Yo te elijo a ti (ZIAM)

Capítulo XIII

Jennifer se mostró confundida al ver a Zayn desconcertado y escucharlo pronunciar algo que no alcanzó a descifrar. Al parecer, la noticia no le había caído tan bien como pensó.

—¿Todo bien, Zayn?

Zayn alzó su mirada hacia Jennifer, quien se mostraba preocupada. El moreno tenía muchísimas ganas de rechazar la oferta que había hecho su jefa, pero sabía que no podía hacerlo. No podía decepcionarla, mucho menos ahora, que sus oportunidades laborales iban en crecimiento.

—No, todo bien. —sonrió. —Muchas gracias, de nuevo.

—De nada, ahora a trabajar...

El moreno caminó hasta su oficina y se sentó en la silla de su escritorio. Encendió su Mac y sacó la cámara de su mochila, sin dejar de pensar en lo que le habían dicho momentos atrás. ¿Cómo actuaría frente a Liam en cuanto lo vuelva a ver? Sin duda alguna, era una pesadilla.

Ryan no se enteraría, por ningún motivo. Éste no sabía nada sobre Liam, pues Zayn no le había mencionado nada sobre sus ex novios, ni siquiera sobre Christopher. Él pensaba que era mejor así.

***

Liam acababa de llegar a su hotel, pues se había programado una reunión con el equipo de administración, la cual duraría por lo menos unas tres horas. Se sentía cansado y le dolía un poco la cabeza, había sido una mala idea haber bebido tanto vino la noche anterior, sabiendo que al día siguiente tendría que trabajar.

Llegó a su oficina y se preparó una taza de café negro, la segunda que tomaba en el día... Y apenas eran las diez de la mañana. Se sentó en su escritorio y revisó su agenda, su secretaria le había programado una entrevista para el día lunes sin avisarle. Suspiró, no le quedaba otra opción más que aceptar, pues no quería renegar tan temprano.

Cerró los ojos y se acomodó en su silla, queriendo descansar un rato, antes de que lo llamen para decirle que lo estaban esperando en el salón de reuniones. Esto no se logró, ya que entró Louis sin siquiera tocar la puerta antes. Liam abrió los ojos, a punto de explotar contra su socio y también mejor amigo.

—¡¿Por qué no tocas?! —exclamó el castaño.

—Lo siento. —se disculpó el ojiazul. —Tú y yo tenemos una conversación pendiente.

—¿Sobre qué?

—¿Ya no recuerdas que ayer estabas pálido como un fantasma? —preguntó, Liam rodó los ojos, no quería hablar de eso. —¿Qué pasó en ese lugar?

—No quiero hablar de eso ahora, Louis. —respondió, serio. —Tenemos una reunión en quince minutos.

—No me importa si la reunión es hasta con el primer ministro de Inglaterra. Tú me vas a contar qué pasó ayer. —respondió. —Harry se quedó preocupado luego de que te fuiste.

Liam suspiró, había olvidado lo terco que podía llegar a ser Louis cuando se lo proponía. Suspiró, antes de tomar un sorbo de su café. —Me encontré con mi ex novio, Zayn... No lo veía desde hace diez años.

Louis se mostró sorprendido, pues sabía muy bien la historia de Liam con aquel muchacho. El castaño le había contado todo cuando se hicieron buenos amigos en la universidad.

—¿Cómo lo viste?

—Jodidamente hermoso. —respondió, con la mirada perdida y una sonrisa triste. —Es fotógrafo ahora.

—¿Lo invitaste a salir?

—No.

—¿Por qué no? —preguntó el ojiazul, provocando que el dolor de cabeza de Liam vaya en aumento.