Eternally In Love

Día de campo

"Tú y yo y nadie más, teniendo sentimientos que nunca había sentido" Little Mix

A la mañana siguiente Obito despertó, un rico aroma venía de la cocina, así que después de asearse fue directo allí.

—Buenos días dormilón —dijo Rin, estaba  preparando el desayuno.

—Buenos días Rin.

 —Te estoy preparando el desayuno, espero que te guste.

—Por supuesto que sí, tu cocinas delicioso Rin, Obito estaba ansioso por probar lo que Rin le había preparado.

—Yo también recogí flores — ella había imitado la sorpresa que le había hecho Obito la mañana anterior.

—Que lindas rosas Rin

—Son unas rosas como las que tú me quisiste dar a mí aquella vez — ella se refería a la vez que Obito le había querido confesar sus sentimientos y no pudo.

—Gracias Rin

—Como tú no me pudiste dar las rosas que me compraste aquella vez yo quería ser quien te de unas a ti.

—Están muy lindas

—Que bueno que te gustaron ¿quieres probar el desayuno?

—Sí, me encantaría

Tras terminar el desayuno y dejar todo en orden los chicos prepararon todo para su día de campo. 

Encontraron una hermosa pradera y armaron su picnic allí, pusieron un mantel cuadriculado sobre el césped y dejaron el cesto y sus bolsos allí.

—Rin, el desayuno que preparaste hoy estaba riquísimo y ahora estos bocadillos que hiciste estan igual de buenos.

—Que bueno que te guste mi comida, pero tengo que decir que tú también cocinas muy bien Obito.

—¿Eso crees?

—Por supuesto

—Puedo cocinarte cuando tú quieras Rin — exclamó Obito con un tono muy entusiasta.

—Muchas gracias — contestó ella con una sonrisa.

Habían probado algunos de los bocadillos que habían llevado y habían recorrido la zona, luego se recostaron sobre su mantel. Obito se había quedado dormido y Rin lo observaba.

—Obito estoy tan feliz de volver a estar a tu lado — pensó Rin mientras acariciaba suavemente su cara.

Obito había despertado después de una siesta.—Lo siento ¿me dormí por mucho tiempo —cuestionó el chico 

—No, solo te dormiste por un rato

Obito había visto unas lindas y pequeñas flores cerca suyo, recogió una y la puso a un costado del cabello de Rin, sobre su oreja izquierda.

—Que bonita que te ves con esa flor — dijo Obito sonriéndole a su novia.

Rin se sonrojó — ¿Tú crees?

—Por supuesto que sí, eres la chica más hermosa que vi en mi vida.

Rin sabía que Obito no mentía, para él Rin era la mujer más hermosa del mundo, Rin se movió un poco para quedar sentada más cerca de él y lo abrazó.

—Obito te quiero tanto.

Obito le devolvió el abrazo — Y yo a ti.

—¿Puedo preguntarte algo cariño?— a Rin le gustaba llamar a Obito de esa manera.

—Dime

—¿Te parece bien si antes de que yo siga contándote lo que sucedió mientras te esperaba, me cuentas que fue lo que pasó contigo?

Obito puso una expresión de amargura en su rostro. —La verdad que no me hace ninguna gracia tener que hablar de eso pero si tú quieres saber está bien. 

Se soltaron y quedaron sentados uno frente al otro.

—Ánimo cariño, se que es difícil pero tu puedes.

—Gracias, tu siempre estas dándome ánimos cuando las cosas se ponen difíciles —Obito suspiró —Bien te lo contaré.

Y así Obito se preparó para contarle a Rin que sucedió tras su última misión juntos.