Eternally In Love

Paseo

"Hermosa vida, hermoso día, quédate a mi lado" Crush

A continuación decidieron ir a recorrer el lugar, se preguntaban si habría algún pueblo cerca, así que fueron a investigar. Encontraron un pequeño pueblo bajando una colina por lo que decidieron ir a visitarlo.

—¡Qué lugar mas lindo! — dijo Rin.

—Sí y se ve muy tranquilo.

—¿Qué te parece si entramos a alguna tienda? Sería una buena forma de conocer gente.

—Me parece bien.

El shinigami les había dicho cuando llegaron que en el mundo puro las personas vivían en sociedad. Ahora la joven pareja estaba comprobando que la vida en ese mundo no era tan distinta a la vida que tenían en la aldea de la hoja.

Entraron a una tienda de ropa y una señora los atendió, parecía como de unos 40 años.

—¡Bienvenidos!

—Buenas tardes — dijeron a la vez.

—¿Son nuevos por aquí? nunca los había visto.

—Sí,somos recién llegados — explicó Obito.

—¡Qué bueno! espero que les guste el pueblo.

—De hecho no vivimos en el pueblo — comentó Rin — Vivimos colina arriba en el bosque.

—Típico, los recién llegados siempre escogen lugares solitarios para vivir.

—¿En serio? — preguntó Obito.

—Sí, yo misma vivía en un lugar bastante apartado al principio pero luego me mudé a este pueblo.
—Señora tengo una pregunta — acotó Rin.

—Dime, niña.

— Aquí hay tiendas pero ¿dónde conseguimos dinero para comprar?

—No necesitas dinero, aquí todo funciona en base a deseos, los habitantes de este mundo nos organizamos así porque imitamos nuestra vida en la tierra.

—¿O sea qué las tiendas en realidad son una excusa para relacionarse con otras personas?

—Si algo así jaja

Después de una tendida charla donde Obito y Rin se sacaron algunas dudas, finalmente se marcharon.

—Adiós señora — se despidieron a la vez.

—Adiós niños, vuelvan cuando quieran.

—Sí, muchas gracias —se despidió Rin.

Se fueron de la tienda con una nueva amiga y se llevaron algunas prendas consigo, también visitaron otras tiendas en busca de alimentos y volvieron de la mano a casa.

—Que bien que la pasamos hoy ¿no cierto cariño?

Obito se había puesto colorado al escuchar esa palabra — ¿Cómo me dijiste?

—Te dije cariño, ahora eres mi novio, es normal que te llame así.

—S-sí lo sé, solo que todavía no me acostumbro.

Tuvieron una cena tranquila, habían cocinado juntos y luego ordenaron todo.

—Estaba pensando que mañana podríamos hacer un picnic ¿qué te parece Obito?

—Buena idea.

—Bien entonces deberíamos ir a dormir, así mañana nos levantamos temprano y preparamos todo ¿qué dices?

—Esta bien, hasta mañana Rin.

—Hasta mañana Obito.

Rin se acercó a él y se puso en puntas de pie para dejarle un pequeño beso en la punta de la nariz.

—¿Qué fue eso? — preguntó Obito muy avergonzado cubriéndose la nariz.

—Te dije que te acostumbres a los besos — Rin soltó una risa y volteó para irse a su habitación 

—Buenas noches Obito.

—Buenas noches.

Obito estaba procesando todo lo que sucedió ese día, sin duda había sido el más feliz de toda su vida.