La Novia De Mi Tío - Juliantina (Terminada)

Capitulo 28

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Valentina pov:

Sentí que alguien golpeaba mi costado, abrí los ojos un poco, y vi que Juliana tiraba patadas y movía los brazos como queriendo soltarse de algo.

Me senté en la cama e intente despertarla.

- Juliana - dije muy suave. No quería que le pase algo. Dicen que es malo despertar de golpe a alguien que está teniendo una pesadilla.

-Juliana!!- dije un poco más alto. Y nada ella seguía así, incluso me dio dos cachetadas cuando intente tomar sus manos.

-Juliana!!!- grite. Al no poder calmarla ya.

En ese instante abrió los ojos, me miro y comenzó a llorar.

-Bebe, pequeña, tranquila solo fue una pesadilla, tuviste un mal sueño- dije tratando de calmarla- estoy aquí contigo, tranquila.

-Yo, yo, yo- decía entre sollozos- yo, dios, no quiero volver a soñar algo así, nunca más- me dijo abrazándose fuerte a mí.

-Quieres hablar de ello?- dije

-No, yo, no, no quiero recordar por favor-me dijo.

Asentí, trate de levantarme pero no me dejo, se aferraba más a mí.

-Bebe, necesito ir por un vaso de agua, así lo tomes y te pase un poco el susto- dije, pero no había forma.

-No, no te vayas, por favor, no- dijo, la verdad me estaba preocupando.

-Ey, ey mírame- dije y tome su rostro para que me mirara- estoy aquí contigo, lo que sea que hayas soñado, solo fue eso, un mal sueño- le dije para calmarla. Bese su frente e intente levantarme. Esta vez me dejo.

Baje a la cocina muy preocupada que habrá soñado. Llene el vaso con agua, pero recordé que mi madre sabia decir que cuando te asuste toma agua con azúcar, calma la ansiedad. Así que tome la azúcar y servir dos pequeñas cucharadas en el vaso de agua. Cuando estaba a punto de darme vuelta para subir a la habitación, unos brazos me rodearon por la cintura.

-Ey, que pasa?- le dije a Juliana.

-Te amo, sabes, te amo, nunca me dejes, nunca te alejes de mí- porque me decía eso. No entendía nada.

-Que fue lo que soñaste?- le pregunte.

Nos dirigimos al sofá, una vez sentadas, le di el vaso con agua para que se calmara.

-Yo- suspiro- soñé que me despertaba, y tú no estabas a mi lado- la mire me parecía tierna, pero no creo que eso haya sido lo de la pesadilla-yo baje aquí a la sala a buscarte, porque sentí murmullos- dijo y empezó a sollozar- yo llegue a la sala, y tu, tu...- dijo, trate de tranquilizarla tomando su mano y dejando un beso allí, ella me miro- tú estabas en este mismo sofá, teniendo sexo con mi tío- dijo bajando su cabeza y llorando una vez más.

La tome entre mis brazos y la senté en mi regazo.

-Shh, no llores bebe- dije abrazándola muy fuerte- solo fue un mal sueño, nada de eso pasara, yo estoy aquí, tu estas aquí conmigo- dije y bese sus mejillas, con cada lagrima que caía.

-Yo, no sé porque soñé eso, yo no quiero volver a tener una pesadilla así- me dijo.

La tome del rostro y comencé a besarla muy lento y suave.

-Yo te amo pequeña, te amo, y voy a luchar por ti, por nosotras, aunque sé que no será fácil por tus padres, pero lo hare por nosotras- dije y ella me beso.

Mientras nos besábamos sentí sus lágrimas, realmente la había pasado mal en ese sueño.

-No llores más, por favor me rompes el corazón- dije en tono de niñita, ella sonrió.

-Te amo- dijo.

-Te amo pequeña- dije y con ella en brazos subí a la habitación otra vez, nos volvimos a meter bajo las sabanas.

En ningún momento deje de abrazarla y darle pequeños besos en su cabeza, y acariciar su espalda. Sentí que poco a poco se quedó dormida.

Ella la había pasado mal, y yo me sentía mal por eso. Pero solo debíamos aguantar dos días mas, Beltrán se iría a Alemania, y yo podría comenzar a hacer las cosas bien con Juliana. El primer paso era pedirle que sea mi novia.

Sonreí sonaba medio raro, yo pedirle que sea mi novia, yo una mujer de 38 años enamorada de una niña de 18. Realmente el amor había golpeado en mi corazón.