Nephilim Venezolana

Capítulo 34

Ha pasado alrededor de una semana, aunque personalmente siento que han sido meses, hasta ahora los chicos han regresado de Idris, y están trabajando juntos en el rastreo de la bruja.
Entre otras cosas, mi Tía Celina, El tío Antonio y las gemelas saben todo sobre mí, el mundo de las sombras y la hija perdida de mi mamá, que fue la misma que les contó todo. Jace realmente se molestó por el gesto imprudente de mi madre, pues ella no debería hablar esto a los mundis.
Por otro lado, Gali había sido realmente un sol en esta tormenta, todos los días me hacía una videollamada, se encargó de hacerme sentir mejor, aunque también se dio cuenta de que era mentira que estaba enferma, pero no insistió en preguntarme el porqué de mi mentira.
Los demás chicos también han sido muy buenos, me envían regalos y están al pendiente, excepto por Gil que solo me habló un par de veces diciéndome “No te acostumbres ¿Ok?”, él es un Odioso, pero también un buen amigo.
Mi mamá por su parte, está segura de que Allison es su hija, yo realmente no estoy segura, pero ojalá y ella pueda encontrarla.
– Alana – mi mamá se asomó al cuarto – Ashley llegará más tarde, me dijo  que los chicos y ella irán a una cafetería o algo así.
– ¿De verdad? – dije asombrada.
–Sí, dijo que Caleb la acompañaría.
– Naguará, se pasan, ahora como yo no voy, si salen y disfrutan.
–Cuando el problema de la bruja este resuelto tú también podrás ir; Nos vemos más tarde, después del trabajo iré por comida, así que no me esperes temprano.
–Sí.
–Chao – dijo y se fue.
Continué viendo mi serie en la computadora, creo que a final de cuentas no está tan mal, es como unas vacaciones, pero la verdad, me siento como una cobarde, oculta tras salvaguardas, protegida de la bruja, es ridículo.
Mi teléfono sonó con una llamada, era de Galileo.
–Hola – atendí.
–Hola preciosa.
Cuando dijo eso sentí mis mejillas calentarse.
–¿Cómo estás? – preguntó.
– Lo mejor que se puede estando encerrada.
– Para alguien con agorafobia estás en el paraíso, pero bueno, ¿Qué estás haciendo?
– Estoy viendo una serie ¿y tú?
–Yo estoy dirigiéndome hacia la casa de una chica que quiero que sea mi novia.
–¿Ah sí? – Dije un poco triste – No sabía eso de ti.
– Alana.
–¿Sí?
– Me refiero a ti ¿Sabes?
– Ah – dije algo aliviada – Pensé que irías con los chicos, Ashley dijo que saldrían.
–Sí, van a McDonald’s o Starbucks, no recuerdo muy bien, pero yo prefiero visitarte, tengo muchos días sin verte.
–Actúas como si fueras mi novio.
–Y podría serlo, solo basta que tú me lo preguntes para que yo te diga que sí.
Reí ante eso.
–Muy chistoso eh, cuando llegues te doy un premio, porque ese chiste fue buenísimo.
–Siento que no te gusto – rió también – ya casi llego…
La llamada se escuchó entrecortada.
–¿Gali? – Pregunté - ¿Gali responde?
Un ruido sordo como de un golpe se escuchó, algo parecido a la voz de Gali llamándome, pero nada concreto.
–¿Qué pasa? – dije alarmándome.
El fuerte sonido de estática me obligo a alejar el teléfono de mi oreja, y la llamada se colgó.
Llamé de nuevo, pero fui enviada directo al buzón de mensaje, intente de nuevo y fue igual. ¿Qué paso? ¿Debería asustarme? Llame otro par de veces y tampoco cayó.
No debería alterarme, tal vez se le acabo la batería, dijo que casi llegaba, solo tenía que esperarlo.
Intente no desesperarme, pero fue inútil, tenía un mal presentimiento, algo malo pasó, lo podía intuir.
Revise el reloj, habían pasado treinta minutos desde la llamada, y Galileo no llegaba, me fui a la entrada y vi por la ventana, justo en ese momento, algo cayo frente a la casa, algo parecido a un dardo, pero en algo estaba atado a eso, cayo fuera de las salvaguardas de la casa, tal vez es una señal.
Abrí la puerta y por primera vez en varios días camine fuera de casa, con rapidez tome el objeto y regrese a casa.
Sin duda, era un dardo largo con una nota.
“De alguna forma tendrás que salir de esa casa, tu amigo y yo te estamos esperando, no tardes.
-Sra. Dark”
Sentí un vacío en el estómago, tiene a Gali, la bruja tiene a Gali.
Corrí a mi habitación y me puse el traje de combate que guardaba, tome tantas armas como pude y con la estela que Jace me había dado, me puse tantas runas como pensé me fuesen útiles.
Detrás de la nota, había una dirección, la cual estoy dispuesta a seguir.
Tome mi teléfono y envié un mensaje a Ashley, otro a mi mamá, y dude en enviárselo a Jace, así que se lo envíe a Magnus, él sabrá darle la noticia de que su hermana menor se fue en una misión suicida ella sola.
Tome el suéter que Ashley me dio y me lo puse, tome algo de dinero y salí de casa, dirigiéndome al metro.
¿Los cazadores de sombras normales se transportan en metro? No lo creo, ellos parecen ser más de los que aparecen de un portal o bajan de un carruaje de caballos negros. Pero en mi caso, tengo que ir en metro, si estuviera en Venezuela, en Barinas, tendría que ir en autobús.
La dirección escrita en el papel me llevo a un viejo parque que parece estar abandonado, cruce la verja y me adentre en el lugar, estaba cubierto de maleza y matorrales, nadie podía verme desde afuera, camine hasta llegar a un túnel, o eso parecía, una gran roca le cubría la entrada y con fuerza sobre humana la empuje dejando la entrada libre, todo estaba oscuro allí dentro.
Me adentre lentamente, busqué mi piedra runa para iluminar el lugar, pero en ese momento un brillo cegador apareció de repente, junto con una fuerza que me halaba.
Está fuerza me succiono a un portal que me llevaba a un destino desconocido, ay no puede ser, ¿A dónde me lleva esto? Tengo miedo.

***
KE KEEEE?!!!
¿Qué pasará?
Comenten sus teorías.

-Srta. Umbrella ☂️