Eternally In Love

Vuelta a casa

"Si tú fueras para toda la vida yo sería la persona más feliz" El sueño de Morfeo

Habían pasado dos semanas en la llamada "playa del amor". Obito y Rin estaban muy satisfechos, no solo disfrutaron del mar y de la suave arena rosada, también exploraron toda la zona.

Habían conocido unas pequeñas islas que quedaban cerca de la costa, encontraron caparazones que los caracoles habían abandonado en la arena, a diferencia de los caracoles de la tierra estos tenían caparazones de muchos colores diferentes y la textura era parecida a la de un cristal, Obito había encontrado una caparazón arcoíris de tamaño pequeño y se la obsequió a Rin, a ella le había gustado mucho el regalo.

También probaron todas las instalaciones que tenía el hotel, como su restaurante, piscina y karaoke. La noche que fueron al karaoke Rin cantó primero, había escogido una canción sobre una chica que encontraba a su verdadero amor y se la dedicó a Obito. Mientras que él escogió una canción sobre el amor para toda la vida y se la dedicó a Rin.

Se habían divertido mucho esas dos semanas pero como ya no había mucho que hacer decidieron volver a su casa. Pasaron a saludar al amigable recepcionista y fueron a la habitación, recogieron sus cosas, se tomaron de las manos y al pensar en su hogar apareció el polvo dorado a su alrededor, habían llegado a casa.

—¡Qué bien que la pasamos! — exclamó Rin mientras se acercaba a un estante para colocar la pequeña caparazón que le regaló su novio.

—Sí, visitar una playa fue una gran idea Rin.

Pasaron la noche tranquilamente, a la mañana siguiente prepararon el desayuno juntos, Rin preparó rollos de canela y Obito se encargó de preparar té con leche.

—Gracias por la comida — dijeron al unísono y comenzaron a desayunar.

—Cariño —habló Obito

—¿Qué sucede?

—Ya que nos tomamos bastante tiempo de vacaciones ¿qué te parece si nos seguimos poniendo al día?

—¿Te refieres a que continuemos con nuestra charla?

—Sí, bueno si tú quieres.

—Está bien pero ¿te parece bien si lo hacemos como hasta ahora?

—¿Tú dices contar un poco y luego tomarnos una pausa?

—Sí, como la historia es bastante larga y no muy agradable creo que es mejor que nos tomemos unos intervalos para hacer la charla más amena.

—Está bien.

Luego de desayunar y ordenar la cocina se dirigieron al sofá, iban a retomar su charla.

—Bien déjame ver ¿en dónde me quede?... Ah sí, ya recuerdo.

Y así Rin se dispuso a continuar con su parte de la historia.