaba en una situación como aquella, así que, reaccionaba debido a la estimulación, Namjoon bajo sus besos, de forma lenta a su barbilla y fue descendiendo más abajo, hasta su cuello, ladeó la cabeza para darle un mejor acceso. ¿Qué se supone que estaba haciendo? Pensaba que todo estaba mal, que tenía que detenerse, pero, la necesidad de sentirse amado en los brazos de alguien más, era fuerte y demandante.

—Namjoon....tenemos que detenernos—dijo con la poca cordura que aún le quedaba

—Mmmm—ronroneo entre su cuello, sin dejar de besar su cálida piel. 

—Es que... está mal.

—¿Lo estoy haciendo mal? —se separó ligeramente de su cuello y le miró de frente. Jin pudo ver qué se encontraba inseguro.

Recordó que tal vez está podría ser la primera experiencia sexual de Namjoon y se sintió peor persona todavía, no se suponía que debía estar viviendolo con él.

—No, tú lo estabas haciendo muy bien, pero...no es correcto.

—¿Por qué no lo es?

Vió sus ojos, tan luminosos, cuya interrogación era genuina, al igual que la excitación, Namjoon le exigía con la mirada una respuesta, Seokjin relamio sus labios.

—Soy tu profesor...

—No estamos en horarios de clases y sólo me quedan tres meses para graduarme.

—Aun así, yo, soy un padre soltero...

—Tener hijos no es impedimento para que seas feliz, ni para que sientas deseo.

—Tengo veintinueve años, soy diez años mayor que tú, está mal, tú primera vez tiene que ser con alguien de tu edad, quién apenas experimente, no conmigo, yo, soy demasiado viejo para esto.

Namjoon sonrió a medias. —No me importa tu edad, soy mayor, una persona consciente de lo que está haciendo y no hay nadie más con quién quisiera estar. Pero, ¿Tú quieres estar conmigo?

SeokJin cerró los ojos unos momentos, había muchísimas dudas en su mente, dolores, recuerdos y remordimientos, sabía que tenía que ser el adulto que se supone que era, una persona responsable, por sus hijos y dejar de tomar decisiones a la ligera, no era justo para Namjoon, para ninguno de los dos, tenía que parar, alejarlo y dejar las cosas claras. No podía aceptar acostarse con él, pero, entonces ¿Por qué le estaba costando tanto? ¿Por qué el deseo de repente se estaba haciendo insoportable? Estaba jodido, lo sabía bien.

—Namjoon...

—Yo sé que también lo quieres, tus ojos me lo dicen, yo quiero esto. Te quiero, creo, no, no creo, yo estoy enamorado de ti.

—¿Cómo sabes que estás enamorado? Eres demasiado joven.

—Lo siento, pero, ¿Haces de menos mis sentimientos por ser menor que tú?

—No—susurró llevando una mano a su mejilla y acariciando tenuemente—. Escúchame, es sólo...no creo que sea la persona para ti.

—¿Podrías dejarme que yo decida eso? Te gusto ¿Verdad? Así como tú me gustas.

Su seguridad, toda su integridad y firmeza flaquearon, se quedó sin aliento mientras veía sus ojos, relamio ligeramente sus labios, y tembló, podría ser el inicio del caos, de una situación de la que posiblemente no saldría ileso, pero la claridad estaba difuminada, soltó el aire lentamente, cerró los ojos unos segundos y cuando los abrió mirándolo de nuevo le sonrió con cariño.

Hosadama *Namjin* Donde viven las historias. Descúbrelo ahora