Mañana incómoda

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"Estás en mi mente, me siento algo nerviosa pero me gusta" Charli xcx

Habían pasado la noche afuera, comieron los bocadillos que habían preparado y durmieron sobre su mantel. A la mañana siguiente recogieron sus cosas y volvieron a la casa.

—Yo preparo el desayuno —dijo Obito.

—¿Quieres ayuda?

—No te preocupes yo me encargo — Obito quería prepararle algo a Rin en agradecimiento por los abrazos y las palabras de aliento que Rin le había dado el día anterior.

—Bien, mientras tu cocinas yo iré a tomar un baño.

—De acuerdo.

Rin subió las escaleras, en su dormitorio tenía un baño para si misma, era la primera vez que lo iba a usar desde que vivían allí. El cuarto de baño tenía un jacuzzi. Rin cargó la bañera y la llenó con agua y espuma al mismo tiempo que se quitaba sus prendas.

—Veamos que tal está—pensó mientras metía un pie en el agua —Esta muy bien— Rin había entrado por completo al agua y se acomodó

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—Veamos que tal está—pensó mientras metía un pie en el agua —Esta muy bien— Rin había entrado por completo al agua y se acomodó.

—Este baño está increíble, como me gustaría que Obito también estuviera aquí —Rin se dio cuenta de lo que acababa de decir y su cara se puso de un rojo intenso — ¿pero qué estoy pensando?— Rin ocultó parte de su cara bajo el agua para esconder su rubor.

—¡Bien, al horno! — Obito había preparado unas galletas de limón. —Ahora haré algo para beber ¿qué podría ser?

Mientras Obito pensaba sobre su desayuno se preguntó por Rin. —Me pregunto ... ¿qué elegiría Rin?

En ese momento recordó que Rin estaba tomando un baño.

—Rin está bañándose —pensó— ¿estará tomando una ducha o tal vez ...? — Obito se sonrojó y negó rápido con su cabeza  —¡¿Qué rayos estoy pensando?! debo preparar el desayuno.

Las galletas estaban listas, Obito las colocó en un plato y las llevó a la mesa, para tomar había preparado chocolate caliente.

—Bien ya todo está listo, espero que le guste, a todo esto como tarda Rin —pensó —¿Debería llamarla o esperar? si esperamos mucho tiempo el chocolate se va a enfriar.

Obito tragó saliva había decidido subir y buscar a Rin. Subía los escalones lentamente con la esperanza de que Rin lo encuentre a medio camino y él no tenga que subir, llegó a la puerta de la habitación estaba semiabierta.

—R-rin —Obito estaba nervioso ¿que tal si veía algo que no debía? ella no contestó, tomó aire y abrió la puerta.

—No esta aquí.

Al voltear a su izquierda Obito vio una puerta cerrada.

—Esta habitación tiene un cuarto de baño.— pensó

Obito escuchó el sonido del picaporte y se puso tenso, Rin abrió la puerta, estaba usando una pequeña bata blanca.

—R-rin —todo el rostro de Obito se enrojeció.

—¡¿Qué haces aquí?! —gritó Rin a la vez que se ocultaba tras la puerta del baño, ella también estaba colorada.

—Lo-lo siento yo ... es que ... el desayuno está listo.

—Sal de aquí, deja que me cambio y bajo.

—S-si

Obito cerró la puerta de la habitación de un portazo y bajó las escaleras corriendo.

—¿Qué le costaba esperar un poco más? — dijo Rin mientras salía del baño. Estaba algo molesta por la intromisión, se quitó la bata y comenzó a vestirse, sus mejillas aún estaban rojas.

La mañana había empezado un poco extraña, ambos esperaban que las cosas no estén tan incómodas durante el desayuno.

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