Habitación 03
10:45pm.
Sus sueños abrumaban su descanso. Dormido boca arriba con una fría temperatura en esa habitación, Izuku sudaba frío en medio de una pesadilla... Su pesadilla, en la cual se veía a sí mismo matando a mucha gente mientras cruelmente era controlado por su madre quien en ese sueño poseía el aspecto de un horrible espectro verde opaco y mugriento. A su lado estaban los demás miembros de la mansión riéndose retorcidamente mientras él tenía en su poder un cuchillo el cual había perforado en varias ocasiones el cuerpo de un Kacchan ya sin vida lleno de sangre y su rostro desfigurado por las puñaladas.
Aquel Omega despertó sobresaltado de la cama quedando sentado con su cuerpo totalmente cubierto de sudor. Sus manos temblaban. Sus ojos lloraban y su respiración estaba acelerada. Estaba sin ropa, a su lado estaba él, su Kacchan quien se había despertado por la reacción de Midoriya.
Katsuki estaba de espaldas al techo con ambas manos debajo de su almohada y su rostro hundido en ésta. Al sentir el violento despertar de su pareja, de inmediato se incorporó con la espalda recostada de la enorme cabecera mientras extendía los brazos hasta lograr tener a Izuku sobre su pecho, el cual se encogió como una bolita al sentir ese fuerte cuerpo contra el suyo.
—¿De nuevo? Diablos... Ha sido la tercera vez que despiertas así.
—Lo siento, Kacchan...
—¿El mismo jodido sueño?
—Si...Maldición. Tampoco en los sueños estaba a salvo de sus pecados. Era terriblemente injusto el saber que está siendo torturado por cosas que realizó sin tener control de si mismo. Era cruel.
Si Katsuki se concentrase mucho más en escuchar; había podido oír el corazón de su pareja estremecerse. Odiaba tener que ver a Izuku de esa manera. Habían pasado varias horas en las que no había ingerido las pastillas y seguramente estaba en el periodo de abstinencia el cual para su opinión era una total patada en el culo.
Izuku logró percibir algo inusual en su Alfa. Su olor se estaba intensificando sin necesidad de excitarse. Lo que provocó que gimiera en respuesta a las feromonas inhaladas las cuales desataron su deseo. Deseo que no había sentido desde hace un mes el cual justo ahora estaba apoderándose de sus sentidos haciéndole jadear y aferrarse muchísimo más a la piel contraria mientras que con su tibia lengua hacia recorridos y chupetones alrededor de los pezones contrarios.
De inmediato Katsuki supo lo que quería. Los periodos de sueño era relativamente cortos pero ésta vez no era él quien pedía sexo. Su Omega se acercaba más y más hasta llegar a su cuello en dónde los besos y lamidas calientes dieron inicio y Katsuki Bakugō pudo despedirse para siempre de su autocontrol y darle pase libre a su celo, el cual fue percibido por el contrario al inhalar más fuerte en la zona del cuello donde yacia la glándula de olor.
Katsuki se despojó de sus pantalones. Quedando ambos en ropa interior. Algo inesperado estaba sucediendo y era que el celo de Midoriya también apareció. No tenía que ser médico para saber que incluso los ciclos del chico estaban descontrolados. Malditas drogas. Ahora ambos tendrían la ardua tarea de satisfacerse mutuamente. Se metió de nuevo a la cama en donde el Omega estaba retorciéndose de lujuria mientras gimoteaba con su mirada nublada. No esperó a que el otro terminara de acomodarse cuando de pronto tomó sus brazos y lo obligó a caer sobre su preciso cuerpo el cual no se hizo esperar y rodeó la cintura del mayor con ambas piernas sintiendo la fricción de ambos penes contra la suave tela del boxer.
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ANXIETY
FanficTras su drástica desaparición. Izuku Midoriya estuvo aislado de todas aquellas personas que ama por culpa de su homofóbica madre, quien se encargó de desaparecerlo del mundo durante ocho años en un hospital psiquiátrico. Los cuales fueron una carnic...